El oso abrió las puertas con su hocico y mucha cautela, los dos jóvenes que se encontraban grabando pararon todo para mirar la angustiosa escena en la que se encontraba el animal. Pensaron lo peor al ver al tierno osezco cargar a un Black Hat completamente inconsciente.
-Cam-bot, culminamos la grabación aquí.- Ordenó el doctor a su robot asistente y con unos gestos mandó a 505 que recostase a su jefe en la amplia mesa de ruedas cerca de ellos, Flug se quitó ambos guantes de la mano y se remangó ambos brazos.
-¡¿ESTÁ MUERTO?! - Gritó Demencia asustada, el oso la siguió con un quejido y la chica se volteó para tomar la rosa que este llevaba en la boca, leyó la nota que tenía amarrada sin entender de qué se trataba todo. Ambos miraron al doctor, siendo el único que podía dar razón a sus trágicos pensamientos.
-No, no está muerto... - Confirmó Flug con una mano frente a los labios de su jefe, demostrando que este todavía respiraba.
El doctor prosiguió a abrir con cautela la comisura de la boca ajena, sus afilados colmillos y lengua chorreando saliva verde.- Está respirando bien, y está salivando ah...normalmente, supongo. -Mencionó esto último con un poco de incomodidad, pero provocó suficiente alivio a los dos niños asustados frente suyo.
El doctor prosiguió a examinar la visión del demonio con una linterna de bolsillo confirmando que sus pupilas, cuales asemejaban a las de un felino, funcionaban correctamente.- Solo está desmayado.
-¡No seas tonto, puede estar en coma!, o tal vez solo necesite respiración boca a boc--¡OHhhhh! - Demencia exclamó con una sonrisa feroz, muy lista a empujar todo a su paso si no fuese por los fuertes brazos de 505 que la detuvieron.
-Gracias chiquitín, y... Demencia. Tu boca te huele a cebolla y dudo mucho que quieras que eso sea lo primero que huela el jefecito, además que hoy toca ducharte. - Exclamó Flug, haciendo que la muchacha se tape la boca inmediatamente, con un bufido de gato enojado proveniente de Demencia le devolvió a 505 su flor para luego reptar en cuatro extremidades a su habitación.
-¿Rorr? - Preguntó la criatura y le alcanzó la planta a su creador, Flug solo lo sostuvo y examinó un poco para luego meterlo en una bolsa de plástico resellable, guardándola en el bolsillo delantero de su bata.
-¿Me traes unas toallas del baño, porfis? Las necesito en un balde con agua caliente. - Preguntó con cariño al oso, y este asintió antes de ir en por su pedido.
Ahora el científico estaba solo con su inconsciente jefe.
Estaba preocupado, pero, ¿qué de malo podría pasar?. Solo necesitaba revisar la causa de su malestar e investigar cuál fue el causante de que esto sucediera para idear una solución.
Su laboratorio era bastante amplio y limpio, había espacio suficiente para acomodar la mesa donde se encontraba el ser de la oscuridad a un lugar sin mucho desorden y tratarlo hasta que despertase.
Al recorrer los pasillos de su frío laboratorio, Flug se sentía.. muy nervioso, pero no era un nerviosismo como el que siempre tenía. Sentía que debía hacer las cosas bien y perfectas o podría perder a su jefe, y eso lo angustiaba en proporciones más grandes de lo esperado después de tantos años recibiendo maltrato laboral.
Se sentía sumamente preocupado y responsable de él, era una sensación no muy agradable y el riesgo lo llenaba de adrenalina. Pero para dicha suya, tenía la oportunidad de analizar algunos aspectos del demonio que le traían curiosidad desde hace mucho, como comprobar si este poseía órganos parecidos a los humanos o si este tenía sangre fría o caliente, habían muchas cosas curiosas en él ..sin embargo, la cosa que más le traía curiosidad, pero le estaba negado por poder "poner en riesgo al universo entero", era sacarle el sombrero a la bestia.
Flug sin más llamó a algunos Hatbot-lers y Hatbot-sentinels a ordenar los enormes y pesados aparatos y demás artefactos que usaría para medir la presión, respiración y pulsos cardíacos de su jefe, también para realizar rayos-x.
Mientras los bots trabajaban, el doctor dejó a su jefe por unos minutos para salir y buscar la causa de tal accidente.
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Teorías de Amores Villanos
RomanceCuando el dueño de la empresa más grande para villanos y su leal científico e inventor abren paso a la curiosidad, se dan cuenta que su compañía no es para nada desagradable. Dentro de la suerte del destino y una peculiar alergia, el ser de la oscur...