Todos nos quedamos observando a Estiven, quien se aleja de nosotros con suma elegancia, pero a leguas se le notaba que hechaba humo por la orejas.- Lo siento tanto Christian, no tenia idea de que ese imbécil era tu jefe. es más, hasta ésta mañana no tenia idea de que existía.- le digo a mi amigo, ya que por mi culpa o mejor dicho por un mal entendido conmigo, perdió su empleo.
-No importa mely, de todos modos el tipo es insoportable, ya habrá algo para mi en otro lado- me dice quitandole hierro al asunto, pero eso no hace que me sienta mejor.
-¿Y donde están los demás? - pregunto para evadir a Antonella, que aunque no ha dicho nada, no deja de mirarme de forma interrogante. pero fallo en el intento.
-Ellos tuvieron que irse, nosotros solo nos quedamos para buscarte. y a todo eso, ¿donde estabas y que te paso?-
Bufo en respuesta, pero como sé que no se callará hasta saber todo, mejor hablo de una vez.
-Discutí con el señor Carter y salí a tomar un poco de aire, me alejé demasiado y un desconocido trato de sobrepasarce conmigo, Estiven lo detuvo justo cuándo pensé que lo lograría-
-¿Y estás bien, no te hizo daño?-me dice Christian, mientras Antonella me abraza fuerte.
-Gracias a Dios no te paso nada- me dice mi amiga al oido.
Alcanzo a ver como unos guardias de seguridad pasan por nuestro lado en dirección a la playa, pero imagino que mi atacante a estas alturas ha de haberse ido.
Salimos de club, y caigo ante la insistencia de Anto para que me quede con ella a pasar la noche. Verdaderamente no tengo animos para lidiar con los drogadictos y borrachos que se amontonan en la escalera de subir a mi piso.
Una vez en la comoda cama que mi amiga me presta cada que vengo a su casa, me sorprendo a mi misma pensando en el señorito Estiven. Recuerdo como después de haberlo insultado y hasta agredido, mandara guardias a buscar a mi atacante, me alegra el hecho de que se preocupara por hacer que lo busquen. Aunque de seguro solo lo hace por el bienestar de su club, no es que se preocupe por mi ni nada, no tiene porqué hacerlo y a todo esto... ¿porque estoy pensando tantas estupideses, cuando en dos días tengo que ir a su oficina a discutir una demanda que el ha puesto en mi contra?, solo por capricho y por sentirse importante.
Me apresuro a desactivar la alarma cuando está apunto de sonar, me siento en la cama y bostezo de cansancio, no pude dormir ni una hora seguida y tengo el presentimiento de que no me espera nada bueno, me pongo una de las mudas de ropa que tengo aquí, que por cierto, es mas que la tengo en casa.
Mi atuendo consiste en una bluza de tirantes, y un pantalon por las rodillas color rojo vino.
bajo a la cocina y el olor a cafe recien hecho me indica que mi amiga ya está despierta.
Al verme me saluda con la mano y me hace señas con su dedo indice para que tome asiento en el taburete del desayunador, todo esto sin despegar los ojos del periódico.
-Anto, que pa...- ella me detiene con la palma de su mano para que la deje terminar de leer.
Al cabo de unos segundos más, porfin la escucho suspirar.
-Esto es el colmo, tienes que hablar con la editorial y comenzar a parar esos rumores yá- me dice mientras tira el periodico delante de mi para que lo lea.
"la señorita Melek Atzar y el aspirante a senador de new York Estiven Carter, quienes presuntamente tienen una relación extraoficial, protagonizaron un enfrentamiento en un club maritimo propiedad del aspirante a senador.
ESTÁS LEYENDO
seduciendo mi inspiración.
Random-señorita, es usted conocedora de la justicia?- -por supuesto señor- -haaa, y digame. ¿es usted prostituta?- -¡NOOOO! como se atreve a...- -y si es usted conocedora de la justicia y nisiquiera es prostituta, porque demonios le ha hecho pensar a med...