Infierno [JONGKEY] ♥

09. "Redención"

Capítulo 09: Redención.

Jonghyun no sabía lo que les estaba pasando, lo único en lo que estaba pensando era en las puntas del tridente de Lucifer en el pecho de Key. El cuerpo de su amante todavía estaba contra el suyo cuando sintió que la puerta detrás de su espalda se abría y que sus brazos se separaban del enemigo. Todo después de eso fue demasiado rápido para que el ángel entendiera correctamente, cientos de soldados como él lo alcanzaron en una horda ordenada.

Las puertas se cerraron frente a sus ojos, lo último que pudo escuchar fue el sonido del cuerno de la Hueste Celestial. Una batalla había comenzado, afuera. Jonghyun de repente salió y bajó la cabeza para mirar el cuerpo en sus brazos. Vio la cara de Key, con los ojos cerrados y la sangre escapando de sus labios; su piel estaba más pálida de lo normal, ya no se movía y su atuendo tenía dos orificios de los que salía líquido rojo oscuro.

—No, no...

El ángel inmediatamente presionó su mano sobre la herida, pero se agregó a ella muchas más y no supo qué hacer. Con miedo e ira, dejó escapar un grito mientras las lágrimas corrían por sus bronceadas mejillas, y se inclinó para encontrarse con la frente de Key con la suya. La piel de este último estaba fría. Él ya no respiraba.

—Jonghyun.

Una voz lo llamó por su nombre, el nombre que su amante le había dado cuando se encontraron por primera vez. Pero no era la voz de Key, así que no importaba.

—Jonghyun, no queda mucho tiempo. —La voz lo llamó de nuevo. —Tienes que dejarlo a nosotros.

El ángel frunció el ceño cuando finalmente su cerebro asimiló quién era la persona que hablaba. Mirando hacia arriba, soltó un sollozo al reconocer el flequillo marrón de Rafael, el arcángel puso su mano sobre su hombro para capturar su atención y no perder el contacto visual.

—Escúchame, Jonghyun. No es demasiado tarde, ningún ser humano puede morir en el Cielo. —Dijo Raphael, su voz baja y suave, aunque apremiante. —Pero tenemos que cuidarlo ahora, de lo contrario, mantendrá los efectos posteriores.

—S-Sálvalo... —El ángel suplicó, sus ojos rojos y llorosos compartían el dolor que estaba lastimando su alma.

—Lo haremos, lo prometo. Pero tienes que dejarlo ir, por favor.

Jonghyun miró por última vez a Key, que seguía tan pálido y frío contra su pecho, y aflojó su agarre con dificultades, como si fuera lo más difícil que tuviera que hacer. Inmediatamente, unos pocos ángeles femeninos lo rodearon y se arrodillaron para tomar cuidadosamente el cuerpo del ser humano, levantándolo con cuidado.

Tan pronto como ya no sintió el peso de su amante sobre él, Jonghyun hizo un movimiento para traerlo de regreso, pero fue retenido por dos fuertes brazos. Incapaz de ponerse de pie, gritó mientras miraba a los curanderos llevarse a Key, seguido por Raphael quien les daba instrucciones.

—Cálmate, Jonghyun. —Otra voz, tan baja y suave como la anterior, le susurró al oído desde atrás. —Él estará bien, tienes que calmarte.

Sabía que las palabras no estaban destinadas a lastimarlo, sólo que escuchar su nombre humano pronunciado por alguien más que no fuera Key lo estaba enojando. ¿Cómo alguien más siquiera sabía sobre este nombre?

—Lo leí en tu mente. —Dijo la voz, y Jonghyun dejó de luchar cuando entendió que su propia mente estaba siendo leída en ese momento. —Tan pronto como te permitimos entrar al Cielo, pude leerlos a los dos. Vi todo, Jonghyun, todo lo que sucedió en el Infierno. Estás a salvo, ahora.