"...Los sentimientos...no son tan fáciles de controlar...simplemente aparecen...en los momentos que se ameriten convenientes..."
-¿dudar de Rin?-se pregunto el Dai youkai, mientras terminaba de leer la pagina, para pasar a la siguiente-yo nunca dudaría de ti Rin...-y como un resplandor sus recuerdos nuevamente inundaron su mente
Recuerdos...
Silencio, solo eso había entre ambos tras la declaración explicita de Sesshomaru, el inexpresivo Dai youkai solo miraba a su protegida como ella lo hacia él
-Rin ¿es importante para el señor Sesshomaru?-le reitero su propia confesión, dejando al demonio plateado sin mayores palabras, silencio era lo único que le quedaba por hacer, volteando dándole la espalda ¿Cómo explicarle aquello? Ni el sabia lo que sentía, su madre decía una cosa, él pensaba otra y Rin en medio de un demonio quien esta aprendiendo a aceptar lo que son sentimientos, para luego sentir como es jalado sutilmente de sus mangas distrayéndolo completamente mirando hacia abajo era su protegida con la mirada abajo diciéndole-perdóneme señor Sesshomaru por preocuparlo, Rin no lo volverá hacer-le prometió
-hmp!- al verla allí tan apenada, lanzo un leve suspiro, no solo por la situación, sino también por el mismo, sintiéndose estúpido, no pudo evitar perder un poco el control, cuando sintió el aroma de otro cerca de ella que no fuese a indetectable esencia de su medio hermano ¿Qué diablos le estaba pasando? ¿era verdad lo que le decía su madre? ¿era la verdadera razón de dejarla en la aldea? Pero a pesar de "decirle" lo tan importante que es ella para él-es en vano...-suspiro bajamente restándole importancia cerrando sus ojos como suele hacerlo con el fin de tranquilizar su mente
Cuando de pronto Rin siente como su amo la envuelve en sus brazos de manera sutil, él estaba a su altura abrazándola tiernamente a modo de disculpas por su reclamo sin sentido, sonrojando sus mejillas
Querido Diario...
El amo Sesshomaru me estaba abrazando, por pocas veces lo ha hecho, pero esta vez la siento diferente, no lo se..., los abrazos del señor Sesshomaru son cálidos, suaves y dulces, aunque solo sean unos segundos, siempre son tan importantes para mi, y los aprovechare al máximo...
Sin embargo, el abrazo entre ellos duraba mas de lo habitual, extrañándola un poco, aunque lo aprovechaba al máximo, no obstante Sesshomaru trataba de averiguar el aroma del presunto desconocido que se reunió con Rin horas atrás, hallando solo rastros de la niña en sus prendas –Rin tienes un aroma...
-¿Qué? ¿dijo algo?-pregunto la niña confusa
-volvamos a la aldea –dijo serio separándose de ella lentamente para retornar su marcha
-señor Sesshomaru! Tengo que contarle algo, y no he podido decirle a nadie –se confeso la niña haciéndolo detener
-dime-contesto sentándose sobre una raíz de un árbol cercano, haciendo que esta le siguiera, tomando asiento a su lado comenzando a jugar con sus dedos de manera nerviosa
-etto...¿es malo ayudar a otras personas?-esa pregunta lo desconcertó, era extraño proviniendo de ella, quien estaba dispuesta a ayudar siempre a los demás
-¿Por qué lo preguntas?
-es que, si ayudara a alguien quien no debía ¿usted me perdonaría?-pregunto mirándolo a los ojos, mientras que los ámbares dorados del Lord del Oeste se abría enormemente ¿Qué podía hacer? Se preguntaba así mismo ¿con que cara decirle que no? Si ella hizo lo mismo con el cuando estaba herido, era ella, simplemente ella, su forma de ser, la única diferente, la única quien no veía "aquella maldad" que rodeaba a los que se consideraban enemigos, aun así le inquietaba que ella tuviera algún contacto con un desconocido, le hacia presumir a la vez que podría ser aquel hijo del Lord del Este desaparecido, pero no sentía ninguna presencia u aroma extraño alrededor de la aldea o en sus territorios tranquilizándolo en cierto modo, sentía su nerviosismo, sabia que si el grupo de su medio hermano se enteraba la perdonarían aun asi la regañarías con sus sermones que consideraba estúpidos, nadie regañaba a su Rin, poso una mano en su cabeza guiándola a mirarlo con delicadeza con el fin de no lastimarla
-si consideras que es lo correcto-se pauso en un segundo dejando en suspenso a la niña-esta bien-contesto dejándola perpleja en creer que su amo la regañaría
-¿de verdad? ¿no me regañara?
-no soy tu padre para regañarte Rin-le dijo cortante, acercándose a ella a una distancia prudente ruborizándola un poco, la presencia de su amo cerca le era algo intimidante de una manera inexplicable-soy tu amigo-se pauso-tu compañero –termino de decir mirándola fijamente a los ojos haciéndola sonreír ampliamente abalanzándose sobre sus brazos llena de felicidad
-gracias por sus palabras amo! A Rin le hicieron muy bien esas palabras!
-hay que regresar-se puso de pie de repente el Dai youkai mostrando su imponente figura de siempre
-si!!!!-contesto feliz y tranquila, siendo cargada entre los brazos de su amo, para retornar a la aldea con un vuelo lento bajo el manto de la noche, iluminado solo por la luna y las estrellas
Por otra parte, el demonio negro, caminaba lejos de todos los territorios de la región, nadie sabia, nadie lo esperaba, la peor desventaja para todos, era su mayor fortaleza, su aroma ausente en aire, podía ocultar su esencia de cualquier ser demoniaco, tenia que planear algo, para regresar a lo que es ahora sus territorios, pero no en derrota sino como el gran emperador que su padre esperaba que fuera, no obstante, aun persistía un leve aroma que se impregno profundamente en sus atuendos ¿Por qué ayude a esa niña humana? Ahora me siento como un verdadero estúpido ¿yo ayudando? Se pregunto un tanto irónico, además ella le decía que se marchara ya que un tal "Inuyasha" vendría por ella-Inuyasha...-pensó ¿acaso no es uno de los hijos del gran general perro? –no creo que un hijo de ese gran guerrero viva en una precaria aldea...¿o si? ¿y además cuidando de una niña? Esto es extraño...
Por otra parte, Rin era dejada en la aldea, en medio de la preocupación de la anciana Kaede, luego de que Inuyasha regresara a la aldea diciendo que Sesshomaru se la llevo para regañarla, viendo como regresaba la pequeña con una enorme sonrisa en su rostro y el rostro de su hermano tan inexpresivo como siempre
-anciana
-dígame señor Sesshomaru-hablo la tutora de la niña, mientras Rin se despedía alegremente de su señor
-vendré a ver a Rin cada tres días
-¿Qué tres días?-la anciana se sorprendió, ya que el tiempo de trascurrido era cada 15 dias hasta un mes ¿Por qué ahora tan seguido? Se pregunto mas no le molestaba, ya que Rin lucia mas feliz cuando su amo estaba cerca
-si esta bien-sin mas se fue volando rápidamente de la aldea, cuando descendió a una pequeña colina que se podía admirar toda la aldea donde vivía su protegía, una freca brisa hacia danza su cabello en el aire, recordando el amuleto tan extraño que le entrego su madre, sacándolo de uno de sus mangas
-Rin...-pensó a ver el amuleto aun sin el colmillo en el centro, posándolo sobre sus labios cerrando los ojos pensando-pronto será tuyo...
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holaaa espero que les guste este capitulo, muchas gracias por sus bellos comentarios, y sus estrellitas, me alegran los dias, perdon las faltas de ortografia abrazos!!!
proximamente................................................Pagina 12 (Sorpresas y preguntas)
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Mi Diario...(SesshomaruxRin)
Fanfiction"...El camino a mi desicion..." Todos se han preguntado, lo que sucedio conmigo y con el señor Sesshomaru despues de la derrota de Naraku, tal vez...quizas...me quede en la aldea...o me fui con el hasta en un viaje sin final..., a decir verdad creo...
