Tres semanas habían pasado desde que Calle había sido ingresada por urgencias. Para alivio de sus familiares y amigos de la castaña, sobre todo la peliazul, la castaña había mejorado físicamente, pero seguía en coma.
Poche había estado pendiente del estado de su castaña, visitándola frecuentemente y quedándose varias noches, cuidando de ella. Habían escuchado que Mario había obtenido un cargo de diez años por acoso escolar e intento de homicidio, sin oportunidad de fianza, mientras sus amigos habían ganado una pena de cinco años, por cómplices.
Poche sabía que ellos se dejaban influenciar por su ex novio, ellos lo veían como la persona más genial y querían seguir sus pasos, o al menos eso pensaba de Arango y Johan (quien se había salvado al ser enviado a Londres con sus abuelos) pues de Saak no podía decir lo mismo, el solía ser muy pervertido, tal vez Mario lo influencio más a él.
Aunque eso ahora era lo menos importante. Lo más importante para la peliazul se encontraba reposando en esa cama, con sus hermosos ojos marrones cerrados y las maquinas controlando su estado. El pitido constante del electrocardiógrafo, aquel aparato que media sus latidos, mantenían con calma a la peliazul. Le encantaba hablarle íntimamente y escuchar los latidos de su corazón acelerarse gracias a la máquina.
"Hola Frutita..." empezó con un pequeño saludo. Era sábado y había decidido pasar haciéndole compañía todo el fin de semana "Esta semana estuvo muy pesada" se quejó, dejando su bolso sobre el mueble, cerca de la cama.
Poche rodeo la cama, acostándose sobre ella y abrazándose a la cintura de la menor, inhalando su aroma corporal mezclado con el aroma del hospital.
"Te extrañamos mucho en el instituto..." suspiro "Yo te extraño mucho, bonita" admitió, dejando un beso sobre el mentón de la castaña "Me haces mucha falta ¿sabes? Extraño tus labios, o verte sonrojarte..." Poche no podía evitar sonreír "Cuando salgas y estés mejor, no tendrás que preocuparte por Mario, el ya no nos molestara ¡Esta preso! Y no saldrá por un buen tiempo, tu padre se encargó de eso, además de que no le dieran oportunidad de fianza"
Un pequeño suspiro salió de los labios de Calle y la maquina empezó a pitar con más rapidez. No era la primera vez que sucedía, Calle solía hacerlo con Poche, trataba de comunicarse.
"¿Estas feliz?" pregunto la peliazul, entrelazando sus dedos.
Calle respondió, dándole una pequeña caricia con el dedo. Eso significaba: sí.
"Yo también" asintió la peliazul, acariciando la mejilla de la menor con su nariz "Te extraño bebé" suspiro empezando a cerrar los ojos.
Sin duda la semana había sido agotadora y se merecía un pequeño descanso.
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"Aww... se las ve tan lindas" logro escuchar la peliazul en su estado de inconsciencia.
"Lo sé" un suspiro "Y pensar que Poche no notaba a Calle"
"Si, fue extraño..." poco a poco Poche podía comparar las voces. Eran Paula y Makis.
"¿Cómo pudieron creer eso?" esa era Camila "Si la idiota de Poche se muere por Calle"
"¡Camila!" Lauren regaño a su novia.
"¿Qué?" pregunto a la defensiva "Si yo solo digo la verdad"
"No le digas idiota a Poche" respondió Lauren.
"Si es idiota..."
"¡Cállate!" exclamo la peliazul, abriendo lentamente sus ojos.
"Pero miren, despertó la bella durmiente" se burló Camila.
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Ellos no saben de nosotras [caché g!p]
FanfictionEste libro es una adapatacion camren g!p el autor original es @5H-1D-JB-DL-1997. Advertencia: Calle G!P (Tiene nepe)(Si ya se que Poche es la activa, pero ñññeee :v)