Capítulo 11 "¿Omega?"

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–¡¿Cómo que un omega?!

Kim Jonghoon había sospechado algo al percatarse del celo del menor porque había sido demasiado intenso y el suyo también parecía haber sido más complicado de controlar que antes, pero se dijo que podía ser también debido a sus condiciones de alfas, pero esa teoría quedaba atrás después de escucharlo murmurar que en realidad no era del todo un alfa como todos creían.

A diferencia de su olfato que se potenciaba debido a las dos razas viviendo en él, ignoraba muchas cosas relacionadas a su condición porque hasta ese día, las únicas personas similares a él en ese sentido con las que había compartido su vida eran su propia familia, por lo que nunca experimentó situaciones similares a ese grado a excepción de una ocasión en su adolescencia cuando asistió a una escuela "especial" y un estudiante olvidó tomar el medicamento para ocultar su celo mientras aprendía a manejarlo por su cuenta.

–Baja la voz, alguien te escuchará –se quejó y agradeció que no hubiera casi ningún alma en la compañía o habría sido problemático–. Esto tampoco es agradable para mí.

–¿Por qué no lo dijiste antes?

–En realidad no era algo que planeara decirte tan pronto y realmente tengo mis dudas sobre si te lo habría dicho después.

–Si lo hubiera escuchado, yo...

–Por favor, aunque te lo hubiera dicho me habrías follado de igual manera, casi me dejabas sin culo.

Jonghoon carraspeó e intentó ignorar eso último porque sabía que quizás no había sido ciertamente la persona más delicada del mundo apenas y sus manos lo sujetaron–. Si soy honesto, que seas omega no cambia en nada el hecho de que me gustes, pero... no había condones suficientes.

Podía no saber mucho, pero la sexualidad era un tema básico entre humanos y personas de su raza por más de una razón, así que incluso alguien como él que no sabía a profundidad sobre la historia del nacimiento de su especie, conocía lo que podía suceder cuando había intimidad en circunstancias como el celo.

–La última vez te corriste dentro de mí y no sucedió nada.

–Pero en ese momento no estabas en celo –le recordó.

–Jonghoon, los alfas tienen dificultad para procrear, así que es poco probable que suceda lo que piensas y créeme, se necesitan varios intentos sino alguien que conozco estaría lleno de bebés a estas alturas –dijo, recordando al pobre de Youngwoon cuidando a tres mini Sungmins.

Toda su familia estaba conformada por alfas, así que estaba más que consciente de que la tasa de reproducción de estos era la más baja de entre las tres categorías de su grupo, por lo que sabía que era casi imposible quedar preñado, incluso aunque el porcentaje incrementara un par de décimas por un poco de sexo durante el celo.

Suspiró–. Bien.

–Y, por cierto, ni se te ocurra decirle a alguien que soy un omega o yo mismo cortaré tu cabeza, aunque seas mi pareja –le amenazó mientras se levantaba del sillón de cuero sosteniendo precariamente sus ropas para ocultar su desnudez.

–No entiendo, ¿por qué debes ocultarlo? –Incluso él que era un híbrido no ocultaba del todo esa parte de él, al menos no con otros que compartían su ser con una parte animal, sin importar que fuera muy poco común y algo problemático.

–No lo entenderías aunque te lo dijera.

–Podría tratar.

–Podrías, pero es un asunto familiar –respondió, buscando con ello cortar de tajo con el tema– y deja de mirarme, puedo sentir tus ojos sobre mí.

¡Mi jefe es un omega! {YeHyun}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora