Control: Christopher Owen

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— Vaya, vaya... Quién lo diría. Gideon Miller es la pareja de mi mejor amigo de la universidad. Entonces creo que no hay duda, esto es cosa del destino.

Con una sonrisa Christopher Owen le dio una última inhalada a su cigarro para después tirarlo al suelo y pisarlo con una sonrisa en el rostro.

— Gideon, por favor llévame con él.

— ¿Con él? — Preguntó extrañado el joven alfa quien miró detenidamente al otro.

— Es mi amigo. No es peligroso.

Gideon dudo unos segundos pero al ver a los ojos a su pareja, no tuvo más opción que ayudarlo a bajar las escaleras y llevarlo en frente del alfa Owen, ambos se abrazaron con alegría mientras reían con gusto. Selene se acercó a Gideon quien miraba con recelo la escena.

— ¿No te hizo nada Selene? — Preguntó el joven alfa con seriedad.

— No, pero debo de admitirlo que es muy habilidoso, supo defenderse con agilidad y frialdad. Ciertamente no me quiero imaginar que tan poderoso puede ser cuando pelee en serio o en su forma de lobo.

Mientras ellos hablaban el par de amigos se seguía abrazándose mirándose mutuamente debido a los años que pasaron sin verse.

— Lo ultimó que supe de ti es que te volviste profesor o algo así Hunter, no te había visto desde que acabamos el viaje de graduación a las vegas.

— Yo lo que sabía es que te volviste el jefe de la empresa de tu familia, más nunca pensé que ese puesto también era de alfa. No lo puedo creer, eres un lobo como Gideon. ¿Por qué no me contaste? Si siempre nos contábamos todo, somos como hermanos.

Christopher miró un poco triste a su amigo, recordando muchas de las veces que trató de decirle la verdad de su especie pero había algo que siempre lo detenía. Por alguna extraña razón, algo dentro de él le decía que Hunter era la pareja de un lobo, y solo por eso no podía contarle porque no era su tarea contarle tal verdad.

— Eran muchas cosas en ese entonces, además es incierto como los humanos tomé la verdad de nuestra especie. Por eso preferí callar. — Dijo sereno el hombre de ojos de distinto color.

— Chris... Dios, no sabes cuan me alegra verte. Pero al mirarte veo que pasaste por mucho para llegar aquí, y en la situación que están ahora todos los lobos.

— Ciertamente amigo, no es el mejor momento en que nos reencontramos. Vine para traer un mensaje a la familia Miller de parte de los Sang d'Argent. Es acerca de todo lo que está ocurriendo, la crisis que nuestra especie está pasando. — En ese momento las miradas de ambos alfas se cruzaron y un ambiente de hostilidad se creó en ese momento, no le agradaba, a Gideon no le agradaba el alfa de los Owen y su lobo rugía por luchar contra él, ese mismo sentimiento fue transmitido al otro lobo quien también se puso en guardia al sentir la hostilidad del cachorro Miller.

— ¡Gideon! — De repente desde arriba apareció Gabriel y Caín quienes miraron al recién llegado pero Caín se sorprendió y una sonrisa inmensa apareció en su rostro para correr rápidamente a donde estaba su hermano y los lobos.

— ¡Christopher! — A toda prisa el chico se lanzó encima del hombre haciéndolo caer, pero sorprendido al instante al ver al joven encima de él.

— ¡¿Caín tú también?! — De la nada el hombre se levantó sintiendo otra mirada hostil esta vez era Gabriel quien no dejaba de mirarlo con furia. Gideon y Gabriel miraban con furia al alfa Owen quien solo trataba de calmar a su lobo interno que también empezaba a gruñir por pelea.

Sin Manada: Luna Azul [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora