Durante la celebración en la Sala Común de Gryffindor, la azabache se había quedado cerca de las paredes, intentando llamar la menor atención posible, estaba feliz viendo a Harry feliz, por lo que no quería arruinar el momento de ninguna forma.
Y cuando instaron al de lentes a abrir el huevo dorado, ella solo se inclinó un poco hacia adelante, esperando con ansias a que la pista de la próxima prueba fuera revelada.
El momento en el que el huevo fue abierto, todos los presentes se doblaron sobre si mismos y se taparon los oídos, intentando suprimir el sonido que venía de este.
El problema fue que a Percy no le pareció un "mal sonido", había escuchado una pequeña parte de un acertijo en forma de un encantador canto.Tuvo que fingir que el sonido le lastimó al igual de los demás una vez que se dió cuenta que era demasiado obvia.
Una vez que Harry volvió a cerrar el huevo, todos se recompusieron, pero el primero en hablar fue un pelirrojo que como ella, se había mantenido alejado del resto.
―¿Qué demonios fue eso? ―preguntó Ron Weasley desde su orilla, llamando la atención del resto.
La mayoría de Gryffindor (si no es que todos), sabían sobre el pequeño distanciamiento entre los dos mejores amigos, por lo que no fue difícil adivinar el porque todos parecían aunque sea un poco interesados en esa interacción.
―Bueno, vuelvan a sus asuntos ―dijo uno de los gemelos―, esto ya va a ser lo suficientemente incómodo sin que ustedes lo oigan.
Los dos gemelos Weasley rápidamente encontraron a la azabache y se dirigieron a donde estaba para hablar por un rato. Antes de que su conversación iniciara, Percy pudo ver de reojo al pelirrojo y al pelinegro hablar entre ellos, haciéndola sonreír pues estaba feliz de que volvieran a ser los mismos de antes.
―Usted también estuvo bastante increíble, señorita Jackson ―dijo Fred, mientras pasaba un brazo por sus hombros.
La azabache negó con la cabeza.
―No hice casi nada, chicos.
―Siempre tan modesta ―fue la respuesta de George mientras compartía una sonrisa con su gemelo―. Estamos seguros de que si tú hubieras sido la única que se enfrentara al dragón, hubiera sido el mejor espectáculo de todos.
Percy siguió negando los comentarios de los gemelos hasta que tuvo la oportunidad de cambiar de tema preguntándole por las apuestas.
Su noche pasó sin muchos más acontecimientos, fue por eso que tan pronto como Percy estuvo sola, comenzó a pensar en una manera de hacer que Harry descifrara el mensaje del huevo.
Si ella podía escucharlo y el resto no, ¿eso quería decir que tenía que ver con su parte semidiosa? Como hija de Poseidón, era capaz de entender a los caballos, pegasos y a las criaturas marinas.
¡El Lago Negro!
La segunda prueba tendría que tomar lugar en el Lago Negro, pero ahora tenía que pensar en una manera de hacer que Harry se enterara de ello sin que ella tuviera algo que ver.
Si sospechaban de ella de cualquier forma, habría preguntas, preguntas que ella no podría responder o sería fulminada por un rayo, o convertida en un delfín.
Al día siguiente, seguía pensando en ello mientras iba por los pasillos de Hogwarts, McGonagall había citado a los alumnos de Gryffindor y ella se había distraído bastante antes de ponerse en marcha.
Algunas chicas de Beauxbatons la habían interceptado para hablar con ella, sobre, bueno, ella misma. Si tenía pareja, las cosas que le gustaban y sobre la pequeña ayuda que le había brindado a Harry durante la primera prueba.
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Harry Potter y la Hija de Poseidón.
FanfictionComenzamos desde el cuarto año de Harry Potter, él ha conocido a Perceia Jackson desde que comenzó a estudiar en Hogwarts, aún así él nunca ha logrado descifrar el secreto que ella esconde y que la obliga a desaparecer por días enteros y regresar co...