El secreto de un elfo

Capitulo 1

Un suspiro sale de mi, al volver a tirarme a la grama, verde. Viendo el cielo azul y las nubes. Pienso mucho en mi hermano. También pienso en si algún día veré otro elfo como yo, me siento tan diferente y tan sola. Quisiera poder tener amigos y simplemente jugar en la finca. El único que juega conmigo es Tocino el cerdito. Mi hermano se siente un hombre y ya no quiere jugar conmigo a las escondidas. Todo es muy aburrido...

Tía Lucy-¡LULO! ¡Que vengas a comer!- Mi Tía me saca de mis pensamientos. -¡Ya voy!-exclamé.

Me levanto con mucho entusiasmo y siento mi barriga muy adolorida por el hambre. Voy corriendo hacia la casa corriendo para ir a comer. Me quitó los zapatos y abro la puerta para encontrar a mis tíos y mi hermano sentados y en la mesa y una deliciosa torta también.

-Mmm... Mi favorito plato- dije y me senté en la mesa a comer.

Aaron- Se dice mi PLATO favorito- Me corrige

-Si lo se ... Pero yo lo digo como quiero-dije molesta. Siempre mi hermano me corrige, pero ni si quiera voy a la escuela así que no puedo hacer nada.

Terminé de comer y subí las escaleras donde ví la puerta del cuarto de mi hermano abierta.
No me puedo creer lo que acabo de ver.

-Oye... Aaron, ¿Porqué tu cuarto está casi vacío?-dije con desánimo mientras Aaron subía las escaleras.

Aaron-Eee...yo-

Tío Henry--Ven acá, Lulo-- le cortó Tío a Aaron.

Le seguí a mi tío bajando las escaleras hacia la sala y entonces tío miró preocupado a la tía Lucy. Tío Henry- Es hora de decirle- dijo con un poco de temblor en su mano.-¿Decirme qué?-Dije muy preocupada pensando en lo peor...

Tía Lucy-Emmm...cielo perdóname pero...-No sabía expresarse. Aaron-Me iré a Lúmina hermana...voy al ejército...lo siento mucho por no decirte antes-Sus ojos se tornaron rojos y salieron lágrimas también.

Al escuchar lo que él dijo, una tristeza cubría mi ser. No podía controlarlo y un nudo se formó en mi garganta. Me sentí muy mal y todos los recuerdos de los tiempos que pasamos juntos me vinieron a la mente, los momentos de nuestras tonterías y los juegos de niños, hasta los momentos que me caía y me cuidaban pasando me un paño mojado en la herida. Me acordé de todos esos momentos felices que pasamos juntos...pero ahora los perderé todos... perderé a mi hermano, Aaron.

Salí corriendo de allí llorando sin evitarlo. Sentí la soledad y la tristeza como nunca. Salieron de mí mil sollozos y me llené de lágrimas hasta sentir toda mi cara pegajosa y mojada. Estaba tirada en el suelo otra vez. Estaba mirando al cielo.

-¡Porque te vaz! ¡Eres mi hermano! ¡Eres lo que tengo!- Grito con todo el dolor y rencor en mi corazón. Estaba yo en el monte viendo todo a mi alrededor y... alguien me tocó el hombro, yo me voltee para ver a mi Aaron con lágrimas también.

Aaron--No todo--dijo

Ahí mismo le abracé muy fuerte con todas mis fuerzas y dije con temblor y un tono débil -No supe lo que tenía hasta que te pierdo mi hermanito- El me miró con unos ojos preocupados y dijo-- No me perderás nunca, porque tú eres mi hermanita y no te dejaré de amar-Un suspiro muy exagerado sale de mi y me calmo sabiendo lo que me dijo. Fue como si me hubiera leído la mente. Fue como lo que dijera me sanara el corazón.

-Además que eres mi HÉROE- dije graciosa y el se ríe casi sarcásticamente quitando el drama y lo cursi de nosotros.

-Se supone que yo te acompañe- dije a ver qué dice. Aaron -Pero te matarían- dijo volviendo a la seriedad intensa. -Soy valiente- dije segura de mi misma. -¡No vendrás!- Dijo alejándose de mí y dejándome sin lágrimas.

Cerré los puños con fuerza y fuí detrás de él para caerle encima de su espalda y el me agarró y me llevó a caballo por toda la grama. Tocino, nuestra mascota, nos seguía por detrás mientras tío Henry y tía Lucy nos veían divertidos.

Entonces Aaron paró exhausto y cansado diciendo -Está bien, ya me cansé, uuuufffffff-

-¡Vengan Chicos!- Dijo la tía Lucy y entramos a la casa.Ya estaba oscureciendo y en la mesa había algo tapado con una manta para que tío Henry sacara una espada de ella.

Tío Henry- ¿Te acuerdas de los trucos y como usarla verdad?-dijo mirando la espada y entregándola a Aaron y él respondió-Si tío- con un rostro muy desanimado y cansado. Yo le miré preocupada. --¿Cómo llegarás a Lúmina?--

Aaron-- iré caminando, no se puede hacer mas nada-- Me sorprendí y no me lo puedo imaginar - Es un camino largo, dura como 7 meses a pie...!Es demasiado!- Me alarmé

Aaron- Son cuatro meses, Lulo... estaré bien-

-Pero hermano... por favor no lo hagas. Puede que te mueras- dije triste

Tía Lucy- Lulo...te dije que este día llegaría-

Tío Henry- Entiendo que te sientas triste pero ya hablamos de ésto...tu hermano ayudará allí y cuando lo haga deberías sentirte orgullosa de él, tal como nosotros lo haremos-Una sonrisa apareció en todos hacia mí y yo estaba seria ante esto.

Aaron-Si tu estuvieras en mi posición, hubieras hecho lo mismo-

Cuando dijo esas palabras lo entendí perfectamente...pero...¡Buen punto! Yo voy hacer lo mismo que él y voy a escaparme e ir con él a Lúmina y al ejército...se que es lo opuesto a lo que todos quieren y que sería peligroso, pero es lo que yo haría , así que pienso luchar junto a él para estar a mano.

Aaron-Espero convencerte- me sacó de mis pensamientos.-Sí, te entiendo- Dije disimuladamente y mentirosa por dentro.

Aaron-Que bueno -dijo y yo mordiendo me el labio. Tía Lucy- Bueno... ¿Quieren pastel de frambuesa?-preguntó
-¡SI!- Contestamos al mismo tiempo Aaron y yo.

Y la tía se fue y vino con un pastel bien adornado con moras. Nos sentamos a comer y hablar por un buen rato de los viejos tiempos y cosas buenas, nos reímos mucho, la pasamos como nunca. Yá era de noche y teníamos las velas encendidas.

-Yá me iré a dormir-

-Buenas noches- dijeron todos y subí a mi dormitorio y me acosté mucho más temprano de lo normal.