Lauren envolvió sus dedos con delicadeza alrededor de la maltratada libreta, sus ojos se abrieron con sorpresa al darse cuenta de lo que había encontrado. Se suponía que ella y _____ estarían estudiando juntas esa noche, y había llegado temprano al dormitorio de _____, por lo que Dinah la dejó entrar antes de salir de la habitación para pasar la noche. Lauren simplemente rebuscaba en los cajones de la mesa de la chica en busca de un bolígrafo cuando había encontrado el diario sin querer. Sabía que solo debía devolver el libro, pero la curiosidad la enganchó y retiró la tapa para revelar la primera página.
Querido diario,
Realmente no entiendo el punto de grabar mis pensamientos en un diario ridículo, pero al ver que mi padre insistió en que lo convirtiera en un hábito, ¿por qué no hacerlo con un poco de humor?
Es mi primer día oficial de universidad. Me mudé a mi dormitorio esta tarde. Mi compañera de cuarto es tan linda.
Conocí a una chica hermosa, ojos verdes, cabello negro, piel pálida... La vi cuando fui a recorrer un poco por aquí, creo que su nombre era Lauren... Ojalá pueda volver a verla.
—Muy bien, Lauren, debes detenerte. Esto es una invasión de la privacidad.— Lauren se reprendió en voz alta para sí misma, con vergüenza enrojecer sus mejillas mientras colocaba el libro sobre el escritorio. Se sentó por unos minutos, moviéndose nerviosamente con las manos mientras observaba cómo la manecilla de los minutos en el reloj sobre la puerta se movía a un ritmo agonizante. Sus ojos estaban fijos en el diario, luchando duramente contra su mente inquisitiva para evitar que abriera el cuaderno.
Lauren tardó cinco minutos en darse por vencida. Agarró el cuaderno, abriéndolo rápidamente a la siguiente entrada cuando comenzó a empaparse de las palabras escritas de la chica.
Querido diario,
¿Recuerdas a esa ojiverde de la que te hablé? La he vuelto a ver hoy, estaba con otras tres chicas, de las tres ella era la más hermosa.
Ella me pidió que me uniera al equipo de voleibol, pero los deportes no van conmigo... ¿Debería intentarlo? Por solo verla todos los días, creo que le daré una oportunidad.
Un feroz sonrojo se puso sobre las mejillas de Lauren al recordar todo el eso. Saltando algunas páginas, Lauren se detuvo en una página a la mitad del diario. Sus ojos se agrandaron mientras leía lo que escribía _____, su mandíbula ligeramente abierta con incredulidad.
Houston, tenemos un problema.
¿Recuerdas a la ojiverde? Justo como pensaba, su nombre es Lauren. Y terminé yendo a audiciones como ella me pidió. Entré. Pero ese no es el problema.
Tengo un poco de algo por Lauren.
No como un "vamos a conectar y tener relaciones sexuales un par de veces antes de que finjamos torpemente que nunca sucedió", sino como un "Me podría gustar más de lo que se supone y es aterrador porque puede ser grave". Hay tantas cosas mal con este escenario.
Para empezar, no sé si le gustan las chicas. Demonios, ni siquiera sé si me gustan las chicas. Quiero decir, siempre me he preguntado cómo sería y todo, pero ¿no es eso simplemente una curiosidad natural? Siento que lo es. Para empeorar las cosas, James no dejará de venir a mí, no importa con qué frecuencia lo rechace. Es realmente molesto y desearía que se rindiera.
Sin embargo, Lauren es diferente. Realmente no puedo precisar por qué es diferente, pero simplemente lo es. Tan estúpido como suena esto, siento como si nuestras vidas estuvieran destinadas a cruzarse entre sí. Como si estuviéramos destinadas a encontrarnos. Está bien, esto suena estúpido. He terminado con esto por hoy.
—¿Qué estás leyendo, Lauren?— La voz de _____ sacó a Lauren de su trance, una expresión de pánico cayó sobre su cara cuando cerró el cuaderno de golpe.
—N-nada,— murmuró ella, su rostro comenzando a ponerse rojo.
_____ cruzó la pequeña habitación hacia ella, sus ojos torcidos en confusión mientras miraba el cuaderno. —¿Es ese mi diario?—
—Lo siento mucho, _____. Estaba buscando un bolígrafo y accidentalmente lo encontré en tu escritorio y no debería haberlo mirado y yo-—
—¿Leíste mi diario?— La voz de _____ estaba llena de dolor, una mirada de traición grabada en sus ojos. Lauren miró el bolígrafo en su mano, maldiciéndose silenciosamente por ser tan insistente en encontrar el maldito utensilio de escritura en primer lugar. —¿Cuánto leíste?—
—No mucho, lo juro.— Se apresuró Lauren, rogando que su respuesta alivie algo de la tensión que llenaba la habitación.
—Pasa a la última página que leíste.— Ordenó _____. Lauren obedeció, la preocupación llenó su mente mientras pasaba las páginas del cuaderno. Al detenerse en la página que acababa de leer unos minutos antes, le tendió el diario a ella. _____ leyó las primeras frases y se pasó una mano por el pelo cuando se dio cuenta de qué página era.
—Mierda.— Murmuró, cerrando el libro con firmeza y haciendo que Lauren se estremeciera.
—Lo que escribiste... ¿Es verdad?— Lauren dudó, sin saber qué esperar de ella. _____ miró el diario en sus manos, pasando los pulgares sobre las palabras grabadas en la portada.
—Cada palabra.—
—¿Me creerías si te dijera que tal vez siento lo mismo que tú?— Lauren respiró hondo, con los ojos fijos en _____.
—Probablemente no.— Se rió _____. —Me suena como si solo estuvieras tratando de difundir la situación o algo porque te sientes culpable.—
—No estoy mintiendo.— Resopló Lauren.
_____ arqueó una ceja, su mano libre cayó sobre su cadera. —¿En serio? Demuéstralo.—
Lauren cerró el espacio entre ellas, sin necesitar más instrucciones mientras presionaba sus labios contra los de la otra chica. Antes de que _____ pudiera registrar lo que estaba pasando, Lauren se apartó, con una leve sonrisa dibujando las comisuras de su boca.
—¿Me crees ahora?—
—No lo sé, tal vez si lo intentas una vez más.— _____ se encogió de hombros, fingiendo ignorancia. Lauren la besó de nuevo, esta vez obteniendo una respuesta inmediata de ella. Los labios de _____ se movieron en perfecta sincronización contra los de la ojiverde, su lengua deslizándose a lo largo del labio inferior de Lauren con desesperación por sentir más de ella. Lauren obedeció alegremente, pasando sus brazos alrededor del cuello de _____ mientras el beso se profundizaba. _____ se apartó primero, jadeando cuando ambas mujeres intentaron recuperar el aliento.
—Está bien, te creo.— se rió _____, apoyando las manos en la cintura de Lauren mientras le daba un pequeño beso en la mejilla.
—¿Esto significa que me perdonas por leer tu diario?— Preguntó Lauren, pasando sus dedos ligeramente por el cabello de _____.
—Supongo que puedo dejarlo pasar esta vez.—
