*Samuel*
Flashback...
-Quiero que te cuides cariño... Y si tienes algún problema no dudes en llamarme e inmediatamente estaré vieniendo a ayudarte en lo que necesites-.
-No te preocupes Samuel... No habrá momento en que te deje en paz. Solo te pido una cosa-.
-Dime... Te escucho-. Guillermo me miró algo extraño, como si algo le estuviera preocupando. Luego llamó a Rubén.
-Quiero que se cuiden mucho, que tengan cuidado en el viaje y que nada malo les pase porque me sentiría de lo peor si llego a saber que les ocurrió algún accidente. ¿Me lo prometen?-.
-¿Guille...estás bién?-.
-Si... Solo quería decirles eso. Ya, fuera de aquí que el tren se les irá y después les costará conseguir otro antes de que se oscuresca-.
-Bueno... Entonces le mandas saludos a todos verdad-.
-Claro que sí Rubén y espero que todos se cuiden-.
-Ya, nos vamos-. Dije al notar que el tren ya iba a partir. Me despedí de Guille con un beso en sus labios acompañado de un abrazo que transmitía tranquilidad. Rubén lo abrazó casí haciendolo levantar de suelo. Ambos lo regañamos, podría haber dañado a los bebes.
-Bién bién... Nos vemos amigo-. Ambos subimos al tren mirando hacia la ventana.
-¡¡Cuídense, nos vemos!!-. Gritó Guille desde abajo limpiandose una lágrima que caía por su mejilla.
Finalmente el tren partió y nosotros veíamos cada vez más pequeña la estación hasta volverse invisible.
Fin flashback...
Ahora que lo pienso ya de eso han pasado casi 4 años... 4 años en los que no supe nada más de Guillermo, ya que, de un momento a otro dejó de hablarme y también a Rubén, él me dijo que lo último que hablaron fue que se encontraba bién y que los bebés igual. Ya después bloqueó toda clase de contactos... Entre todos lo estuvimos buscando por una parte mis abuelos y familiares y por otro nuestros padres y amigos, pero nada, por ningún lugar nada. Y así pasaron 4 años... Yo ya terminé mi carrera y junto con José estámos trabajando en un hospital en Barcelona, nos trasladaron aquí por nuestras notas, pero no pensé que ibamos a estár en el mismo lugar. Él no tuvo problema en venir, porque, de una vez por todas termino con su novia y eso creo que lo tiene felíz. No me ha dicho lo contrario. Y yo pues... Ni perro que me ladre.
Bueno, aprovechando la ocación decidimos alquilar un apartamento a menos de 10 minutos del hospital, lo bueno es que tenemos todo cercano.
-Samu, ¿Me quieres acompañar a comprar unas lamparas?, creo que la casa está un poco oscura-.
-Vamos, así compro una alfombra-.
-Ok, pero no morada-.
-Ah....¿Y eso porqué?-.
-Es broma vamos, después se nos hace más tarde-. Salimos del apartamento en dirección a la tienda, como no queda tan lejos fuimos caminando.
-A ver... Era por ésta calle-. Creo que me perdí un poco. Mi orientación no es muy buena.
-¿Te prediste?-.
-No... Como crees-. Mentiroso.
-Ahg, menos mal que se como llegar. Sigueme-. Finalmente nos fuimos por otro lugar, en la dieccion que ibamos llegariamos a no se donde.
ESTÁS LEYENDO
Uno en un millón (Wigetta)
FanfictionComo puede ser posible y justo a mi y más encima los medicos dicen que esto le puede ocurrir a uno en un millón. Pero porqué a mí. Además me deje llevar por esa cara bonita que me cuesta odiar