Capítulo uno: "El chico de la caja"
Muchos podrían clasificar su vida como perfecta, fantástica o con muy buena suerte, su trabajo era realmente genial y la paga era buena, porque componer canciones tanto para grupos como para comerciales dejaba dinero, y eso le agradaba, a sus veinte años estaba ya ganando muy buen dinero, solo era porque claro era un genio musical y eso les agradaba a los productores con los que trabajaba, así que no debería quejarse, por lo menos por el dinero no.
La otra parte de su vida estaba compuesta por sus amigos que tocaban con él en un grupo improvisado que esperaba lanzar algún día, chicas que conocía y ligaba de vez en vez cuando su novia no estaba en la ciudad y sus padres que estaban divorciados y no les veía desde hace dos años. Una vida casi perfecta se podría decir.
El problema era que cuando llegaba a su departamento se sentía realmente solo, no había nadie que le dijera bienvenido, o que le esperase con la cena, era realmente solitario el estar en su departamento por las noches, y aún más no tener con quien compartir esos momentos en los que necesitaba apoyarse en alguien. Aún así guardaba silencio y mantenía su fachada como player insaciable, compositor exitoso y amigo divertido, ¿Para qué molestarse si no encontraría nada a sus necesidades?
Ese día fue en especial difícil, la composición para el comercial que estaba realizando no quedaba como quería y los clientes estaban ya ansiosos por tenerla, se quedó hasta tarde para poder terminarla pero no le sirvió de nada, la inspiración no le llegaba a la cabeza. Conformado a no avanzar más esa noche se fue a su departamento en su recién adquirida camioneta lo que le facilitó el camino de regreso haciendo veinte minutos hacía el estacionamiento del conjunto habitacional donde vivía.
Se bajó de su camioneta con su sudadera en manos y un portafolio lleno de papeles revueltos cuando en la puerta de los edificios vio una gran caja de al parecer una televisión abandonada en la entrada.
Se preguntó quién había sido el inconsciente que dejó su basura en el medio, los residentes a veces no tenían un poco de sentido común. Así que iba a patearla hacia un lado cuando notó lo pesada que estaba, así que abrió la caja para encontrarse a un muchacho hecho bolita dentro de la caja.
¿Estará muerto? Se preguntó con miedo, se inclinó a tomarle el pulso y pudo notar que tenía pulso, solo estaba dormido y profundamente herido de un costado y las piernas. Volteó hacia ambos lados ¿Llamaría a la policía? Seguramente era lo mejor, así que lo intentó pero la recepción no era buena y la lluvia que caía le dificultaba el trabajo.
No le quedó otra opción más que arrastrar la caja hacia el interior rogando porque el casero no le viera. Tuvo mala suerte.
—Joven Tomlinson ¿Qué lleva en la caja? —Preguntó perspicaz el hombre de cincuenta y algo años de edad.
—Cosas del trabajo —respondió Louis mientras pulsaba el botón del elevador.
— ¿Trabajo? ¿No es usted compositor? —Volvió a preguntar el hombre, con un leve interés.
—Lo soy, son sólo cosas de la oficina —agregó nervioso.
— ¿Puedo ver? —Insistió el casero. Para la buena suerte de Louis el elevador llegó, así que metió la caja y le sonrió al hombre.
—En otra ocasión —chasqueó la lengua, mientras se subía al ascensor.
Llegando al piso tres arrastró hacia afuera la caja y con facilidad la metió a su departamento, una vez dentro, la abrió por completo y sacó al herido joven.
YOU ARE READING
Sé Mi Mascota » larry stylinson
Fanfiction¿Qué se busca en una mascota? Que sea divertida, que te haga compañía, obediencia, que sea linda, agradable, que sepa algunos trucos... generalmente se tienen perros, gatos, hámsters, e incluso algún que otro animal exótico, pero no Louis Tomlinson...