8-Secretos.

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¡Santo cielo digo al ver lo negro que estaba ese panqueque!, miro a James correr por una espátula y deprisa le doy vuelta.

—Estuvo cerca—dije acariciando mi frente, secándome el sudor que no tenía y respirando profundo

—Estas bien—dice riendo

—Claro...Sólo que acabo de quemar el panqueque que le hacía a mi invitado

—No lo quemaste sola, también estaba viéndolo yo

—¿Bueno quieres hacer el otro?—digo pasándole la taza con mezcla—¿O todos?—digo siendo descarada

Miro como se ríe—No bromeo—le digo sumamente seria

—De acuerdo no te pongas así—dice levantando sus manos de manera culpable

Vierto la mezcla en el sartén—Te tomas las cosas muy en serio—digo sin mirarlo

—¿A qué te refieres?

—No tienes ese tipo de humor sarcástico

—Tu no me conoces lo suficiente...—dice sin mirarme

—Te conoceré—digo sacando el panqueque y poniéndolo en el plato del comedor

—Me sorprende que seas tan convincente

—¿Porqué lo dices?—en mis adentros solo miraba el ser más profundo, por fin atrayendo a otro

—Pronto sabrás de que hablo.—dice seco, sin ningún énfasis en su rostro

—¿Sueles ser tan serio?—digo al correr la silla para sentarme

—Es mi forma de ser misterioso—dice trayendo dos panqueques recién cocinados al plato

—Así que solamente quieres ser serio

—Créeme...No quieres hablar de esto.

—¿Cuál sería la mejor forma de conocerte entonces?

—Mejor te conozco yo a ti

—Bueno—digo metiéndome un sabroso trozo de panqueque a la boca

—¿Cuál es tu segundo nombre?

—Elizabeth

—Oh...Te puedo llamar Eli, Liza, Liz, Beth...

De inmediato lo interrumpo—Por favor no digas Eliza

—No lo iba decir...Bueno tal vez si—dice sentándose

—Odio Eliza lo detesto.

—¿Porqué tanto odio hacia él y no hacia los demás?

—Aún no te tengo tanta confianza.

—Tendré que llamarte Eliza de ahora en adelante

—Vamos...No me quisiste contar sobre tu extraña seriedad y yo debo de contarte porque odio ese sobre nombre

—Sólo bromeaba

Lo miro confusa.

—Dijiste que no sabía que era sarcasmo, quiero que sepas que soy el chico más sarcástico de esta tierra-dice con su cara de cretino

—Come y deja de jugar de guapo

—Oh cierto estábamos desayunando

Lo miro, bajo la mirada y me rio.

...

Al terminar el desayuno me levanto del comedor, y me dirijo a mi habitación, siento la mirada de James en mí pero no volteo a verlo simplemente por orgullo, no sabía de qué podía ser esa mirada, no se sentía como cualquier otra, no era básica era distinta muy distinta tanto que me derretida, me hacía sentir bien.

Entro a mi cuarto cierro la puerta y literalmente me tiro a la cama, tenía esa maña de ilusionarme con la más mínima charla que tenga con un chico, de repente miro abrirse la puerta, yo estaba estrellada en la cama y del susto salté de la cama para sentarme, siendo normal supuestamente.

—Siento a ver abierto de esa forma pero...Quería saber si nos íbamos a quedar aquí

—¿Cómo?—digo confusa

—Para ir a ducharme

—Igual debes de ducharte ¿no?—pensé ir igualmente no lo iba a hacer

—Si pero también tengo que acomodar mis cosas y eso me toma tiempo

—Mira me voy a duchar yo, tu acomodas tus cosas, yo salgo tú te vas a duchar y te prometo que salimos a algún lado—Me levanto a buscar mí ropa para hacer ese plan un poco realista

—No te estoy rogando que salgamos...Claro—dice exaltado en forma avergonzada

Me hecho una dulce carcajada por mis adentros, cuando por fuera era la chica seria.

—Lo sé...Pero estar acá encerrados es aburrido hasta para mi

—Voy a...Acomodar-dice señalando tras de él

Se va.

Creo que oficialmente ese fue el momento más incómodo con James tan sólo por qué no nos conocíamos.

No sabía dónde íbamos a salir pero sabía que tenía que salir, ya estar acá encerrada no era nada sano. Fui por un overol negro, una blusa de flores y mi ropa interior, me dirigí al baño que por cierto ya tenía toallas en un mueble, luego del incidente con Tyler me mantenía muy precavida ante todo.

Entro al baño feliz de la vida pero al voltearme para cerrar la puerta, veo una tela negra en el suelo justo frente a la puerta de la habitación de James, pongo mis ojos como platos al percatarme que es mí ropa interior y literal salgo corriendo a cogerla, antes de que algo malo suceda, la cogo y la hago una bolita en mis manos, tratando de ser lo mayormente disimulada posible, escucho pasos en la habitación de James, intento caminar rápido pero haciendo el menor ruido posible.

—¿Me necesitabas?—dice James abriendo la puerta de su habitación

Escucho a James mientras estoy de espaldas frente a él, con las manos adelante escondiendo el panti, puse mí rostro de trágame tierra, maldita sea.

—No, no solo recogía una ropa que se me cayó—dije volteándome y poniendo mis manos a los lados, pongo una sonrisa agradable para poder irme.

El observa muy extrañado mis manos al ver que no había ropa en ellas porque no se veía.

Miro hacia otro lado, pensando una frase que no fuese ¨Es mi tanga¨ claro que no era una tanga pero yo siempre imagino las cosas aún más empeoradas. Me sacó de mis pensamientos que me habían dejado levemente en blanco un largo tiempo.

—Es mí ropa interior—trato de ser segura cuando se lo digo.

—Oh interesante—dice asintiendo con su cabeza, un rostro muy serio se veía en él, era claro que era una situación muy incómoda.

—Me voy a duchar—dije volteándome y siguiendo mi camino con la frente en alto aunque moría de vergüenza, escucho su puerta cerrarse, entro al baño y cierro mi puerta.

Tiro el panti bastante enfadada—Estúpido panti—digo en voz baja para que no se escuchara pero con el suficiente enojo como para que el panti cayera guindado en la persiana de la ventana.

Nota: Muchas gracias por leer, sería de gran ayuda un voto, te lo agradecería.

Puedo Soñar [Completa] #PlumasAwards2019 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora