Kim TaeHyung es un abogado de mucha fama en Seoul por su maravilloso trabajo. Jeon JungKook es un abogado en ascenso. Ambos coinciden en distintos casos y aparecen distintas emociones en ambos, desde odio, enojo, molestia... hasta el deseo. Un caso...
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JiMin se había ido de la cafetería una hora después de hablar con TaeHyung. La relación que ambos tenían era como si JiMin fuese su hermano menor, porque Kim lo veía así. La primera vez que lo conoció, había hablado con un adolescente rubio que lloraba mientras le explicaba lo sucedido. JiMin confiaba mucho en él.
TaeHyung se quedó en su silla pidiendo a la camarera una bebida de chocolate, luego de eso se iría al trabajo para revisar las cosas y hablar del caso con sus compañeros.
La campanilla de la puerta del local sonó varias veces, la gente salía y entraba de a ratos. Kim estaba revisando su correo electrónico por su teléfono tomando un sorbo de su bebida. La dejó en la mesa subiendo la mirada un segundo para luego bajarla y volverla a subir con rapidez.
-Oh, santo cielo. -dijo en un susurro al ver el perfil de aquel hombre de cabellera marrón apoyado en el mostrador esperando por su turno. Así es, Jeon JungKook se encontraba a tan sólo pocos metros de distancia que TaeHyung.
El mayor se relamió los labios. Tenía que ser un pecado que él se vistiera así. Casi se desmayaba. Todo su cuerpo reaccionó al verle, pues sí, le encantaba, y mucho. De todos los sitios que existían, ambos estaban en una pequeña, pero linda cafetería cerca de donde vivía el castaño claro.
TaeHyung era un hombre seguro de sí mismo, no tenía miedo de hacer las cosas y simplemente actuaba al momento. Apartó la silla peinando ligeramente sus cabellos mirándose en la pantalla de su móvil y se levantó yendo hasta donde él estaba colocándose justo delante de él dándole la espalda. El de cabellos claros mordió su lengua y sonrió al escuchar un gruñido tras suya. ¿Cómo es que incluso hasta un simple gruñido de pura molestia le haya parecido tan sexy?
-Hey, no, haz la fila, yo estaba aquí antes, ¿qué sucede con-... ? agh, joder, no tú. -JungKook casi se congeló al ver de quién se trataba, aunque no le daría el gusto de demostrárselo.
TaeHyung se dio la vuelta con una sonrisa en sus labios y observó el rostro de Jeon todo lo que quiso. Cada centímetro de piel le gustaba tanto. -Vaya, vaya~ miren a quién tenemos aquí... ¿te gustó la sorpresa JungKookie? También estoy feliz de verte~ -río al verlo rodar los ojos.
-¿Estás siguiéndome o algo?, ¿Qué quieres?, ¿Qué haces aquí? -Oh, y cabía destacar que verlo fruncir el ceño lo hacía ver endemoniadamente atractivo.
-Una pregunta a la vez~ solo vine por algo de tomar aquí y entraste. ¿Estás seguro de que no eres tú quién me está siguiendo?
-¿Por qué querría seguirte?
-Mm~ no lo sé... quizá porque... quieres algo de mi.
