𝘗𝘪𝘻𝘻𝘢 & 𝘖𝘳𝘦𝘰

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Se acercó confundido, pero algo me decía que  yo estaba más confundida. O probablemente estábamos igual de confundidos.

— Oye...¿y Julian? ¿Y el resto? – preguntó Sean sentándose frente a mi, aún buscando al resto con la mirada de manera nerviosa.  

— No lo sé... creo que dijo que venía en camino pero... – el sonido de un teléfono sobre la mesa irrumpió en mi explicación.

Sean contestó y al responder la persona del otro lado de la línea, me daba miradas furtivas mientras jugaba con las servilletas, cosas como "no es justo" "¿por qué?" "Todo esto era tu idea" salían de su boca en lo que se suponían eran susurros, pero eran lo suficiente audibles ya que yo aún lograba escucharlo.

 Quitó el aparato de su oreja y tapó el auricular para hablarme. 

— Ve pidiendo lo que quieres comer, regreso en un minuto – acto seguido salió muy rápido del local y me aseguré de tener dinero porque por mi mente habían pasado las ideas de Sean huyendo de ahí.

Tomé el menú y decidí lo que quería, "pizza vegetariana" sonaba delicioso. Miraba la hora en mi teléfono y cuando me disponía a rendirme y a salir del lugar, Sean entró guardando su teléfono en uno de sus bolsillos.

— Lo siento mucho, yo estaba hablando con... –me miró entrecerrando sus ojos, confundido– ... espera, ¿ya te ibas? 

Me resqué la nuca sintiendo que mis piernas me harían caer directamente al suelo, gracias al hecho de que Sean ahora me miraba atento y eso me ponía aún más nerviosa — Verdaderamente, sí, pensé que todo esto se había cancelado...digo, los chicos no han llegado y  ya que saliste y no volvías, así que pensé que habrías regresado a casa... – dije sonriendo incómodamente.

Sean asintió y se quedó pensativo por un momento, pasó su dedo índice por uno de sus pómulos y finalmente habló.

Sean puso sus brazos cruzados sobre su pecho— Te propongo algo, ¿qué te parece si llevemos la pizza a casa? –sonrió dulcemente ante el hecho de que yo asentí, pero claramente mantuve la compostura. Carraspeó–. Y además, creo que podría presentarte a Oreo,  creo que probablemente se llevarían muy bien.

Mi corazón de fangirl explotó, Sean me quería presentar a Oreo, ¿saben lo que es eso? Es Oreo, es su perro y es la cosa más hermosa del mundo, Dios, esto no esta pasando, Ellen contrólate y responde normal, responde totalmente tranquila.

— Está bien, me encantaría conocerla – sonreí bastante emocionada, pero aún así estaba actuando muy calmada pero realmente me encontraba gritando internamente.

Pedimos la pizza, bastante grande por cierto, y tomamos un taxi hasta su casa, el trayecto fue totalmente silencioso, no dijimos ni una palabra y estuve atenta a mi teléfono ya que si llamaba Jeremiah tendría que inventarme algo.

Al llegar, la casa estaba totalmente a oscuras.

En la cocina, su madre había dejado una nota diciendo que ella y su padre habían salido a comer esta noche y que llegarían tarde, también que Serris y Sarah estaban quedándose en casa de unas amigas, en conclusión solo seríamos los tres.

Al entrar a la sala dejamos la pizza en el piso y nos sentamos quedando uno en frente del otro, sin decir nada, y me estuve preguntando donde estaba Oreo.

— Entonces... vegetariana ¿eh? – dijo Sean mirando la pizza vegetariana con rareza en su rostro y me hizo soltar una carcajada
— Exacto, en realidad está muy buena – respondí para darle una mordida al pedazo que tenía en mi mano y el negó rotundamente
— Lo siento, no me convence – dijo tomando la de pepperoni
— No creo que pueda confiar en alguien que no le guste la pizza vegetariana – dije cruzándome de brazos y dándole la espalda en forma de broma a lo que el río
— Y no creo que pueda confiar en alguien que no come carne – dijo haciendo lo mismo, así quedamos de espaldas.

Entonces de nuevo volvió el silencio y aunque no era incómodo, detestaba el hecho de no decir nada o estar en un lugar donde literalmente no decimos nada.

Dejé de respirar cuando la luz se apagó y pegue un brinco.
Sean comenzó a reírse y yo en medio de risas también, lo empujé haciendo que la pizza cayera en su cara y al quitarla su cara quedara roja a causa de la salsa de tomate. Tapé mi boca intentando reprimir las risas.

—¿Ahora quien es un tomate? – mierda no puedo creer que pensé en voz alta aquello
— Creo que ahora se invierten los papeles Ellen

Y al decir esto mi corazón dejo de latir, en serio todas las veces que la sangre había invadido mi cara Sean lo había notado, ¿por qué vida? ¿Que carajos te he hecho yo? Simple, existir.

Volvimos a quedar en silencio y di un brinco cuando sentí algo en mi espalda, aquello comenzó a caminar para después sentir su nariz fría en mi brazo y reí gracias a que me daba cosquillas, Oreo se subió en mis piernas y se acercó a mi cara para comenzar a olfatearme.

— Creo que le caes bien – dijo Sean y fue cuando me di cuenta de que ya nos encontrábamos hablando de frente de nuevo
— Eso creo - me dirigí a Oreo acariciando su cabeza - Creo que te caigo mejor a ti que a tu propio dueño Oreo
— Eso no es cierto - hizo una pausa - en realidad me caes muy bien

Lo miré fijamente, sentía que podía escuchar su respiración, a causa del silencio, no sé cuándo fue, no pude darme cuenta de cuánto tiempo pasó antes, pero el rostro de Sean estaba demasiado cerca, y me miraba fijamente a los ojos, sonriendo dulcemente al igual que yo.

Puso una mano en mi cuello y la otra sobre mi mano, comenzó a acercarme hasta el y cuando sentí sus labios rozar los míos, escuchamos la cerradura de la puerta abriéndose y los dos pegamos un salto a causa de la sorpresa.

Dios, que diablos acaba de pasar.

•••~•••

Okayyyyyyyy aquí está, wow que capítulo tan intenso, espero que les haya gustado demasiado; Ay Ellen, eso estuvo cerca :)

New girl [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora