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Morir.

Esa era la desolada palabra que se había quedado implantada en su mente, inundandola. Eso quería debido a lo que había pasado momentos atrás.

Y... Pobre de él. Porque no dejaba de morderse las uñas, caminar y brincar de un lado a otro de la casa, pelearse con el cojín de su sofá, suspirar, gruñir, maldecir al aire, jadear, ir a la cocina y comer por gula, mirar por la ventana, tomar su móvil para mirar el chat y dejarlo en el mismo sitio, tumbarse, sentarse y levantarse, ir hacia la puerta principal y volver sobre sus pasos... Simples consecuencias de un piropo que alteró sus hormonas, su sistema nervioso, su cabeza y su corazón.

Actualmente se hallaba acostado en su cama, mirando el techo y reflexionando sobre todo lo que oprime su pecho y hace que se maree.

Volvió a tomar su móvil y con la pantalla apagada lo observó. ¿Estaría bien enviarle un mensaje? ¿Hablarlo con algunos de sus hyungs? Resopló frustrado. Tenía un lío en la cabeza.

Resulta que tras aquella frase se produjo un cortocircuito en su cabeza, le respondió algo seco pero muy alterado, a lo que Taehyung acudió a reír. Le había parecido muy linda la reacción, pero por miedo a que lo mandara a otro lugar decidió inventarse una excusa y terminar la llamada con Jungkook. Debido a eso se despidieron de forma calurosa y Kook empezó a comerse la cabeza desde hacía ya una hora. Y seguía así.

Cómo no, estaba perdiendo su juicio. Decidió llamar a Yoongi y explicarle todo lo sucedido. Este le aconsejó que durmiera, descansar era lo mejor que podría hacer para despejarse un poco y luego intentar aclararse. Que tuviera cuidado y que si quería que hablara con alguien para salir y pasear.
El chico asintió ante todo lo que le decía y trató de hacerle caso.

Cumplió en una parte, porque le envió un mensaje a Hoseok pidiendo que pasaran la tarde de mañana juntos para distraerse. Hobi aceptó muy gustoso, tenía cosas que preguntarle al menor.

Pronto decidió ducharse y ponerse el pijama que consistía en un pantalón de algodón holgado azul marino y una camisa de asillas blanca. Se acostó en su cama y por arte de magia pudo dormirse.

Daba gracias a que ya era jueves. Hoy y un día más y bienvenido sea el fin de semana.
Todas las mañanas tenía la misma rutina así que no se demoró demasiado en salir y llegar a la Facultad. Allí lo esperaba Hobi.

-¡Hola Hobi!

-¡Hola Kookie! ¿Cómo te va?

-Por ahora... Tengo un sueño...

-Alguien se va a dormir en alguna clase~

-No me digas...

-¡Por cierto!

Exclamó con muchas energías, cosa que a Kook no le sobraba.

-¿Voy a tu casa y nos vamos por ahi?

-Ah, no hace falta. Tenía pensado ir al parque, ¿te viene bien?

-¡Claro! Podemos tomar un helado y jugar con el agua del lago.

-¡Si!

-Miren que tenemos aquí... El par de energéticos

Dijo una voz familiar.

-¡Hola Yoongi hyung! ¡Hola Jimin!

-Hola chicos~.

Saludó Jimin.

-Qué ganas de volver a casa y dormir...

-Hoy estamos igual hyung... Yo también estoy agotando...

Jeon hizo un puchero y bostezó junto con su hyung. Hobi y Jimin solo acudieron a reír.

-¿Vinieron juntos?

Cartas de flores [Vkook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora