♥Hijo de puta♥

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*Guillermo*

-¿Qué quieres Adrián?-.

-Lo que pasa es que te quería invitar junto con los niños a comer a algún lugar está noche... Pero veo que tu queridito Samuel esta de lo más bien en tu casa-.

-Y eso que te tiene que importar... Si el es el padre de mis hijos, es obvio que estará aquí para verlos-.

-¿Y tú que sientes al verlo así. Jugar con tus hijos y no prestarte atención a ti?-.

-Eso no se incumbre... Además no sé por qué me preguntas estas cosas-.

-Ok dejando eso de lado aceptas mi invitación ¿o no?-.

-Está bien... Solo porque a los niños les gusta pasar tiempo contigo ya que los haces reir-.

-Bien, entonces los espero ésta noche en el restoran que está en frente de unos departamentos-.

-Ok, nos veremos en un rato más... Hasta luego-.

Colgué la llamada con algo de duda, osea una invitación a cenar sabiendo todo lo que está pasando... Me parece extraño, aunque creo que serviría para hablar bien las cosas para que la duda que tiene Adrián si es que volví con Samuel sea confirmada. Pero no sé...

-¿Papi quién llamó?-.

-Era el tío Adrián... Quiere invitarnos a cenar-.

-Le dijiste que sí ¿Verdad?-.

-Claro hija, sabría que ustedes estarían contentos con eso-.

-Wiiiiii, le avisaré a mis hermanos-. Salió corriendo hasta el segundo piso para ir donde Nico y Sami.-¡¡Chicos vamos a comer con el tío Adrián!!-.

-¡¡Cuidado al subir!!-. Grité al ver que Ani de había tropezado con un escalón.

Minutos después Sami bajaba las escaleras con los ojos rojos, algo le habrá pasado para que estuviera llorando.

-¿Qué pasó hijo?-. Lo levanté del suelo ya que estiró sus bracitos para que lo tomara.

-No quiero ir con el tío Adrián... Me mira raro-.

-¿Como es eso?-.

-Me mira con odio, puedo notarlo-.

-¿Pero estás seguro?-.

-Si... Antes no me miraba así, era amable y me regalaba dulces. Ahora sólo lo hace con mi hermana y Nico-.

-Voy a hablar con él... No tiene porqué tratarte de esa manera-. Debe ser porque se parece mucho a Samuel...- Oye, ¿Qué tal si te llevo donde papá Samuel?-.

-¿De verdad?... Pero no quiero dejarte solo-.

-Tranquilo, tus hermanos estarán conmigo-.

-Bueno, pero ten cuidado sí... Estoy desconfiando del tío Adrián-.

-Entonces para que eso no pase haremos algo solo por tí-. A parte lo he pensado desde que llegamos de vuelta de Madrid.

-¿Qué cosa?-.

-Que te parece que nos vayamos a vivir a la cuidad donde están los abuelos-. Tomé mi celular para marcar a Samuel, en el momento que contestó Sami gritó de alegría.

-¡¡Quiero irme mañana!!-.

-¿Alo?¿Está todo bien?¿Guillermo?-.

-No paso nada, solo es que Sami está feliz por una noticia que le di-.

-¿Podría saber aquella noticia?¿O es secreta?-.

-Luego te explico...ahora necesito que me hagas un favor-.

Uno en un millón (Wigetta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora