¿Una Simple Empleada? | Yami / Atem y Tú

III

>>Chapter Three<<

>>¿Es Un Juego?<<

<<Las Leyendas Suelen Ser Más Interesantes Que La Realidad, Desearía Que Tú También Fueras Una>>

    Desperté viendo la ventana, había despertado a la hora correcta para mi suerte. Me levanté y salí, ví a una chica que estaba a punto de entrar en el cuarto de Atem, seguramente para despertarlo, rápidamente corrí y la tomé del bazo deteniéndola, la alejé un poco del cuarto para no despertar a Atem.

    ----¿Qué pasa? ----preguntó ella con un tono amable.

    ----Necesito que solo por hoy me dejes a mí despertar a Ate... ----me quedé callada por unos segundos---- que diga, al señor Atem.

    ----¿Qué? No, para nada, es la única oportunidad que tengo para verlo así ----quise reír, aunque me molesté un poco sin saber porqué.

    ----Te supliré hoy para realizar alguna de tus tareas la que gustes ----eso pareció que la puso a pensar.

    ----Limpiarás su cuarto ----me puse a pensar, si limpiaba su cuarto, podía enterarme de más cosas sobre él, pero tampoco quería quedarme ahí si él también estaba ahí----, ¿entonces? ----suspiré.

    ----Bien ----ella sonrió ampliamente.

    ----Asegurate de que realmente se despierte ----me dió la llave del cuarto y se fue.

    Volví a la habitación de Atem y entre. Él estaba bajo las sabanas, me ví en el espejo, estaba sonrojada, ¿pero por qué? Nuevamente lo volví a ver, comencé a hablarle en un tono bajo desde lejos, pero él parecía no reaccionar. Le hablé aún más fuerte pero continuaba de la misma manera.Me coloqué a un lado de la cama, para hablarle más fuerte, pero seguía sin moverse.

    Tomé su brazo y lo agité mientras le hablaba, comenzaba a irritarme. Estaba a punto de lazarme encima de él cuando sentí su mano tomando mi brazo, ni siquiera pude reaccionar, me atrajó a él, me puso a un lado de su cama y se puso sobre mí, la sabana cayó dejándome ver que tenía su pecho descubierto, ahora entendía a que se refería la chica al decir que "era su única oportunidad de verlo así".

    ----¿No te advirtieron que al despertarme debías mantener tu distancia? ----solamente estaba apoyado en sus brazos, por lo que estaba muy pegado a mí.

    ----¿Y por qué debería mantener distancia? ----conseguí que mis palabras salieran corridas, y parecieran que las dije con seguridad.

    ----Porque normalmente al ver chicas tan lindas en la mañana, bueno ----se acercó más a mí----, ¿por qué mejor no te lo demuestro? ----mi respiración comenzó a acelerarse al ver a Atem acercarse más, pero no podía dejar que me viera débil, debía parecer fuerte, más que él.

    ----¿Qué pasa señor Atem? ¿Sus nervios lo están traicionando? ¿O por qué se queda quieto? ----comencé a tratar de provocarlo.

    ----Tal parece que en realidad la están traicionando a ustéd ----ví fijamente sus ojos, era tan extraños, pero increíblemente profundos, y me quedé perdida en ellos, pero reaccioné cuando sentí su respiración juntándose con la mía, estaba a punto de besarme, puse mis manos en su pecho y lo alejé.

    ----¿Por qué harían eso? Ustéd no es lo suficiente para ponerme nerviosa ----tuve que morderme la lengua para guardar la gran sonrisa que quiso salir, lo empujé y me levanté----. Con su permiso señor Atem, debe arreglarse ----salí de la habitación en donde finalmente pude sonreír, le había ganado finalmente.

    Bajé al primer piso y puse la mesa para el desayuno. Continuaba alegre, pero al mismo tiempo estaba nerviosa, no estaba segura de que Atem se quedara sin hacer nada después de eso. Después de poner los platos empecé a servir la comida, Yugi bajó primero y le dediqué una sonrisa que él correspondió, se sentó en un sitio y comenzó a comer.

    Después, escuché que alguien más bajaba, al ver, para mi mala suerte, era Atem, se me quedo viendo con tal seriedad, que incluso sentí como un escalofrio me recorrió. Se sentó en una de las sillas, sin decir nada ni mostrar ningún gesto, esperaba que no estuviera así por mí. Cuando terminé de servir el desayuno subí al segundo piso.

    Esta era mi ocasión perfecta, podía arreglar el cuarto de Atem mientras él comía, solo debía apresurarme. Entré al cuarto, empecé arreglando la cama, después recogí la poca basura que había en el piso, ya solamente tenía que quitar el polvo de las cosas, terminé a tiempo, para mi suerte Atem aún no sabía.

    Abrí la puerta, salí y me choqué con algo, ese algo comenzó a caminar hacia mí, haciéndome retroceder y entrar nuevamente al cuarto de Atem, "algo" entró al cuarto y cerró la puerta detrás de sí, en ese momento, pude ver que era Atem, me maldijé internamente por mi pésima suerte.

    ----¿Qué hacías en mi habitación? ----respiré hondo antes de empezar a hablar.

    ----Esta vez me tocaba a mí limpiarla, y aproveché a hacerlo mientras ustéd comía ----respondí, pero mi voz salió algo temblorosa y era muy baja.

    ----¿Por qué ustéd está haciendo estoy hoy? Siempre es la misma chica ----comencé a ponerme nerviosa mientras pensaba una excusa.

    ----La chica tuvo unos problemas, me pidió que la supliera por hoy, pero no volverá a pasar señor ----Atem se comenzó a acercar lentamente.

    ----¿Y por qué no? Es más, ¿por qué no te asignan las tareas de aquella chica? Prefiero que tú seas la que vea todos los días al despertar ----ví su sonrisa burlona aparecer nuevamente.

    ----No... esa chica ya lleva mucho tiempo trabajando para ustéd, será mejor que se quede como esté ----esta vez yo empecé a retroceder.

    ----Justamente por eso, ya sería bueno que ella descansara, ¿no lo crees? Así que está decidido, a partir de mañana tú cumplirás sus funciones ----comencé a pensar como loca, tenía que evitarlo, pero no sabía cómo.

    ----Pero... ----antes de que pudiera decir nada me aprisionó contra la pared y puso sus dedo sobre mis labios.

    ----Pero nada, a partir de mañana, te quiero a mi servicio todo el tiempo ----de no ser él, se habría llevado un buen golpe, pero como siempre, mi mente había interferido, fuera lo que fuera, ahora trabajaba para Atem, y tenía que estar todo el tiempo con él.