Capítulo 9: Un cierto idiota rubio.

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Cada año en Resembool, hay un festival acompañado de una gran feria. Aprovechando que estaban ahí, Winry invito a Alphonse a pasar un rato agradable en la feria.

Aunque, apesar de que era un pueblo muy alejado y que pocas veces llegaban las noticias del país, el Mayor Armostrong y la abuelita Pinako, los acompañaron para evitar algún problema. Salieron alrededor del medio día para disfrutar el mayor tiempo posible.

-¡Vamos a subir a la rueda de la fortuna! Y después vamos a jugar algunos juegos de destreza.- dijo Winry emocionada, hacia mucho tiempo que no iba a distraerse del trabajo.

Alphonse no podía apartar su mirada de ella, tan llena de energía y alegría, una chica que no ocultaba sus verdaderos sentimientos, la chica que había estado buscando.

-¡Waaaah! ¡Esto es tan divertido!.- dijo saboreando un delicioso algodón de azúcar.

-Tienes razón, todo aquí es más tranquilo que en la ciudad. Es bellísimo.

Él había ganado todos los juegos de destreza de la feria y le regalo todos los premios a Winry y a su abuela, ambas iban con los brazos llenos de peluches entre otras cosas.

-Seguramente Ed estaría muy feliz aquí.

-Tienes razón. Pero parecía que estaba muy ocupado y por eso él no iba a poder venir.

Regresaron a casa cuando el cielo estaba comenzando a tomar el color del crepúsculo.

-¡Oh vaya! Hay una carta.- la abuelita Pinako se acercó al buzón de color amarillo en la cerca de madera de la casa y leyó el destinatario.- al parecer es para usted Mayor Armostrong, es del ejército.

-¿Umm?.- tomo la carta y la rompió con cuidado y precisión. Comenzo a leer y su rostro se puso pálido.

-¿Que dice?.- pregunto Alphonse ansioso, jamás había visto esa expresión en el rostro del Mayor.

-Edward-dono... Está hospitalizado. Está estable, pero recibió heridas muy graves y están comenzando a infectarse porque cayó en el sistema de alcantarillado.

-¡¿Qué porque?! ¿Qué fue lo que pasó?

-No especifican en la carta, pero urge su presencia Alphonse-dono.

-Si, ahora mismo me iré en el primer tren que salga a Central.

-¡Yo también iré!.- grito Winry al escuchar la terrible noticia.

-Edward-dono ordena que no vaya, señorita Winry.

-¿Eh?

-En la carta dice que no es necesario que vaya usted y que por su seguridad, permanezca en Resembool.

-¡Ese idiota no puede decirme que hacer y que no hacer! Yo iré con él, quiero ir con él.

-Pero Win...

-No me importa. Si el recibió tanto daño, probablemente fue el auto-mail quien le causó todos esos problemas. Tengo que ir y revisarlo ¿No fue por eso que me contrataron?

Aunque intentaron convencerla de quedarse, prácticamente se subió a la fuerza al tren.

El auto-mail estaba bien... Tenía algunas averías pequeñas que no dañaban el rendimiento del equipo...- Winry estaba muy preocupada por Ed. Durante todo el viaje no dejo de pensar en él.

Al llegar a Central, ya era un nuevo día por la mañana. Salieron en un automóvil militar que estaba ahi esperando por ellos. Los llevo hasta el hospital militar. Al dar su nombre en la recepción e identificarse como sus familiares, rápidamente los llevaron hasta el cubículo donde estaba Edward.

Polos Opuestos (FINALIZADA). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora