Extra.

994 124 14
                                    

Perdón.

En algo esta seguro, poco a poco comienza a dejar atrás sus inseguridades y al fin, después de tanto tiempo, disfruta de la vida. Incluso,  la escuela es divertida.
Inuyasha Taisho avanza con pasos lentos, pero los cuales lo están llevando a su felicidad.
Aunque, antes de que por fin sea libre, feliz y cálido, debe hacer algo. Es lo más difícil que una persona haga y tal vez, la que más duele.

Se debe disculpar con él.

Por eso, ahora se encuentra frente al espejo. Sonreí, odia hacerlo, pero lo hace y piensa que esta haciendo una mueca extraña y frunce el ceño.
Mira a sus lados, tratando de esquivar su reflejo y se odia por eso. Todo el proceso que ha tenido se esta arruinando por sus miedos...De nuevo.
Se da unas palmadas en sus mejillas, se obliga a verse y volver a sonreír, aunque duele hacerlo, pero no se permite apartar la mirada.

-Inuyasha, perdón.-- Empieza hablar.

~Perdón por las heridas que te cause todo este tiempo. Lamento tanto las lágrimas que derramaste cada día y los malos pensamientos que tuvimos en las noches.
Lamento tanto que dejarnos caer más de una vez. En verdad, lo siento.
Perdón por las sonrisas falsas que tuvimos que hacer frente a nuestra madre y perdón por no creer en nosotros.
Lamento por no defendernos y los golpes que recibimos, tanto físicos como emocionales. Por dejar que sus palabras se hundieran hasta el fondo.
Perdón por presionarte a caminar por esos pasillos, salones y calles. Hacer que bajaras la vista y soportar burlas.
Inuyasha Taisho, perdón por todo.~

Sonrie al darse cuenta de sus lágrimas.

-Perdón, Inuyasha.

Fin.

Hermoso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora