Más cerca que nunca

625 26 4
                                    

Nerviosa, asi era como me hacia sentir pensar en Draco, mi cabeza no dejaba de dar vueltas sobre lo que estaba ocurriendo entre nosotros dos. Mañana tendriamos algo asi como de cita, y me entusiamaba la idea de que conociera uno de mis libro favoritos, pero la pregunta realmente importante era...¿Me estaba enamorado de él?, de Draco, ese chiquillo que me hizo llorar en segundo, de ese adolescente que nos fastidió tanto, sonaba mal, pero podía ver que ya no era así, y como dijo una escritora muggle, "las personas cambian, pero no su pasado", y a mí ya no me importaba lo que fue, me importaba lo qué era, en lo que se queria convertir, en un chico mejor de lo que se pudiera imaginar alguien, y yo quería estar con él para apoyarlo, para hacerle saber que no estaba solo y tomarle de la mano.

Así que en efecto, estaba enamorado de Draco Malfoy, de ese chico de mirada triste, pero en sus mejores momentos un chico de una sonrisa resplandeciente, de un buen escucha, de alguien con  un sentido del humor ironico y sarcastico,que me hacia soltar carcajadas. Estaba enamorada de él, y eso me aterraba, no por mi, sino por el, ya que veia que él simplemente no estaba dispuesto a darse una oportunidad con alguien o creer que le pudiese gustar a alguien, ya que como él diría, ¿ Quien quisiera estar con un exmortifago?. Pero se valía soñar, así que prefería pensar en que yo pudiera llegar a ser su excepción.

Me quedé pensando en él, en sus sonrisas ladeadas y su forma de mirarme, hasta que por fin pude quedar me dormida.


 

****

Por fin había llegado el sábado, y hacia un estupendo clima, ni muy caliente ni muy frio, así que salí de mi cama con buen ánimo para ducharme y arreglarme, aunque con cierta sensación de vértigo por los nervios. Cuando termine, empecé por preparar algunas cosas, como la manta que llevaría para sentarnos, y como 
olvidarlo, el libro que le leería, después del desayuno pasaría por la cocina para llevar la comida. Baje al comedor, y pude divisar a los chicos, los cuales se encontraban ya desayunando. Me acerque a ellos y los salude tomando asiento a la par de Neville.

-La primera salida a Hogsmeade-anuncio Harry- ¿listos para ir por unas deliciosas cervezas de mantequilla?-preguntó.

-Por supuesto-comento Ron, mientras los demás asistían enérgicamente con la cabeza.

-¿Y tú Hermione? ¿Lista para salir?, no te vi asentir o decir algo-me pregunto Ginny.

-En realidad-inferí nerviosa- no pienso ir a Hogsmeade hoy, más bien quiero quedarme para terminar con la tarea de Runas.

-Oh vamos Hermione, no seas tan aguafiestas-dijo Ron.

-Es la tarea Ron, el hecho de que a ti no te interesa la escuela no quiere decir que todos los demás pensamos lo mismo- le espete molesta.

-Tranquilos chicos-intervino Harry al notar lo tenso que se había vuelto el ambiente.

-Yo estoy tranquilo, es ella la que tiene un problema obsesivo con las tareas.

-Ya cállate Ron- le contesté molesta.

-Eres una mandona- replico Ron- me alegra haber terminado contigo, porque con esa actitud, ¿sabes?-dijo de manera cruel-ningún chico quisiera salir con una chica tan aguafiestas como tú, que piensa que una cita perfecta es ir a la biblioteca a leer un libro, solo un chico en serio demente haría eso por ti y lo consideraría genial.

-Ron basta-le ataco Ginny- no seas tan patán con Hermione, o te recuerdo que fui yo quien le dije a mamá que habías terminado con ella porque tu aun guardabas esperanzas de que volvieran.

Agradecí mentalmente a Ginny por eso, después de eso Ron se callo, auque por su expresión se puso aún más irritado. Pero mi mente estaba empezando a recordarme a Draco, lo dicho por Ron me había herido, inclusive note como un par de lágrimas rebeldes empezaban a resbalar por mi rostro, ¿acaso era una chica tan patética?, ¿Podría parecerle así a Draco?, pero no, Draco no era Ron, tampoco era como los demás chicos. Así que le dirigí a Ron unas palabras antes de salir de ahí.

-¿Pues sabes Ron? Yo no quiero a cualquier chico-le dije- y si eres tan tonto como para no importante la escuela, es tú problema, no el mío- y me levante de mi asiento.

-Y por cierto-dije girándome-será mejor que empieces hacer la tareas de pociones tú solo, o quizás te de igual y no te dignes a entregarla. Porque en lo que a mí respecta, no pienso hacer ningún trabajo contigo.

Después de eso salí de ahí lo más pronto posible, no quería parecer una histérica con los ojos rojos y las lágrimas en todo mi rostro, tenía que tranquilizarme, Draco no era Ron, él no podía considerarme así.

**** ***** ***** *****

-¿Estás bien?-dijo Draco.

-Sí- le conteste- listo para iniciar con La Sombra del Viento.

-Sí. Y a mí no me engañas, estuviste llorando.

-Lo sé, tienes razón. Pero no es nada

-¿A sí?-contesto él- sé que no eres una tonta como para llorar solo así como así, ¿Quién te hizo eso?-me insistió.

-Solo tuve una pequeña discusión con Ron

-Es un idiota-me dijo bastante molesto- ¿y qué te dijo ese estúpido exactamente?

-Ya te lo dije, no importa

-Claro que importa- me dijo acercándose a mí-dilo, no está bien que te quedes con todo dentro.

-Bueno...-suspire- les dije que no iría a Hosgmeade, y me ha dicho que soy una aguafiestas, que se alegraba que hallamos terminado, y que ningún chico se interesaría por mí, a menos claro, que este demente.

-¿Sigue aquí?-me pregunto molesto y separándose de mi para encaminarse hacia el castillo.

-No Draco-bueno en realidad no lo sabía- ¿qué piensas hacer?- le dije ya un poco preocupada, intentando que detuviera su caminata.

-¿A caso no es obvio? Pienso partirle la cara, mira que decirte eso, a ti, vaya que es un imbécil.

-Basta Draco-le dije fuertemente, lo que hizo que se detuviera- él no es importante, no vale la pena que hagas algo así, la violencia no sirve para nada.

-Y lo dice la chica que me golpeo en tercero-dijo ya un poco más tranquilo, sonriéndome.

Ya no lo recordaba, me ruborice apenada recordando ese golpe.

-Yo...lo siento, no debí hacerlo- le dije- pero lo que paso con Ron no importa

-Pero te hizo llorar-me dijo fijando su mirada en mí, yo desvié mi vista hacia otro lado.

-Hermione- dijo tomándose entre sus brazo, pude darme cuenta que lo hizo un tanto inseguro, así que lo abrace y acomode mi rostro en su cuello, sufraganica era agradable - eres una chica maravillosa, y cualquier hombre seria dichoso de tenerte, de tener a una chica inteligente, fuerte, capaz y con esa manía en la lectura, lo que debo decir que garantiza interesantes temas de conversación- dijo pegando su boca a mi oído- Así que ignóralo-continuo, y pude sentir su aliento rozando mi oreja- por hoy se salva de que no le parta la cara, pero no es justo que te haga sentir así, ya verás cómo llega un increíble chico a tu vida. ¿Quién no podría enamorarse de ti?

-Gracias- le susurre- aunque siempre hay alguien que no.

-Te refieres a alguien en específico. Porque si es así, es un idiota.

-No digas eso, sé que él no se podría fijar en mí, o tal vez si, pero creo que lo único que trata es ser amable conmigo.

-Así que hay alguien-dijo molesto- Pues suerte con ese idiota.

-No digas eso

-Oh lo siento-ironizo-olvidaba que sientes algo por él-me contesto deshaciendo el abrazo.

-¿Y cómo lo conociste?, ¿Quién es?- me insitio

-Olvídalo

-Vamos Hermione, dilo, así puedo advertirle si se atreve a lastimarte-dijo molesto

-No, no puedes

-¿En serio? Quisiera que vieras como lo hago

-No, no puedes-le repeti

-¿Por qué no? Dime- me contesto exasperado. Y como por inercia le conteste instantáneamente, ni siquiera medí lo que diría.

-Porque te verías muy patético amenazándote a ti mismo- eso lo paralizó.

Estoy contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora