Un Poco De Estrés

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Pavel estaba siendo muy atento con el proyecto, los días iban pasando y mi humor era tan sensible últimamente que pocos se animaban a hablar.

Me sentía tan presionada por que llevaba la construcción un poco de retraso, tenía poco tiempo para mi y mi tiempo de ocio que extrañaba.

- Srta Blake, me a mandado Tari por usted, me comentó que está mañana habían quedado en ir a comer -
Pavel se acercaba, mientas se acomodaba la bufanda para poder hablar
- oh mierda, lo había olvidado, yo - voltie a ver a mi equipo que no dejaba de ver planos
- sin escusas comentó -
Di un fuerte suspiro y voltie a ver a los chicos
- saben que hacer y cómo hacerlo, son 3 días de atraso, los quiero reparar a la voz de ya, si hay que cortar cabezas lo hacen, si no sus cabezas son las que estarán fuera -
Voltie a ver al hombre, tome mi abrigo y salí directo con el hacia donde se encontraba Ontari
- Octavia, tienes que comer estas más delgada de cuando llegaste, pero claro como no has de estar si parece que el baño es tu gimnasio querida -
Estiro su brazo mientras sujetaba mi mano y me llevaba hacia ella, tal vez ella me veía más delgada pero yo me sentia inflamada, aun que a ser verdad no dejaba de comer solo pastelillos y baggets.

Subimos a su auto, fuimos en dirección a su restaurante favorito, tenía la mesa y todo reservado, estaba cansada, y a decir verdad de mal genio, el mesero nos dejó la carta, nada se me antojaba, mire a Ontari

- Escoge por mi, sabes que yo soy pizza y papás fritas -
Ella sólo sonrió y negó
- Ni parece que fuiste mujer de un chef -
La mire de reojo y sólo reí
- Estuvo casada Srta Blake?-
Pavel se unió a nuestra plática
- Si, un año de novios y tres de casados -
Suspire al terminar
- Vaya, Octavia, te pediré boloñesa es algo parecido a lo que podrías comer -
Si había alguien que podía cortar las pláticas incómodas era Ontari
- Suena bien -
Dije alzando los hombros, me sentía como cuando mi madre ordenaba por mi, jamás aprendí a escoger algo en algún restaurar.

El mesero tomó nuestra orden, nos llenó las copas de agua y nos trajo las de vino, esas copas especiales para el vino rosado favorito de Ontari, después de unos minutos, nuestros platos fueron servidos, recién había probado la salsa de la boloñesa y recibido el olor de los caracoles de Pavel, mi estómago se voltio por completo,no supe ni como llegue al baño, para vaciar mi estómago con mi almuerzo, el solo hecho de recordar el olor y sabor venía a mi todo lo que había desayunado y almorzado junto, después de unos segundos Ontari, llamo a la puerta

- O, te encuentras bien?-
Su voz se escuchaba preocupada
- No, por favor llevame a casa -
Deje salir con sinceridad, sali del baño directo al lavado de manos, metiendo agua a mi boca para dejarla salir
- Te cayó mal algo que desayunaste ? -
Su cara de preocupación y su voz se relejaban tanto
- No se, yo últimamente dejo las comidas de lado, solo vamos a casa, puede que durmiendo un rato se me quite -
Negué mientras me secaba la boca
- Octavia, Pavel me a comentado que te Ah notado rara últimamente, tienes más de un mes acá y se que no me importa pero te conozco y aún que tengas estrés tu no dejas de comer o te sucede esto, no estás ? -
Su mirada bajo a mi abdomen, abrí los ojos como plato, y negué
- Vamos Ontari, tanto año y jamás pasó dudo que algo así suceda -
Comencé a reír por nervios
- Haste una prueba casera, nada pierdes si no estás tal vez crea que es por estrés y no por que sufras algún trastorno, y si estás inmediatamente iremos al medico-
Se escuchó tan segura, yo solo negué y asentí
- Venga, vayamos a gastar más plata en esas madres, pero si si haré lo que digas -
Me jalo del brazo, fuimos a la mesa le dijo unas cosas a Pavel y me saco de allí parecía que ella tenía más ganas de salir de la duda que yo.

Llegamos a una farmacia,ella hizo todo yo solo jugaba en el móvil me sentía como adolescente con una madre preocupada

Liberada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora