Una Locura De Noche [+18] ©

Capítulo 2 (KookV)

El estudio.

Su estudio, era normalmente donde más horas pasaba Jungkook en la casa, dentro de esas cuatro paredes se sentía seguro. Era uno de sus lugares favoritos.
Podía estar solo escuchando música o editando, pasando el rato viendo vídeos, jugando videojuegos. El tiempo parecía detenerse en ese cuarto, dandole un respiro de su apretada agenda de Idol. Era un lugar que le pertenecía y que nadie solía interrumpir para molestar. Un sitio lleno de paz y de tranquilidad dónde escuchar música tranquilamente.

Pero, parece ser, que ese no sería el día.

Jimin entró como un terremoto al estudio de Jungkook sobresaltando al maknae, el cual bebía un jugo de plátano lo que casi provocó que se derramara encima del caro ordenador.

— ¡Jimin no puedes entrar así!—dijo Jungkook todavía sorprendido —. A la siguiente toca la puerta.

— Perdón, perdón— se disculpó—. Pero tenemos prisa, vamos a salir a cenar y el chófer está por llegar — explicó rápidamente Jimin.

A Jungkook no le apetecía nada salir esa noche, tener que ponerse algo que no fuera ropa comoda de casa le daba muchísima pereza, no negaba que eso de comer algo rico le tentaba, pero después de pensar un rato descartó esa opción.

— Jungkook espabila, que ya te he dicho que no hay tiempo— le metió prisa Jimin, acercándose a él.

— Uff... no me apetece Jimin— dijo—. Ir vosotros, yo me quedo— confesó el maknae.

Jimin le miró con el ceño fruncido, no le hacía mucha gracia que el maknae se quedara solo en casa, pero ya era mayorcito, si no quería no le obligaría.

— Pero mañana tenemos libre, podemos quedarnos hasta tarde— explicó Jimin—. ¿Seguro que no quieres venir?— insistió una última vez.

Era verdad, mañana no tenían nada.
Después de unas interminables semanas sin ningún descanso largo, el mánager les dejó tener unos bien merecidos días libres.
Pero seguía sin querer moverse.

— Uff...— suspiró rascándose la nuca.

— Vale, ya no insisto más— habló Jimin—. Pero no te vayas tarde a la cama— dijo con expresión seria.

— De acuerdo mamá— contestó Jungkook burlándose de él.

Jimin estaba a punto de contestar, pero se escuchó la voz de Namjoon gritando desde el pasillo.

— ¡El taxi ya está!— gritó el líder—.Todos en marcha.