El día que encontré a Damian

VIII. La oportunidad.

Al día siguiente en el recreo Iván y sus amigos estaban reunidos en el patio platicando sobre su "gran hazaña" se reían de cómo casi una hora de clase Damian estuvo en el patio llorando pero nadie hablaba de tlacuache, sus padres hablaron con el director y aunque fue duro estuvieron de acuerdo de que lo expulsaran por lo que hizo, esa tarde Iván fue hasta donde él vivía y sin que nadie, ni siquiera sus padres los vieran le entregó la otra parte del dinero pero ni siquiera se despidió de él ni mucho menos le dio las gracias por haberse echado toda la culpa por él, simplemente se fue y lo dejó con el dinero en la mano, tampoco tanque ni güero lograron decirle adiós.

-¿supieron que a tlacuache lo mandarán lejos con unos tíos hasta que cumpla la mayoría de edad? Sus padres estaban furiosos con él- dijo el güero, de todos era a quien más le dolía la partida de tlacuache; fueron amigos desde primer grado mucho antes de que se empezaran a juntar con Iván y ahora se había ido para siempre.

-chale, que mala onda- agregó tanque.

Pero eso le causó gracia a Iván y se empezó a reir, no creyó que sus padres llegaran a ese extremo pero así fue; ya no podrían molestar a Damian en días, incluso semanas pero ya se habían divertido lo suficiente con él, podrían esperar hasta la próxima vez.

-vengan chicos, les disparo algo de la tienda para celebrar.

El tanque se fue tras su amigo pero güero no sabía si seguirlos, perdió a su mejor amigo por culpa de Iván y a este ni siquiera parecía importarle, pero sabía que no era conveniente tenerlo de enemigo, no es como si fuera a empezar a juntarse con Damian y Melissa, la verdad le eran indiferentes, sólo los molestaba por órdenes de Iván pero si llegaba a considerarlo bien quizá podría pedirles una disculpa sincera a los dos y dejarlos en paz pero sabía que con eso se ganaría la enemistad de Iván, debía considerarlo seriamente.

Los días pasaban y para Damian nada había cambiado realmente como él creyó, nadie decía nada del incidente ni se burlaban de él pero las miradas prevalecían, siguió el consejo de Jonathan sobre seguir como si nada y demostrar fortaleza ante sus agresores para que ahora ellos se sintieran derrotados. La frustración que sentía estaba disminuyendo, Melissa se encargaba de hacerlo reír y de mantenerlo a flote si estaba decaído, siempre lo ayudaba con los ejercicios de matemáticas y lo que no lograra entender de la materia, y él por su parte la ayudaba cuando miss Cindy les pedía colorear mapas de geografía o incluso traspasarlos a sus cuadernos, se ayudaban mutuamente y mientras trabajaban platicaban de un montón de cosas, la música de big time rush le levantaba mucho el ánimo a Damian; tenían cuidado de no reírse tan fuerte en clase para que no los regañaran; su desempeño escolar continuó como estaba desde el inicio.

A Iván si le daba cierta rabia ver a Damian tan feliz y que logró dejar el trago amargo atrás como si nunca hubiera sucedido, pero no podía hacer nada, si se acercaba a él miss Cindy o el director lo sabrían y ahora sería él quien estuviera en riesgo de ser expulsado, otra cosa que lo consternaba era que empezaba a notar a güero muy raro con el paso de los días, más callado, indiferente a sus conversaciones y cuando lo invitaba a él y a tanque a su casa ponía pretextos para no ir, igual cuando quería estar con los dos a la hora del recreo o en educación física; se dispuso a hablar con él y preguntarle que tenía.

-güero ¿Qué rayos es lo que te pasa? Desde hace días estás muy extraño, sé que ya no podemos molestar a cuasimodo pero podemos buscar otra forma de divertirnos.

-no es eso bro, es que... extraño a tlacuache, era mi mejor amigo. Ni siquiera me pude despedir de él.

-ay por favor no me salgas tan sentimental, era necesario para poner en su lugar a ese monstruo y lo logramos ¿no? A parte tlacuache era un inútil, lo unico que hizo bien fue la tarea que le encomendé y eso sólo por el dinero, por mi puede desaparecer para siempre.