VI: Procedimiento

3.5K 553 498
                                    

Seokjin apresuró el paso.

La voz de Lalisa en el comunicador portátil se hizo presente nuevamente, pero esta vez en forma de gritos.

— ¡Jin necesitamos que vengas ahora! ¡No podemos controlarlo! ¡Por favor!

—Estoy en camino —Decidió que echar a correr sería la solución, aún cuando no terminaba de comprender qué sucedía. Ya le habían dicho que no se trataba de Jimin porque venía detrás, así que la única posibilidad restante era Min Yoongi— ¿Qué pasó?

— ¡Despertó y empezó a atacarnos! —Un gruñido y luego el aullido agudo de quien reconoció como Jackson la interrumpieron— ¡Joder, Namjoon, muérdelo o algo!

— ¡No! —Seokjin gritó, sujetando el comunicador contra su boca— ¡No pueden hacerle daño!

Su mente trabajaba a toda velocidad mientras doblaba en el pasillo que daba hacia el sector de llegada y el estacionamiento. Se precipitó lo más rápido que pudo, sintiendo el fuerte olor a sangre en el aire y frunciendo el ceño frente a un aroma aún más fuerte.

Una rápida mirada a los brazos de los soldados a su alrededor le indicó que eran todos Betas, con sus cintas de color verde amarradas al brazo. No eran capaces de percibir lo mismo que él, por eso apuntaban a la cabeza del chico Omega, esperando órdenes.

—Bajen las armas —Susurró, acercándose.

El joven hombre gruñía y se esforzaba por liberarse de Namjoon y Jackson —quien tenía una horrible marca de colmillos en el cuello, con la sangre cayendo por su pecho— a medio transformar. Tenía las manos transformadas en garras, sus colmillos se asomaban y sus ojos se habían vuelto completamente blancos. Estaba defendiéndose a toda costa.

—Min Yoongi —Dijo, caminando lentamente mientras alzaba las manos en signo de paz— Soy Kim Seokjin. Soy un doctor, puedo ayudarte con eso, pero necesito que te calmes un poco.

El Omega aulló en respuesta y pateó a Namjoon en la quijada, mientras éste trataba de sostenerle por las piernas.

—Iré por ayuda —La cabellera rubia de Lalisa desapareció a su lado. Seokjin notó que cojeaba producto de una mordida en su pierna.

—Sé que estás confundido —Dijo, suavizando su voz— Pero el tranquilizante que usamos en ti para traerte aquí no te dejará transformarte en lobo al menos por un día más. Necesito charlar contigo, Yoongi. El humano.

El chico no volvió a aullar, pero seguía tratando de zafarse. Jin pudo leer el miedo en sus ojos y cuando llegó a menos de un metro de distancia, se arrodilló frente a él.

—Lo siento por tratarte así. Pero no sabíamos cómo podías reaccionar... Lo siento —Repitió, bajando la mirada— Pero puedes confiar en mí.

Yoongi olisqueó el aroma de Jin antes de relajarse, dejando de dar pelea. Seokjin había decretado hormonas de confianza a propósito, tratando de establecer un vínculo entre omegas. El chico pareció comprenderlo y más pronto que tarde, respondió a su propuesta echándose a llorar.

Jin alzó la cabeza. El Omega lloraba aún entre los brazos de los Betas, temblando.

—Suéltenlo.

—P-Pero —Jackson gruñó y entonces se dió cuenta de que unas marcas de garras surcaban su rostro también. Yoongi le había dado duro— Puede volverse loco de nuevo.

—Suéltenlo —Repitió y abrió los brazos. El chico frente a él se lanzó contra su pecho, aferrándose a lo único que le brindaba seguridad en ese ambiente desconocido y hostil— Está asustado. No sabe qué está pasando, tenemos que explicarle y tratarlo bien.

Detestable |KOOKMIN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora