Capítulo -7 "Deje caer mis lágrimas nuevamente"

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-Solamente tienes que atender el teléfono y separarme estás carpetas en "Entregados y pendientes" ¿Entendido?

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-Solamente tienes que atender el teléfono y separarme estás carpetas en "Entregados y pendientes" ¿Entendido?
.-me explicaba mientras me pasaba las carpetas- Las que tienen el sello rojo son entregados y los que no lo tienen son los pendientes -me observo- ¿Me estás escuchando?

-Si, Christopher .-respondi como si fuera su empleada- ¿Nada más?

-Si, solo pásame los llamados de estas dos personas -me paso un papel- Anota -me dió un lapicero- Brayan Sousa y Marcos Castillo. Para las demás personas que llamen, yo estoy en una importante reunión ¿De acuerdo? -camino hasta la puerta- ¿Crees que podrás?

-Si, Christopher -dije obvia- Ya vete y déjame en paz

Cerro la puerta de mi "oficina". Comencé separando las carpetas en "entregados y pendientes" no hubo ningún llamado hasta las 10:00 AM pero después el teléfono no paraba de sonar. Era un llamado tras otro y luego otro. No creo que ser la secretaria de Christopher Vélez sería tan agotador.

-Oficina de Christopher Vélez ¿En qué puedo servirle?.-contesté

-Que sensual suena cuando tú lo dices -dijo su voz tras el teléfono

-No juegues, hay como seis personas esperando que los atienda

-¿Más importantes que tú futuro esposo? .-contesto con seriedad

-Christopher tu mismo sabes que no nos casamos por amor así que no me vengas con estupideces

-______ te advierto que soy muy celoso -su voz sonaba sería, eso me preocupaba

-Bueno, como digas .-dije fríamente

-Ya nos vamos. Para eso llamaba. No atiendas a la gente que está en llamada de espera. Solo ven ha mi oficina -finalizo la llamada

Tome mi bolso y salí de la oficina. Varios hombres que trabajaban ahí me dedicaron miradas. Eso me puso nervioso pero no podía acelerar el paso porque quedaría como una nena huyendo. Solo intenté ignorarlos, es que no estoy acostumbrada a esto, mi cuerpo nunca llamó la atención de ningún hombre. Entre a la oficina de Christopher.

-¿Estás bien? .-preguntó al oír un suspiro de mi parte

-Si .-dije intentando fingir que sus empleados no me habían pasado la mirada por todo el cuerpo. Como el había dicho antes, era celoso

-No parece .-miro la pantalla de su computadora. Me senté en el sillón

-¿Te falta mucho? .-pregunte con impaciencia. Ya quería irme a casa

-Si .-respondio secamente

-¿Entonces para que me llamaste? .-dije de mal modo

-Estoy molestándote. Ni una broma se te puede hacer -dijo levantándose de la silla para que nos fuéramos. Preferí no responder tenia pensado unos cuantos insultos no aptos .

La Bella y La Bestia (CV)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora