Capítulo: La Decisión

934 101 1
                                    


Imperdonable

Capítulo Trece: La Decisión

Las dudas de Magneto sobre adónde iría Hank a aterrizar el jet se despejaron cuando un sector del inmenso patio trasero de la mansión se abrió revelando una pista secreta de aterrizaje. Charles le explicó que era parte de la construcción de su padrastro, Kurt Marko, junto con la bóveda para protegerse de una eventual explosión nuclear. Erik quedó boquiabierto y eso que costaba sorprenderlo.

Apenas llegaron fueron a ver cómo estaba Sean, que a su vez los aguardaba ansioso. Tras los saludos y felicitaciones por la venida de un nuevo miembro, organizaron una cena informal para distenderse y ponerse al tanto.

Erik no se apartó de su amante hasta que ya retirados los platos y mientras se congregaban para platicar en pequeños grupos, Raven fue a buscar a Charles bajo su apariencia humana. Salieron a la terraza para tener intimidad y respirar aire fresco. Se abrazaron y Raven volvió a felicitarlo y a expresarle lo feliz que estaba de verlo tan dichoso.

-Te irás esta noche, ¿cierto? – preguntó Charles sin leerle la mente -. ¿Por qué no te quedas? Al menos un tiempo para descansar. Sabes que esta es tu casa.

-Es tu casa, Charles – aclaró Raven -. Aquí empezarás una familia con Erik.

-Es cierto, ya la empezamos, pero tú no estorbarías.

Raven sonrió, tocada.

-Necesito regresar a Washington – confesó -. Verás, tengo un plan que si funciona salvará el pellejo del padre de tu futuro hijo.

-¿De qué hablas? – indagó Charles interesado.

-Magneto cometió un acto terrorista pero al mismo tiempo habló en nombre de muchos hermanos nuestros escondidos en la sombra por la vergüenza y el miedo. Con su discurso les provocó orgullo y esperanza. Son muchos, cientos de miles de mutantes que le están agradecidos. Cientos y miles de votantes, Charles.

-Ah, la política – suspiró Charles.

-Hay un sector importante de congresistas que sienten que si nos apoyan podrán conseguir los votos de los mutantes y de sus familias. No es el medio altruista que te gusta pero sí es el necesario.

-¿De qué manera Erik saldría beneficiado?

-Puede convertirse oficialmente en la voz de nuestros hermanos, Charles. Recibiría el apoyo de sectores políticos.

-¿Crees que Erik aceptaría eso? – cuestionó Charles escéptico -. Soy optimista pero realista, Raven. Sé que él no aceptará jamás involucrarse en la política, tampoco yo, ya ves que quiero reabrir la escuela para reclutar y ayudar sin involucrarme en nada político y menos lo harás tú, que siempre detestaste la diplomacia.

-No estoy a favor de involucrarnos, Charles – dejó Raven en claro -. Por supuesto que detesto la diplomacia. Pero si Erik se transforma en una voz para nosotros . . .

Descreído, Charles sacudió la cabeza.

-Raven, ni tú, ni yo, ni Erik necesitamos de ningún congresista para convertirnos en una voz. Reconozco tus buenas intenciones pero él no va a querer involucrarse en algo así.

-Al menos deja que hable a su favor. Con el discurso que dio y la esperanza que despertó en los mutantes escondidos, el Gobierno pensará dos veces antes de apresarlo y juzgarlo. Crearían un mártir que no les conviene y perderían votantes.

-Eso es cierto y creo que por ese lado es factible que podamos hallar una solución.

-¿Estás, entonces, de acuerdo conmigo, Charles? ¿Qué opinas de la idea de que viaje a Washington a interceder en su favor?

Imperdonable (Cherik)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora