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— Será preciosa. — Dijo Whis mientras caminaba junto a su pareja por los alrededores de su templo.

— A menos que se parezca a Vermouth. Pobre desgraciada.

— No sea malo...

El mayor rodó los ojos. Una pequeña sonrisa se formó en sus labios contra su voluntad.

— Seremos tíos. Se siente... raro.

 — Concuerdo.

Ambos siguieron paseando mientras conversaban de diversos temas. Claro, hasta que el estómago del menor rugió y decidieron picar algo.

 Estoy haciendo una historia dedicada a Vermouth y Marcarita, para explicar mejor todo y dejar de escribir aquí, ah¿

Drabbles, Whis x Bills.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora