Aquí Estoy-Capítulo 40

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RUGGERO

¿Si me dolía el desprecio de Karol? Si, me dolía y mucho. A pesar de que estábamos separados yo estaba muy enamorado de ella, aunque Aien me seguía gustando demasiado.

Las cosas que había vivido con Karol no eran cosas que se olvidaban de un día para otro, había días en los que me levantaba y tenía muchas ganas de correr e ir a buscarla, pero yo aún tenía dudas y no quería lastimarla más de lo que ya lo había hecho.

Hoy a la tarde iba a salir con Aien
y un par de amigos, Aien me había dicho que la pase a buscar Asique a la tarde me fui con mi auto a buscarla.

- Hola bombón - Se acerco inesperadamente y me beso.

- ¿Y eso? - Pregunté y la quedé mirando como un idiota - ¿Por qué me besaste?

- Porque tenía muchas pero muchas ganas de hacerlo - Sonrió y volvió a besarme, pero está vez el beso fue bastante más lento. - ¿Vamos?

- Como digas - Le sonreí - ¿Dónde vamos?

- Conozco un lugar increible - Me dijo emocionada - Vos sólo seguí mis indicaciones.

Después de bastantes minutos siguiendo las indicaciones que ella me daba, por fin llegamos al lugar. Era como un bar o un boliche, de verdad que al principio el lugar no me daba mucha confianza pero después me Di cuenta que no tenía nada de malo.

Dentro había mucha gente, era como estar un sábado a la noche en una fiesta.

- ¿Y los chicos van a venir? - Pregunté.

- No creo, pero me tenes a mi ¿O no? - Asenti con una sonrisa, no me parecía mala idea pasar la tarde con ella - Me encantas mucho Pasquarelli.

Se acerco despacio, me tomo de la camisa y después me beso. Sentía algo raro cuando me besaba, sus besos me gustaban pero sentía que algo me faltaba.

- Hey Adrián ¿Me podes traer dos cervezas? - Gritó.

- ¿Dos cervezas? - Pregunté - No es buena idea tomar, la ciudad queda muy lejos y aparte mañana tenemos que ir a la universidad.

- ¿Y qué tiene? - Decía mientras se tomaba un vaso de cerveza - Dale Ruggero, deja de ser tan niño bueno y saca tu verdadero vos de adentro.

- Bueno pero sólo un vaso, Okey - Me sonrió y después bebí el vaso de cerveza.

Sin darme cuenta las horas pasaron, mi vista era borrosa, había tomado de más.
El ruido, la música, la cantidad de gente, las luces y todo lo que me rodeaba me estaba mareando mucho.

- ¿Y si mejor vamos? Ya es muy tarde - Le dije Aien.

- No, no me quiero ir - Ella también estaba muy borracha - Andate sólo si querés, esto  recién empieza.

Como pude camine hasta la puerta y pude salir afuera de ese lugar, saque la llave de mi auto y después lo busque, me costó mucho pero lo encontré.

Como pude encendí el auto y me subí para irme. El camino era borroso y con suerte podía ver las luces de los autos...

Una fuerte luz me encandiló, sólo sentí el impacto...

KAROL

No quería estar en mí casa, mi mamá había vuelto del viaje y andaba muy pesada, todo el tiempo me decía "Yo te dije que ese chico no era para vos" me hizo pensar que fue mala idea haberle contado.

Esa noche me fui a la casa de Vale, también iba a ir Lali Asique iba a ser una noche sólo para chicas. Al principio cenamos unas pizzas mientras hablábamos de cosas que nos habían pasado este último tiempo. Después comenzamos a escuchar música mientras jugábamos partidas de poker o de cualquier otro juego.

Aquí estoy []Ruggarol[]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora