Jeon JungKook, es un chico "común". Comprometido a los 17, para no "desperdiciar" (como diría su madre) su belleza, sumándole un futuro que escribir y habilidades recién encontradas harán de su vida un infierno. "Hasta que la muerte los separe" es...
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«Bésame, TaeHyung bésame como antes. Bésame, por favor» Y TaeHyung se acercó en dos pasos al menor sin dejar de mirarlo a los ojos, aquellos ojos brillosos que lo miraban con anhelo siempre y tomándolo de las mejillas con sus grandes y varoniles manos lo besó.
— Un beso en la frente no era precisamente lo que esperaba de tu parte —dijo JungKook con un suspiro. V se mantenía tan cerca del menor que no lo dejaba pensar con claridad.
— Un beso en la frente, según me dijeron es un sinónimo de amor JungKookie. — La manera en que el mayor de ambos lo dijo fue tan autentica que causo que el corazón del menor latiera fuertemente contra su pecho.
— Sigues diciendo que me amas, pero te fuiste. Me dejaste después de todo lo que pasamos. —Expresó el menor con voz aguda. La penetrante mirada de V lo estaba poniendo en estado de ansiedad así que decidió abrazarlo y esconder su rostro en el cuello del mayor. Con un suspiro tembloroso pasó sus manos blancas por la fina cintura del mayor y con un gruñido por lo bajo V correspondió el abrazo pasando sus brazos por el cuello del menor.
JungKook era ligeramente más alto que V y por ende tenía que estar un poco encorvado para poder lograr esa cómoda posición, pero a TaeHyung no le agradaba tanto ser unos centímetros menor así que se hizo más grande, haciendo que JungKook se aleje de el para mirarlo con una ceja alzada. No era posible que el mayor realmente haya usado su magia para hacer eso, pero solo para comprobarlo JungKook preguntó.
— ¿En serio has crecido 10 centímetros?
— De hecho, estoy parado de puntitas. —V sonrió con su hermosa box smile, sus mejillas se abultaron, JungKook no resistió más y lo besó.
TaeHyung abrió sus ojos demás, pero al ver que el pelinegro mantenía sus ojos cerrados los cerró igual. Sus respiraciones se mezclaron, JungKook recorrió con sus manos la fina cintura de TaeHyung, subiéndolas lentamente hasta situarlas en las mejillas del contrario.
JungKook perdió la timidez rápidamente, ladeando el rostro de V a su derecha, para poder profundizar el beso, mientras él movía su cabeza en la dirección contraria. Los labios rojos de JungKook se movieron lentamente contra los esponjosos belfos de V, causando que el corazón del primero martilleara fuertemente. Las manos de V bajaron desde el cuello del menor hasta dar a la diminuta cintura del mismo, agarrando fuertemente el traje de JungKook respondió el beso.
El beso había comenzado rápido pero tan malditamente tranquilo que hizo desesperar a V. Intentó tomar el control del beso trazando con su lengua el labio inferior de JungKook pero este último no le dejó. Con un pequeño gruñido por lo bajo el menor ingresó su lengua en la boca de V. La cabeza de JungKook estaba en la luna, gracias a esa divina sensación de su lengua tocando la de su amigo. «Tan endemoniadamente bueno.» Pensaba el pelinegro mientras su lengua se enredaba con la de Tae, chupaba el labio inferior del contrario con vehemencia, lanzó un pequeño jadeo de satisfacción en medio del beso, haciendo que Tae lo bese aún más fuerte. Pronto el aire se hizo necesario y tuvieron que separarse, lentamente mientras JungKook chupaba por última vez el belfo de TaeHyung, el delgado hilo de saliva que los unía lo rompió este último al relamerse los labios compulsivamente. Las respiraciones de ambos chicos era irregular, al abrir los ojos se encontraron la mirada del contrario. JungKook lo miraba con amor, mientras Tae lo miraba con lujuria, deslizó sus manos hasta situarlas en el pecho contrario mientras mordía su labio inferior. JungKook no podía dejar de admirar esos bellos labios carmín, los cuales estaban brillosos y maltratados.
