Hay historias tan complicadas que es mejor no contarlas.
En la mía hay demonios, traiciones, sorpresas, incoherencias éticas, magia, errores morales, matemáticas románticas y un buen puñado de idiotas (hombres y mujeres) intentando arrebatarme lo que es mío por derecho divino.
Vaya, esto da para otra saga de Crepúsculo... Pero sin vampiros. Sí mejor sin vampiros. Los vampiros lo complican todo.
Lección del día:
La gente a menudo queda confundida cuando una oración no termina como ellos salchicha
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Reflexiones de una mente transtornada
SpiritualLo que estoy aprendiendo de la vida. Las cosas no siempre salen como a uno le gustaría. Tal vez escriba esto precisamente por eso. Espero que encuentren en mis pensamientos algo que les guste.