El Faro de Lobos

35. No pretendas ir de prisa

En el capítulo de hoy hay algún pequeño flashback. Espero que nadie se líe.

Agoney vuelve mañana a Barcelona después de pasar las Navidades en casa.

Han pasado 5 semanas desde la esquiada.

La mitad de ese tiempo nuestros chicos estuvieron juntos y fueron inseparables, la otra mitad Raoul ha pasado demasiadas horas encerrado en su cuarto con una angustia que no para de crecer en su pecho.

Desde hace 4 días solo abandonaba su habitación para asistir a unas comidas familiares que lo único que consiguen es empeorar la situación.

Ya conocemos al rubito... demasiado tiempo libre es mal consejero para su cabeza insegura.

RAOUL

Llevo horas encerrado en esta habitación, es la dinámica de los últimos 4 días. Es como sintiera que hay un monstruo tras mi puerta dispuesto a devorarme en cuanto la abra.

Aún recuerdo la conversación con mi hermano como si fuera ayer y ya han pasado 5 semanas, la mitad de ellas han sido las mas felices de mi vida.

- Buenas tete!

- Buenas. Qué tal el fin de semana de esquí?

- Genial, no tenía ningunas ganas de volver, la verdad

- Debe haber sido brutal porque eso de alargar el fin de semana no es muy de tu estilo. Tu eres más de no moverte ni un milímetro sobre el plan.

Siguió presionando. Qué habéis hecho a parte de esquiar? Vuelves a tener irritada la barbilla, hermanito. A María le va muy bien una crema con Aloe Vera, deberías comprar una, aunque lo mejor, claro, es afeitarse. Al final cómo os habéis arreglado con las habitaciones? Nerea y Pablo no se han quedado el lunes y el martes, verdad?

Y de repente...  me armé de valor.

- Tete. Hay algo concreto que quieras saber? Puedes preguntar sin miedo.

Los dos sabíamos que yo no iba a pronunciar las palabras pero al menos sí iba a dejar de negarlo.

- Cuanto tiempo llevas con Agoney?

- 1 semana. En realidad 11 días. Contento?

- Mucho. Se te ve diferente, se te ve muy feliz.

- Soy muy feliz, si. Hacía muchísimo tiempo que no me sentía tan bien.

- Me alegro de veras, hermanito.

- Tete, ya que te preocupan tanto las habitaciones, en la litera estábamos muy estrechos así que cuando Nerea y Pablo se marcharon nos cambiamos a la de matrimonio y hemos hecho el amor y ha sido precioso. Bueno, completo no, no sé si me entiendes. Pero no me había sentido así con Clara nunca. Y sí, me irrita la piel así que ya me puedes decir cuál es la crema que usa María porque él no va a afeitarse.

Me sentí tan bien! Tan libre, tan valiente, tan completo y tan yo.

Los 16 días que siguieron a esa conversación los recuerdo en una nebulosa de auténtica felicidad. A su lado las horas se desvanecían y cuando llegaba el momento de separarnos inventaba una excusa para que amaneciera un nuevo día pudiendo despertarme entre sus brazos. Apenas pasaba por casa lo justo para simular que dormía en mi cama. Reconozco que  empecé a odiar en especial este mueble de mi habitación. Me pregunto si seré adicto al sexo y no lo había descubierto hasta ahora? Y eso que aún no hemos llegado mucho más lejos, Ago se niega por el momento.

Pero a una mente enferma como la mía no la puedes arrancar del paraíso de un día para otro. Necesita un periodo de adaptación o puede llegar a creer que aquello no fue real sino fruto de su imaginación.