Erick

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▷Maratón 1/3◁

Esperamos dos largos meses para poder vivir juntos, nuestros padres coincidieron en esperar un tiempo, pero insistimos tanto que no se pudieron negar más.

Hace una semana traje mis cosas al departamento de Joel, fue una gran semana.

Por las mañanas cada uno asiste a su universidad, por las tardes salimos a caminar o simplemente nos quedamos en nuestra habitación.

Hoy teníamos que ir a un parque de diversiones pero Joel se está tardando más de lo que debería en llegar de sus clases.

10 minutos tarde.

Escucho voces afuera de la puerta del departamento, quizás es Joel. Abro la puerta y me asomo a ver de quien se trata, efectivamente es Joel pero está hablando cómodamente con la vecina.

Desde que vi a esa mujer no me inspiro confianza, la forma en la que se viste y comporta te hace pensar que es una ofrecida.

No me gusta nada que Joel y esa se pongan a conversar como  si tuvieran una gran confianza. ¿La tendrán?

Solo mirar la sonrisa de esa mujer me fastidia, se nota que desea a Joel. Maldita.

-Joel, porque no entraste.- digo interrumpiendo su conversación.

Joel voltea y me ofrece una encantadora sonrisa. -Hola amor. Ya casi entraba, solo estaba saludando a la señora Andrea.

-Supongo que ya la saludaste de más. Entra ya, se nos hace tarde para salir.

Él asiente y se despide de la ofrecida, quien no pierde el tiempo y estoy seguro que mira su trasero. Después la muy sínica me ofrece una sonrisa hipócrita y yo le cierro la puerta en la cara.

-Ya te he dicho que no me gusta que le hables a la vecina.- le digo apenas me volteo y lo tengo en frente.

-Erick, por favor no empieces.- da un suspiro cansado y camina hacia la cocina ignorándome.

-¡Te estoy hablando Joel!

-No quiero pelear.

-Si no quisieras pelear no me harías enojar. Sabes que detesto a esa ofrecida.

-¿Ofrecida?- suelta una carcajada que me hace enfurecer aún más.

-¿Como le llamaría a una mujer que no despega sus ojos de tu trasero?

-Ella no ve mi trasero.

-Tú no lo notas porque no tienes ojos en la espalda.

-Erick, conozco a la señora Andrea desde que vivo aquí, ella no haría eso.

-Y ahora la defiendes. ¿Porque hay tanta confianza entre ustedes? ¿le diste motivos? ¿tuviste una relación con ella?

-¡Claro que no! Es una señora, está casada y tiene dos hijos.

-Esas cosas no suelen ser impedimento para mujeres ofrecidas como ella.

-¡Podría ser mi madre!

-Pero no lo es.

Esa estúpida mujer arruinó nuestra salida. Joel parecía molesto y yo me encerré en la habitación.

-Erick...- escucho leves golpes en la puerta antes de que esta sea abierta. A los segundos entra un Joel triste y se acerca a la cama para sentarse a mi lado.

-Perdoname ¿si? No me gusta que estemos peleados, arruinamos nuestra cita.

-La arruino la ofrecida.

-Erick...

-Ella no me agrada. No quiero vivir aquí.

-¿Que? Pensé que querías vivir conmigo.

-Adoro vivir contigo pero ¿que tal si compramos una casa?

-¿Una casa?

-Si, la decorariamos a nuestro gusto. Estaría lista para formar nuestra familia.

-Yo... no lo sé.- dice pensativo.

-Entonces te gusta vivir tanto cerca de tu vecina, como para rechazar mi propuesta.- suelto molesto.

-Te equivocas, Erick. Lo que más quiero es formar una familia contigo, pero... me preocupa que te enfoques tanto en esto, en mi y olvides tus sueños.

-Tú lo dijiste una vez. Conseguir mis sueños si no estas a mi lado no seria una completa felicidad.


Sorry por no actualizar, pero he estado con un dolor de cabeza fatal y pues las ideas no fluyen. :(

Obsesión ▷Joerick◁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora