P.O.V Pandora
- se que suena algo depresitado pero te amo como no tienes idea y la luna es testigo de mi amor por ti. Hiciste que la frialdad de mi alma lo derrediste con el calor de tus brazos siento que estoy atado a ti aún que no se nada de el amor yo buscaré la forma más simple de el amor - agarro aire -¡Hazme un esclavo de tu ardiente amor! - grito a todo pulmo.
-yes, my Lord- susurre.
- esta bien si lo quieres pensar para mi no hay... Espera que dijiste- me miro con amsobro.
- dije que si idiota, yo también te amo - solté una risita al ver su cara era tan tierna su carita. Tengo que admitir que realmente amo a Sebastián y es el único al quien amo. Se levantó y me puso el collar alrededor de el cuello que tenía grabado te amo en francés. Después me miro de frente el noto algo pero el sonrio y me beso y yo seguí el beso. Puedo ver sus sentimiento y pensamientos se que cambio mis ojos a dorados pero es normal para mi eso.
Llegamos al salón de el castillo ahí estaban todos esperandonos. Se acerca hacía nosotros Gilbert.
- vaya pudiste y espero que trates bien a mi primita - amenazó Gilbert con su mano hecho puño.
- pensaba que te iba decir que no ya que conmigo tardó mucho en decirme que si - dijo el chismoso de Trino, trate de evitar enojarme - y espero que no lo haga por estar sola o por la maldición - susurro Trino. Mire a Trino y le dije en su mente que no era por estar sola ya que tengo telepatía pero ¿cual maldición habla? Diablos odio no recordar nada.
- oye Ele que tal si cantas una canción como en los viejos tiempos - dijo Trino seguramente para cambiar de tema.
- Si, tu cantas muy hermoso recuerdo antes de irte de el pueblo siempre les cantabas a los niños o decías historias, anectodas o leyendas - comentó Gilbert. Estaba a punto de golpearlo.
- ¡Andale por favor! - dijeron en unisonido ambos haciéndome un berrinche de niños pequeños y eso que soy menor que ellos.
-¡aghh!, esta bien cantare y sólo una- Respondi no muy contenta. Trino rápidamente fue por mi guitarra y me la dio - ¿cual quiere que les cante? - le hice una mirada a mis primos que estaban sentados en el suelo como niños chiquitos.
- la de "Voy contigo"- en unisonido dijeron ambos parece que se pusieron de acuerdo. Empecé a tocar la melodía que vino a mi mente.
Si sientes frío
Y hay mucha niebla
Si las estrellas
Esconden su brillo
Si mi princesaPerdió su castillo
Jugando en la arena
Solo recuerda
Yo voy contigoTe abrazaré
Cuando te sientas sola
Te enseñare
Como cruzar las olas
Te cuidare si estas dormidaTe encendere una luz en la mirada
Para que nunca te de miedo nada
Y vuelvas a soñar tranquila.Al terminar la canción todos me aplaudieron y fueron a sus habitaciones. Sebastian me acompañó a la mia pero derepende empeze a sentirme mal me agarré de la paréd y con mi mano libre la cabeza.
- Pandora ¿estas bien?- sonó preocupado. Mi cuerpo se movió pero agarró a Sebastián de el cuello y lo afixiaba, el me miraba confudido.
- ¡Tu no harás nada demonio ella no merece vivir! - Respondió una voz que no era mía. Puse toda mi energía para volver a controlar mi cuerpo cerré los ojos y volví pero caí rendida al suelo. Sentía que me faltaba el aire.
-¿estas bien?- se agachó Sebastián.
- Si, pero te lo juro esa no era yo - dije en ruego Sebastián extendió su mano.
- Se que no eras tú, oí la conversación que tuviste con el teniente Gilbert - me ayudó a pararme.
- No te hecho la culpa que la hayas escuchado está bien tarde o temprano tenías que saber algo - me miro confudido.
- ¿de que hablas? - pregunto Sebastian.
- Hay algo que hice en el pasado. Un pecado imborrable pero no fui la única también lo hizo Trino pero no te lo pienso decir por el momento - Respondi en voz queda - no quiero que te preocupes - espose una sonrisa falsa entre a mi habitación y cerré la puerta. Me recargue en la puerta y empecé a llorar. Odiaba mentirle pero no se lo puedo decir no lo recuerdo bien y quiero contárselo bien con mi memoria no confusa.
A la mañana siguiente como a las 6 de las tarde fuimos al pueblo donde está el maltido asilo.
- Si entra a los archivos busca a alguien que se llame Alexander Alonso no conozco su apellido pero su número es el 120 - le dije a Sebastian antes de separarnos. El sólo a sintió.
Llevaba puesto un vestido azul que me llegaba hasta las rodillas, un mandil blanco que es de la cintura hasta el final de el vestido, mis botas negras que llegan más abajo de las rodillas y mis mayas a raya de blanco y negro. Estába viendo el pueblo hasta que alguien grita.- ¡Por Dios es la loca de el pueblo! - grita una señora.
- ¡Miren es cierto es la que escapó de el asilo! - dijo un niño de 10 años o más. Hay vi que un hombre le susurraba algo a un policía que estaba con unos de los "doctores". Al verlo empecé a correr.
- ¡Oye detende! - dijo el policía y empezaron a perseguirme. Corrí hasta llegar a un callejón oscuro. Sentí que estaba a salvo pero me equivoque alguien me agarró de el estómago y con la otra mano de la boca.
- No puedes gritar o si no te va peor - me lo dijo al oído el Dr. Dumby. Reconocía esa voz perfectamente. El me inyectó algo. Quedé inconciente.
Desperte estaba en una camilla de el laboratorio. Me pusieron cadenas en los brazos y piernas. Vi mi brazo derecho me marcaron con un cuchillo una frase. Sangre sucia eso estaba grabado ahora en mi brazo.
- Vamos a empezar con lo que no pudimos hacer esa noche - dijo el doctor Dumpy acercándose con una jeringa en mano y la inyectó en mi brazo - este experimento es el 946. Es el experimento más peligroso que hemos trabajado y seguro que tu será la única que pueda sobrevivir de esto - sonrio con hipocresía. Empecé a sentirme mal no podía la cabeza, Sentía los sonidos muy fuerte aunque sean normales y tenía náuseas luego no vi nada.
- por favor... Sebastian... rescatame...- susurre hasta que no pude más y cerré los ojos.
Hola chicos espero que le haya gustado el capitulo y votar y comentar que yo con gusto contesto. Si tiene alguna duda hagamelo saber.
Bye ~♡
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Monochrome no kiss
أدب الهواةSebastián encuentra una joven chica sola, en un callejón llorando y pidiendo ayuda. El la rescata. -¿Cual es tu nombre señorita?- pregunto Sebastián. ella sólo lo miraba como si no entendiera. El miro la muñeca de la chica tenía un tatuaje. "119". ...