Capítulo 9: Nue.

5.7K 515 141
                                    

Narra ______.

Acababa de salir de la casa, mamá me había pedido que fuera a buscar a Boruto, ya que llevaba bastante tiempo fuera y había llegado la hora de la cena.

Pensé en ir al local de las hamburguesas, un lugar bastante probable en que esté él, pero antes de iniciar mi búsqueda, una enorme bestia aparece no tan lejos de donde me encontraba.

¿Que— es— eso?

Parecía una especie de león, con serpientes saliendo de su trasero, y, aunque se veía gracioso, me calaba los huesos.

Boruto.— fue lo primero que pensé, apostaría lo que sea a que está involucrado en esto, o, por el contrario, estaría dirigiéndose para allá.

Así que, para evitar una desgracia, intento acercarme a la bestia, lo suficiente como para saber si él se haya por ahí, pero me equivoqué. Boruto, quien recién había pasado frente a mis narices, se dirigía para el sitio opuesto.

—¡Boruto-nii!— grito, corriendo a él intentando seguirle el paso.

Él se detiene en seco cerca de un pastizal, yo me detengo unos metros antes bastante confusa, ya que miraba una escena de forma fija. Me acerqué a él, y pude entender su estado de shock. Mitsuki y Sumire tenían una pelea a unos pocos metros de nosotros.

—¿Qué...? ¿Qué es lo que sucede, Boruto-nii?— me acerqué con preocupación a él.

—Aléjate de aquí, _____-nee, es riesgoso.— me detiene.

Mitsuki estuvo por lastimar de gravedad a Sumire.

—Sabes que no puedo hacer eso.

—Si...— asiente.—Lo sé, dattebasa.

—¿Qué harem—

Soy interrumpida por el choque de unas kunai, la pelea entre ambos iba en serio. Yo no me podía permitir eso, y, al parecer, Boruto tampoco, ya que ambos tuvimos la misma idea.

Detener el enfrentamiento; nos atravesamos entre el ataque definitivo de ambos, justo a tiempo.

De pronto, pude sentir de nuevo a la sombra que hemos estado persiguiendo, la cual... rodeaba a Sumire.

Miré confusa a mi hermano, para notar que su ojo se había activado, eso explicaría que el mío igual. Pero eso no fue todo, ya que un par de chispas de electricidad nos rodearon, abriendo un portal. Me encontraba asustada, mis piernas parecían gelatina, y por aquel portal se adentró Sumire.

—Boruto-nii...

—Acabaremos con esto.— sujeta mi muñeca, obligándome a entrar por el portal.

No sabía lo que nos esperaba ahí dentro.

Narra Inojin.

—¡Inojin!— escucho el grito de Shikadai, el cual se acercaba a mí.—¿Qué haces? ¡Acaso estás loco!

Yo me encaminaba a la bestia enorme que se encontraba a unos kilómetros de aquí.

—¡De seguro ahí está Boruto!— le respondo mientras continuó corriendo.—Y por ende, estará _____ allí.— musito para mí mismo.—¡No sé si está en peligro!

—¡¿Sabes los riesgoso que es ir para allá?!— me regaña.—¡Baka! ¡En todo caso, no sabemos si está ahí, ir sería el suicidio mismo!

Yo le ignoro y continúo, saltando de techo en techo, no podría permitirme saber que salió herida y yo no pude hacer nada al respecto. No... puedo permitirlo... no, simplemente no puedo.

El destino que nos une. ➸Inojin YamanakaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora