─Quiero que te vayas.
─¿que,esto es por lo que te dije anoche?
El me mira como si fuera menos que el.
─Eso no no te interesa,te quiero fuera de mi casa,ahora.
Cruzo mis brazos,y pongo cara retadora.
─NO.
─Veo que no lo has entendido,no es lo que tu quieras,y si yo digo que te valla te vas,sin negarte.
─Obligame.
El se me acerca amenazadoramente,pero yo no retrocedo me quedo fija en mi posición.
─Tu lo pediste
El rapidamente me aprisiona contra la pareda.
─Esta es tu última oportunidad,o te vas por las buenas o por las malas.
Él estaba demasiado cerca,mi corazón se me acelera.
─No me iré.
─ ¿Tienes miedo?
Susurra en mi oído.
─No.
─Tu corazón te delata,puedo oír cómo se acelera y golpea en tu pecho,como tambor, a panto de explotar,así que te lo preguntare de nuevo ¿tienes miedo?
Su aliento choca contra mi oreja poniéndome los pelos de punta.
─N..o.
─Mientes,tu cuerpo te delata,tu piel está erizada,tu corazón está acelerado,y estas nerviosa,tienes miedo.
─No es miedo.
El se aparta un poco de mi,y me mira alos ojos sin entender.
─Yo no te tengo miedo,porque te lo tendría,me dejas ver tu casa,me dejas preguntarte sobre ti,y nunca me has lastimado,ok tal vez esa ves que me cortaste la mejilla,pero me la curaste y no y hay rastro de que hubo una,y estoy feliz de conocerte,si a veces no te entiendo,pero eso es lo divertido,pero si realmente ya no me quieres aquí me iré.
El me mira unos minutos,para después daré una tierna sonrisa.
─Lo siento,no quiero que te vayas,es solo que tu,me haces hacer cosas que nunca haría.
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Me enamore de una estatua.
Romantikella: Siempre me fascinaron las estatuas raras,pero cuando lo vi quede atrapada. Su torso era humano,pero debes de piernas tenía una larga cola de serpiente,pero eso no era lo único extraño que él no es solo una estatua él tiene. El: Había estado...