Aniversarios, a T/N siempre le habían gustado, al menos desde que estaba con Lauren. Había algo conmemorar en todo el tiempo que pasaban juntas. Esta noche celebraban los primeros cuatro años de su matrimonio y brindaban por muchos años más juntas. Estaba tranquila, una noche entre semana en el restaurante favorito de Lauren, donde saboreaban el vino favorito de T/N. No podía pensar en una forma más perfecta de pasar la noche, excepto tal vez solas en casa, pero esta noche se trataba de una celebración más grande. Admiraba la sonrisa de Lauren; llena de exuberancia y alegría, reservada para cada vez que se encuentraba con algo o alguien especial. T/N admiraba sus ojos y la forma en que brillaban incluso a la tenue luz del restaurante. T/N estaba ocupada admirando a su bella esposa mientras esperaban sus comidas. Fue sacada de sus pensamientos solo cuando la otra mujer habló, para hacerle una pregunta que ella pensó, pero realmente no había estado prestando atención.
"Lo siento, ¿qué dijiste? Me distrajo la belleza de cierta ojiverde" T/N sonrió.
"Bueno, estamos dulces esta noche, gracias amor. Te ves hermosa también y llevas tacones".
"Los llevo, pensé que te gustaría eso. ¿Qué me preguntaste?"
"Oh, acababa de preguntar si podemos hablar de algo".
"¿No es eso lo que estamos haciendo ahora?"
"Siempre tan sarcástica", la ojiverde le sacó la lengua, "quise decir algo serio".
"Cualquier cosa, dime".
"Sé que cuando nos casamos dijiste que no estabas lista, pero esperaba que estuvieras interesada en formar una familia ahora. O quiero decir, al menos abierta a hablar de eso".
"Sí", dijo T/N, sin ningún indicio de vacilación en su voz, "deberíamos tener un hijo", agregó, aclarando exactamente a qué se refería su afirmación.
La sonrisa que apareció en las facciones de su esposa ante esa simple declaración fue suficiente para iluminar todo el restaurante. Se inclinó sobre la mesa para besar a la morena con fuerza en los labios, antes de volver a sentarse. Acordaron hablar más sobre eso cuando llegaran a casa, disfrutaran de la compañía del otro y celebrar. T/N no pudo evitar sonreír cuando Lauren pagó la cuenta, ya llena de entusiasmo por la conversación que iban a tener en casa. Ella realmente no estaba lista hace cuatro años para tener un hijo, pero ahora, realmente pensaba que sí.
Le había costado unos pocos años cuidar a los sobrinos y sobrinas de Lauren, admirablemente adorables, pero T/N ahora estaba entusiasmada con la posibilidad de tener un hijo propio. Tan emocionada como estaba, sabía que Lauren estaba loca por la idea. Había estado lista y esperando todos estos años para que T/N estuviera en la misma página.
"¿Entonces?" Lauren sonrió radiante, sentándose en el sofá y pateando sus talones.
"¿Entonces?"
"Entonces, vamos a tener un bebé".
"Lo tendremos, al menos si aún quieres", bromeó la morena.
Lauren se lanzó sobre el regazo de su esposa, ahora sentada, envolviendo sus brazos alrededor del cuello de la otra mujer y besándola en el cuello.
"¿Qué tal si vamos a acostarnos y hablar sobre los detalles?" la ojiverde le susurró al oído.
"Hmm, suena bien".
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Realmente no llegaron a discutir los detalles esa noche, pero a medida que la luz de la mañana se asomaba por las ventanas de su habitación, continuaron donde lo dejaron. Decidieron que Lauren llevaría a su primer hijo, Lauren estaba tan entusiasmada con la posibilidad de llevar a su hijo que T/N estuvo de acuerdo. Lauren, siendo la mujer dulce y encantadora que era, le preguntó a T/N varias veces si estaba segura. T/N acaba de decir que no estaba lista para quedar embarazada en este momento, pero eso era solo la mitad de verdad. Realmente le encantaría estar embarazada, pero no quería quitarle la experiencia a Lauren, no después de haber esperado tanto tiempo. Haría cualquier cosa para hacer feliz a Lauren, incluso dejarla llevar a su primogénito; no se hicieron preguntas. Sabía que Lauren querría más hijos de todos modos.