Cuando has estado en construcción por mucho tiempo durante tu vida, llegas a tener tal afinidad ante los cambios y sensibilidad por las injusticias. La demolición por la que has tenido que atravesar no ha hecho más que mostrarte que después de los escombros que quedaron puede devenir una edificación mejor. Con mejores cimientos, mejores canales de flujo y mejores azoteas. Cuando has tenido que cruzar un largo camino y has llegado hacia la luz, descubres la magia que se encontraba contenida en ti y la liberas para que toque al mundo.
Es increíble la forma en que el tiempo pasa y ni siquiera lo notas.
Ya ha sido un largo año desde aquel día de septiembre que me marcó. Hoy es de nuevo mi cumpleaños y me encuentro muy ansiosa por vivirlo, no por festejarlo, no por tener regalos o felicitaciones, me siento ansiosa por vivirlo simplemente. Porque las mejores cosas se pasan en la vida y jamás tenemos el tiempo de vivirlas. No conocemos la importancia de disfrutarlas, y eso es porque no sabemos que jamás podremos vivir el mismo momento dos veces. Son únicos, nunca iguales. Mi vida empezó hace 27 años..., pero irónicamente la empecé a vivir hace tan sólo 365 días.
Dicen que cuando menos esperas algo es cuando mejor te sabe. Y así pasó hoy.
Cuando desperté y bajé a la cocina había un enorme ramo de flores sobre la mesa,rosas rojas en su totalidad, incalculables, demasiadas. Solté un gritito. Corrí hacia ellas y tomé la nota rápidamente, tenía la corazonada de saber quién las enviaba y no me equivoqué. ¡Él no se había olvidado de mi cumpleaños! Yo seguía en sus pensamientos, seguía siendo real para él aún a kilómetros de distancia. Las manos me temblaban y las lágrimas picaban en mis ojos. Abrí el papel y lo leí en voz alta, porque ahora..., todo sería así, fuerte y claro.
«Un año de aquel día en que mi vida cambió para siempre. Un año de que fui contagiado por tu magia Cyn. Te dije aquella noche que si fuéramos amigos jamás olvidaría tu cumpleaños..., y aquí me tienes. ¡Feliz cumpleaños a la mujer más hermosa por fuera y por dentro que he conocido jamás! Sigo fiel y perdidamente enamorado de ti..., espero que tú también de mí.
¿Tepuedo pedir un favor?
Lejos de que sigas enamorada de mí, por favor..., enamórate más de ti.
Con amor y profunda nostalgia:
Niall»
Apreté la tarjeta contra mis labios. Eran las palabras más lindas.
Supe una cosa: nunca jamás volvería a cumplir 27 años, no me sentiría como hoy ningún otro día, porque este momento es único. En ningún lugar del mundo volveré a existir jamás..., pero existo ahora y la única que puede hacer la diferencia soy yo. Así que empezar a amarme a mí misma es el primer paso. Empezar a creerme lo que valgo y lo que soy es el inicio de un nuevo mundo.
Nunca volveré a sentirme como aquella noche, pero si volveré a enamorarme de mí cada día, por él y por mí.
