Es Hora de Liberarse

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Todo estaba completamente oscuro, los gritos habían desaparecido, pero nuevos ruidos comenzaron a aparecer, una luz comenzó a hacerse notable, haciendo que las voces se hicieran más audibles y con entendimiento.

Abrí de apoco los ojos, sentí un leve cosquilleo en la nariz trate de quitarlo, pero alguien lo impidió, haciendo que un leve dolor se presentará en la mano, miré de un lado a otro, viendo como Lexa quitaba mis manos de mi cara

- Tranquila OC todo está bien -

Su voz era bastante suave y tierna, algo realmente raro en ella, mire mi mano y vi de que se trataba un grueso y enorme catéter, miré hacia arriba y las luces del cuarto de hospital  iluminaban por completo.

- Octavia, puedes oírme ? -

La voz de Bell era un poco más calmada que hace unos instantes, traía puesta su bata blanca y me miraba con aquellos ojos de preocupación

- Sí -

Hice un intento más para quitarme lo que me podría imaginar era oxígeno, pero esta vez fueron las manos de mi hermano quién ayudo a quitarme lo

- Bien, ya despertó te puedes ir -

Lexa se puso en medio de él y mío

- Soy su médico Lexa y es mi hermana, tengo que revisarla ver qué se encuentre bien ella y el bebé -

Estaba un poco confundida y atónita, podría decir que no recordaba por completo como había terminado aquí

- Que sucedió ? -

Pregunte mientras hacía a un lado a Lexa

- Tuviste un desmayo y una leve amenaza de aborto, Te tendremos en observación estos días hasta que el pequeño sangrado se detenga -

Lexa giro hacia a mí

- En pocas palabras, El susto de París, la Presión que estuviste sometida en el trabajo, el Ver a Lincoln, Y que Roan te enfrentará, que  Bell y Tú madre te golpearan en tu estado, provocó esto -

Puso su mano en mi vientre mientras daba pequeñas caricias en forma de círculos

- Y Roan? -

Tire la pregunta al aire sin más

- Cuidando a la dramática de tu madre, quieres que le avisé a Lincoln? -

Sus caricias pararon, acomodo un mechón que le tapaba un ojo mientras que con la mano libre buscaba el móvil en el bolsillo

- Busca a Roan, y ya yo me encargaré de Lincoln -

Soltó un suspiro y negó, mientras se giró a ver a Bell para andar en busca de aquel hombre

- Perdón Octavia, yo lo siento solo leí el artículo y me cegue por el coraje, no, no quería provocar esto, me odiaría de por vida si algo le pasará a tu bebé o a ti por mis ataques -

Se acercó a mi, tomando mi mano y besando de ella, no sabía que responder jamás me había golpeado y hablado así. Sabía que estaba arrepentido, era mi hermano al fin y al cabo.

Antes de poder responderle mi madre entro en un mar de llanto, acercándose a mi, besando mis mejillas y acariciando mi vientre, Roan entro detrás de ella, el pobre se veía tan mal, me daba lástima verle así

- Mi bebé, Octavia perdon, yo no quería pegarte pero es que Echo fue a la casa y me lleno de ideas -

Acaricie el cabello de mi madre cuando me dio la cara, entendía y comprendía ahora el por qué de su enojo

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