Inframundo ~ NamGi~

D I E C I N U E V E

YoonGi.

Hijo de puta...

- Y lo dices así?- estaba tan enojado, que solo podía farfarullar, mi ira era tal, que nisiquiera el grito podía desgarrar mi garganta.

Me incorpore con calma y lo enfrenté, con mis ojos vampiricos llenos de dolor y venganza.

Que ciego había sido.

Mi "padre" suspiró.

- Su recuerdo me atormenta, YoonGi. Crees que podía dormir por las noches?

- Por lo visto si- espeté  cerrándo mis puños colérico- me querías matar a mi por el mismo "crimen"- hice comillas con mis dedos- aquí de solo recordar el cuerpo calcinado de Jungkook, hizo que avanzara hacia él,  poseso de la rabia- Como pudiste tocarlo? Como te atreviste a mentirnos!- grité por fin- Como carajo osaste en mirarnos a la cara como si nada, envenenando nuestras mentes?!- le escupí la cara- me das asco.

Él me abofeteo mostrando sus colmillos con ferocidad.

- Eres un maldito mal agradecido! Junkook, recibió su  merecido. Yo te perdone, porque  no quería derramar más de mi sangre...pero me equivoqué...debí haberte matado de inmediato.

Fruncí el ceño maquinando sus palabras, palabras, que ya no  hacían más que avivar mi odio y repulción que sentía.

-Sí- contesté- debiste matarme cuándo pudiste. Sabes porqué?, porque yo te mataré  ti, maldito desgraciado.

Mi padre desenvainó la espada y la blandió contra mi, lanzaba a matar y aquí supe que no debía titubear ni por un segundo, un movimiento en falso de mi parte, y sería mi fin.  Aunque, si algo supo enseñarme, fue a esquivar y atacar, cuándo le dí el primmmer derexhazo, sus ojos brillaron negros de ira.

- COMO TE ATREVES A LEVANTARME LA MANO, MIN YOONGI?! COMO OSAS A GOLPEAR A TÚ PADRE?!

- Tú ya no eres mi puto padre.

Me abalancé contra él estrellando su cuerpo en el suelo rocoso, aunque aupo deshacer mi agarre, pues me golpeo con su frente aturdiendome y ahora, era él quien llevaba la ventaja y sin perder el tiempo, la enterró en mi carne. Grité y traté de quitarlo de encima, pero no pude, su espada, se había incrustado en el suelo, me tenía a su merced, listo para asesinarme.

Y ese era su plan

- Bien- dijo- como yo ya no tengo hijo, y tu no eres mi sangre- aprisiono mi garganta, sentí como poco a poco mis huesos de rajaban-  te mataré sin piedad.

Pero antes de que pudiera cerrar la mano, algo o alguien se lanzo contra el con furia, empujandolo lejos de mi, posicionandose en modo de defensa, frente a mi protegiendome. Le gruño a mi padre con un pequeño rugido incluido...

Reconocí de inmediato a la persona.

- Joonie?