Olivia me había dicho que necesitaba hacer algo para despejar mi mente, así que volví a ayudar a Fausto en su bar. Pasaba mis días con él y me divertía demasiado, a veces saliamos los 3 juntos a bailar o nos juntabamos a tomar mates.
Estaba limpiando algunas mesas, cuándo alguien me choca el hombro, levanto la mirada y había sido Cristian. "Inmaduro" pensé.
—Me chocaste— le dije y él solo me ignoró.
Yo había estado esperando meses a poder verlo para poder pedirle perdón y cuándo lograba encontrarmelo, él se comportaba como un verdadero inútil.
Fui hasta la mesa en la que se había sentado con una chica de unos 13 o tal vez más años, y lo enfrente.
—¿Sabías que existe la palabra "disculpame"?— le dije parandome frente a su mesa y cruzando mis brazos.
—¿Me traes el menú por favor?— me dijo ignorandome.
—No, no te lo voy a traer hasta que no me pidas perdón... ¡Me chocaste!— le dije y él se río.
—Nena sos una histérica, no te vi— me dijo y me reí.
—¿Me estas cargando no? Me viste y lo hiciste a propósito, ¿Porqué cada vez que nos vemos tenemos que llevarnos tan mal?— le dije y él me miro mal, me agarro de la mano y me llevo a unas mesas más de la que estaba, para que su acompañante no nos escuche discutir.
—Por que sos una egocéntrica, el mundo no gira alrededor tuyo Galilea. Yo intenté ser amable con vos, pero vos no sabes lo que eso significa.— me dijo y fue un golpe bajo, lo admito.
—¡Me quería disculpar con vos, hace días que estaba esperando verte!— le dije y él nego riéndose.
—¿No podías hacerlo por un mensaje?
—¡No! Yo digo las cosas en la cara Cristian, quería que veas que de verdad me arrepentia de haberte tratado mal, pero vos sos un inmaduro y me haces enojar.
—Si yo soy inmaduro, ¿Entonces que queda para vos?— me dijo riéndose.
—Lo peor, para mi siempre queda lo peor— le dije y luego calme un poco mi tono de voz— ahora le digo a Fausto que los atienda...— le dije y me aleje de ahí.Fausto los atendió, yo seguí limpiando mesas y luego me puse a barrer un poco.
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Narra Cristian
Volví a la mesa confundido y Luli alzó una ceja y se cruzó de brazos mirándome.
—¿No me pensas decir nada?— me dijo y la miré.
—¿Nada de qué?
—¡La chica! Es linda, ¿Se llama Galilea? Que nombre extraño...
—Es lindo nombre—dije pensando en si el nombre tendría algún significado.
—Uyyy, cagamos... ¿No podes dejar las polleras un rato vos?— me dijo y me reí por su comentario.
—No hice nada malo— le dije defendiendome.
—No claro... solamente te chocaste a "Galilea", para tenerla atrás tuyo y poder molestarla... porque te gusta— me dijo y me reí por su imaginación.
—A mi no me gusta Gala y no la vi, fue sin querer.
—¿Y por qué no le pediste perdón? Que yo sepa mamá nos enseñó a decir "perdón" y papá también— me dijo sonriendo.
—No te incumbe eso Luli, es problema mío y vos sos muy chiquita para andar hablando tan libremente sobre temas de grandes— le dije y ella se río.
—Más te vale que cuándo nos vamos le pidas disculpas, no quiero que la pobre chica se sienta mal por tu culpa— me dijo amenazandome y terminé aceptando.
Fausto nos atendió y comimos, le pregunté a Luli por la escuela y me dijo que tenía dos bajas, le dije que se ponga las pilas y ella me dijo lo mismo para las canchas. En un momento gire mi cabeza en dirección a Gala, lo hice inconscientemente y me quedé mirándola.
—Tierra llamando a Kichan— dijo Luli moviendo su mano adelante de mi cara.
—Lourdes, ¡no seas pesada!— le dije y ella se río.
—Pero si te estaba hablando y vos estabas mirando a "Galilea", menos mal que no te gustaba...— me dijo burlándose y le tiré con un pedacito de mi servilleta, ella se río y pedimos el póstre, cuándo terminamos de comer le dije que fuera al auto y la miré hasta que entro en él, fui hasta donde estaba Gala y la hice girar para que me vea y así poder pedirle perdón.
—Cenicienta, ¿Podemos hablar?— le dije y ella pareció no entender mi apodo.
—La Cenicienta ni se parece a mi—me dijo confundida.
—Estas limpiando desde que llegué, por eso...— le dije y lo entendió.
—¿Que queres?
—Disculparme por chocarte, estuve mal.
—¿Y te lo tuvo que decir tu hermanita para que lo hagas?— me dijo alzando una ceja.
—¿Cómo sabes que es mi hermanita?— le pregunté confundido.
—Por qué es la nena con la que subís fotos a instagram.
— ¿Me espías el perfil?— le dije molestandola y se enojó.
—¡Sos insoportable nene! ¿Porqué no me dejas en paz?—me dijo intentando irse, pero la frene.
—Por que me gusta molestarte, explotas enseguida... no te bancas ni un chiste...
—Andate antes de que te pegue con la escova
—Me voy solamente si me das un beso en el cachete
— No
—Entonces me quedo a pelearte... ahí te quedó sucio— le dije señalando el piso.
— Todavía no pase por ahí genio— dijo sarcástica.
—Cierto, vos pasas por cada lugar...
—¿Y vos? Te comes cada cosa...
—¿Celosa?
—¿De vos? ¡Haceme reír!
—Celosa
—¿No será al revés? Vos me saliste con el tema, no yo.
—Es que me gusta reírme del muñequito de tortas con el que salías...
—Se llama James
—Si llimi jimis
—Por lo menos no salí con alguien con más operaciones que la muñeca Barbie
—Y volvemos a tus celos...
—¡Ay dejame en paz!
—Saludame y me voy
—¡No!
—Vos sos la que no queres que me vaya...
—Sos imposible Cristian— me dijo y se acercó a darme un beso.
—¿Ves? ¡No era tan difícil saludar!
—Andate antes de que te golpee—me dijo y negué con la cabeza.
—Falta que yo te salude— le dije y me acerque a darle un beso en la mejilla, ella se tenso y me reí—Nos vemos.
—Anda dale— me dijo rodando los ojos y yo salí de ahí riendome.
Subí al auto y Luli me miró enojada.
—Te dije que le pidas perdón, no que te demores años— me reclamó.
—Bueno che, me das la idea y después te quejas— le dije despeinandola y se quejó.
—Kichan no, me desarmas el peinado.
—Mi disirmis il peinidi
—Tonto
—Bueno, si soy tonto entonces no te regalo el perrito que querías ...
—De todas formas mamá no me deja tenerlo
—Lo dejamos en mi departamento
—¿En serio?
—Si, pero tenes que decir que soy el mejor
—Hermano sos el mejor— dijo rodando los ojos
—Darme un beso— le dije señalando mi mejilla con un dedo y ella se acercó a darme un beso.—Y cantar la macarena.
—¡Kichan no te aproveches!— me dijo y yo me reí.
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Reputación (Cristian Pavón).
FantasyGala nació en Argentina, es hija de uno de los empresarios más importantes en Estados Unidos, su mamá murió hace 2 años y su mundo se vino abajo. La repentina traición de su novio y "amigos", más las críticas, harán que Gala decida escapar a su país...