La pequeña balsa que la trasladaba hasta la gran roca de las sirenas se movía sin cesar, no preocupándose por los pequeños crustáceos que se pegaban a ella, la pequeña bruja de mar sonría con el viento contra su cara, saboreaba ese olor característico del mar, le gustaba estar lo más lejos de la isla sentir la brisa colgarse por sus poros, sonrió y acomodó de nuevo la coleta que sostenía el cabello negro con Aquamarine.
Cuando la balsa la dejo en el pequeño cayo, las instrucciones les fueron dadas, quitar espinas a los erizos para llevarlos como productos, pescar con las manos los peces fuji y alimentar a la sirenas con pares de crustáceos para mantenerlas en paz, asentó con la cabeza y espero que la pequeña balsa de fuera para empezar con la tarea.
Uma no había estado lejos de casa desde hace mucho, le era extraño estar en la pequeña playa de aquella gran roca con las manos debajo del agua tratando de atrapar alguno de aquellos peces rápidos, suspiro un poco y vio todo aquel mar abierto, la roca de las sirenas se situaba aproximadamente a unos 10 km mar abierto de la isla y a unos 20 km de mar abierto de Auradon, se respiraba la calma en aquel lugar, el agua cristalina con tonos verdes bañaba todo aquello, la arena era aperlada con algún par de conchas en ella, había un pequeño perímetro de árboles que adornaba el cayó, el sol daba justo en ella y se sentía quemar como cualquier otra cosa aún así el aire seguía siendo frío, agradable y olía a sal.
La pequeña bruja de mar enterró sus pies en la arena, veía estos por el agua, puso las manos sobre sus rodillas para poder asentar la cabeza en ellas, sonrió un poco cuando una pequeña ola golpeó la arena, vio cómo cada uno de aquellos peces que eran un manjar en Auradon, aquellos peces carnívoros que lastimaban a todos los pescadores, se arremolinaban en sus piernas, espero a llegarán más y cuando tuvo una cantidad suficiente sus manos bajaron, sintiendo aquellos pequeños dientes enterrarse en sus dedos pero aún así cogiendo una gran cantidad y poniendo estos en una cesta.
Cuando estuvo llena, volvió a su posición original, suspiro un poco y esta vez enterró los dedos de sus manos en la arena húmeda, el agua seguía golpeando sus piernas y mojaba un poco su barbilla, “así que era eso lo que tenía loco a Harry” los pensamientos repetían cosas sin sentido al ver el gran mar que se alzaba frente a ella, todo un mundo lleno de aventuras, emociones nuevas, amores nuevos y lugares a los que podría ir sin necesidad de ser invitada o temida, movió un poco su nariz y respiro la humedad que sacaba la arena.
Si bien no era su lugar favorito en definitiva hubiera dado cualquier cosa por pertenecer ahí y no a la prisión a la que llamaba casa, Uma se sentía tan llena, tan dichosa y tan relajada que se olvidó que era el lugar de su castigo, disfrutaba del agua sobre su cuerpo y cada vez respiraba más fuerte para obtener todo aquel aroma que le recordaba a mini Hook, sonrió un poco imaginandose como la Jolly Roger llegaría por ella y se iría de ahí, como si fuera posible, imagino también que se hundía en el agua clara y encontraba su lugar entre las sirenas como la nueva bruja de mar, o tal vez en otro futuro, uno nuevo y totalmente distinto a lo que estaba predeterminado se encontraba ahí con Harry Hook, haciendo cosas que no deberían y diciéndose cuanto se amaban el uno al otro.
Pasó una mano por su mejilla limpiando la lágrima que caía por ella, abrió de nuevo los ojos, recordando todo el trayecto cómo había salido de su casa al alba y había tenido que esperar en el muelle sentada con las piernas cruzadas mientras veía el casi resplandeciente sol salir, cuando la balsa de la armada de Auradon llegó la había subido para trasladar hasta ahí, le dieron unos minutos antes para ver si alguien llegaba para darle comida para llevar o para ver si alguien le deseaba buen día pero eso no sucedía en la isla, cuando subió ahí vio como los Hook's se preparaban para un nuevo día, como su madre abría Fish & Chip's, Gil llegaba a su turno de la mañana entraba y salía de nuevo buscándola, sin embargo nadie aparecía, vio el bazar como cada puesto alzaba sus cortinas y empezaba un nuevo día en la isla mientras se alejaba de esta para cumplir su castigo, cerró los ojos y suspiro un poco mientras su camino empezaba, aquellos guardias que le había asignado el Rey Ben trataban de hacerle platica pero ella no tenía ganas de hablar, no hoy.
Y cuando llegó al lugar se encontró con un pequeño oasis para un corazón roto y una bruja de mar, Uma parpadeo varias veces para que las lágrimas se dispersaran, nunca se había sentido tan mal en su vida, si tuviera que repasar las cosas que habían ido mal esa semana empezaría por su plan fallido, Harry y el trato con Hades, todavía tenía que lidiar con eso, el dolor en su brazo cada vez que él demandaba hacer algo o qué hacía a un villano rendirse bajo el nuevo régimen de la isla, no hacía más que pensar en cómo esto la llevaría al éxito o la arruina y eso que ya estaba ahí.
Mira su brazo una vez más, la flamita azul se juntaban con un caracol, estaban entrelazados y se prendía en azul cada vez que el Dios hacía algo, solo había tres formas de romper aquello, una era que su alma le pertenecíara a él, la segunda que le otorga todo el poder y la tercera era que ella desarrollará toda su magia para poder obligar al Dios a darle su poder, su gobierno y todo aquello que le pertenecía de vuelta, sin embargo todavía no describia como hacerlo.
Sintió una pequeña punzada, hizo una mueca bajo la mirada al collar que brillaba, no sabía su madre la llamaba o si el le decía que le gustaba estar ahí o necetiba el agua, lo quitó de su cuello para sumergirlo un poco, sonrió para volver a tenerlo en su cuello, suspiró aliviada y de pronto se dio cuenta, no era que no se sintiera bien ahí, claro que lo hacía pero aún estaba conectada a su chico, sentía aquel orgullo Hook inundar su corazón, aquella felicidad colarse por sus poros, a pesar del vacío que había dejado que su corazón fuera de él la conexión se había fortalecido aunque él pensara que ya no la podría sentir Uma si a él, hizo una media sonrisa y se levantó de la arena.
Dispuesta a recuperar todo aquello que le pertenecía, todo aquello que era suyo, se dispuso a cumplir el castigo lo más pronto que pudo. Cuando terminó el sol se ocultaba, las sirenas empezaban a salir del agua y esperaban ansiosas en la playa por su comida, cuando se acercó con las espinas de los erizos empezó a lanzarlo sin importar la sangre que dejaba en ellos, sonrió orgullosa cuando vio a las sirenas contentas mientras cantaban se acostó en la arena viendo el cielo gris azulado en el cual empezaban a brillar algunas estrellas, escuchaba ese canto raro en una lengua extraña que la hacía imaginarse en el fondo del océano o en una habitación en Auradon o en la Jolly Roger en un vaivén mientras Harry se encontraba a su lado, cerró la ojos una vez antes de escuchar el ruido de la balsa.
La pequeña bruja de mar subió a esta nuevo, no sin antes de despedirse de sus nuevas amigas, vio por última vez el cayo que se alzaba en aquel solitario lugar y repitió para ella.
-Tienes mucho más poder de lo que piensas, eres la nueva reina pequeña Uma-
Recordaba los ojos verdes de aquella sirena mientras se mantenía parte de su cuerpo en el agua, le señalaba el collar y ella sonreí, mientras jugaba con los pequeños remolinos de arena que creaba con los dedos, Uma movió la cabeza en un ademán de superioridad.
Volvería a la Isla cada día con mucho más fuerza, mucha nueva más magia y siendo la Reina de la Isla.
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Evilness before that love
FanficLa isla no era un lugar para enamorarse, la isla no era un lugar para finales feliz pero ¿Qué pasa cuando alguien se enamora? ¿Qué pasaría si se hiciera todo lo imposible por un podrido amor? Uma Seawitch es la nueva reina de la Isla con un pasado...