"Si lo amas dejalo ir"

" Talvez estaba equivocada"

Después de lo que pasó en el descanso, volví a clase.

Estaba en Español. No hacíamos nada mientras la profesora hablaba por teléfono. Mi salón estaba raramente en silencio.

Mi whatsapp sonó con la canción de coger girl- Big Time rush.

Todos me voltearon a mirar y en ese momento, todos comenzaron ha hablar. Como si el sonido de mi celular fuera la señal que ellos necesitaban para ser el salón de siempre.

Desbloquee el celular. Mi madre me había hablado por whatsapp.

Su mensaje decía:

"Estoy afuera De tu apartamento hace como 30 minutos, ¿donde estas?"

¿Encerio? Mi madre aparecía de la nada y  me regañava por no estar en mi apartamento, por estar estudiando. No entiendo como una madre puede dejar a su hija solo para ganar dinero. Mi madre venia pocas veces a mi apartament y siempre terminabamos discutiendo.

"Estoy en clases" Respondi. Gire mi cabeza hacia mi derecha, donde estaba la gran ventana que tenia la gran vista hacia afuera. Nuestro salon era diferente a los demas. Todos eramos  unidos y nunca habian peleas. Siempre molestabamos, todos saliamos clases, todos perdiamos materias, aunque nos molestabamos, demaciado, nos respetabamos y apoyabamos en todo momento. Nos cubriamos cuando alguien hacia un daño o algo no permitido en la institucion. Aunque habian cosas que me molestaban, como que llevaran marihuana al colegio.

Mi celular volvio a sonar.

"Oh, Verdad, ¿A que hora sales? Voy a recojerte"

"En cuatro horas. Por favor, no vengas en el BMW" - Odiaba que mi Madre saliera en autos caros. Me sentia mal, ya que algunas personas del colegio no tenian la misma suerte que yo y eran becados. Mi mama presumia sin darse cuenta. 

-¿Que es esa cara, muñeca?- Me pregunto Jose abrazandome por la cintura.

Jose era como el mejor amigo de todos. Se iba bien con todos y era increiblemnte guapo. Con solo mirarlo transmitia confianza

Sonreí de lado. -Mi madre- Gruñi. Este se rio.

El timbre se escuchó. Lo que significaba, clase de inglés.

José me ayudó a levantar mi maleta y comenzamos a caminar por lo largo de los pasillos para llegar al preciado salón.

Muchos creían que José y yo éramos novios por nuestra confianza y tranquilidad al estar cerca. Manteniamos juntos, cojidos de las manos, abrazadoso el me comía de la cintura.

A lo lejos vi al chico de ojos azules mirandome, apoyado contra la pared y con brazos cruzados sobre su pecho.

-Ali ¿Estás bien?- Le mantuve la mirada fija al chico. No quería ser yo la que apartara la Mirada primero.

-Si.. si- Susurre. Creí que José no me había escuchado.

No fui capaz de Mantener la mirada intimidante del chico. Así que me gire hacia José, que ahora era el el que mantenía la mirada con el chico.

Lo empuje hacia el lado contrario del pasillo y volvimos al área de unos salones.

-¿Quien era ese?- Preguntó molesto Jose. Frunci el seño, está vez dirigiendo mi atención a el.

- No se quien sea- Admiti.

-Me estaba retando con la mirada- Me rei.

- Creí que las chicas sólo hacían eso- cuando termine de reirme, lo mire sería- ¿Porque estás celoso?

-Eres solo mía- me dio un beso en la frente. -Vamos tarde a clase- este se rio.

-Nunca te ha importado eso- Le dije. Este sonrió- Tengo hambre- hize un puchero y éste rio. Me cojio de la mano.

-Vamos a comer- Me señaló hacia la cafetería. Gemi. La cafetería quedaba en la otra esquina del colegio. Y para ser sincera, era demaciado floja para cAminar tanto. -Ok, yo te cargó.

Me ayudó a subir en un escalón, para quedar más alta y asi, fuera más fácil subir.

Se colocó de espaldas. Si un saltito y éste me agarró se los muslos. -Gracias- El sólo se rio y siguió caminando.

Apreté su pecho. Este se quejó- allá estaba el chico- Señale el pasillo por donde íbamos a entrar.

-Ya se debió de haber ido- Apreté su pecho con fuerza y rezaba para que el chico no estuviera allí todavía.

Después de cruzar el largo pasillo, José me apretó el muslo. -Te lo dije.

Giro hacia la derecha, pasando por la sala de espera. Me fijé en las personas. Estaba el ojiazul, mirándome, una mirada neutra pero profunda. A su lado estaba Nicolás y el otro chico.

-Mierda- Susurre.

Y la cagé. Había demaciado silencio, y mi "susurro" lo escucharon todos.

-Ok, no me creas- Sonrió Jose.

Despues, llegamos a la cafetería.

Llegamos, comenze a mirar que pedir. Y luego, de que la realidad me golpeara, mire a José- No tengo dinero - la carcajada de Jose se escuchó en todo el lugar.

-Tu, la niña con más dinero del colegio no tiene dinero- Rodé los ojos y lo mire fastidiada.

-Juro, que si no es porque te necesito para comer, te abría partido la cara- Respire profundo - No tengo efectivo, a menos de que allá un banco en el colegio y retirar dinero- Este asintió.

-¿Que quieres? - Pregunto sacando su billetera. Si un saltito de alegria.

Al parecer José no era tan idiota como creia. Me había equivocado de mi amigo.

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