Romeo x Cinderella

Conociendo

Recomendación para leer este capitulo: escuche I know you were trouble y wrecking ball. Así tendrá más emoción

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Makoto se levantó temprano al día siguiente del baile. Casi no había podido dormir, el ruido de la fiesta y el pensar que estaría viviendo en ese lugar temporalmente no fue de mucha ayuda. Podría jurar que cuando logro dormir un poco una sirviente había ido a tocarle la puerta para avisar que en media hora estaría el desayuno.

Sin mucho que hacer o decir se vistió para ir al gran comedor. La misma persona que le había ido a hablar lo esperaba fuera de la puerta para acompañarlo. No conocía el lugar y sin duda alguna se perdería

Siguió a la joven por los pasillos y también bajando escaleras. Makoto observaba las adornos y decoraciones del lugar, mientras veía la vista de una ventana había logrado observar una gran piscina. En ese momento recordó que su madre le había dicho antes de llegar al castillo que el príncipe de ese lugar adoraba nadar

Entonces se dijo para si mismo que tenían algo en común ya a que él también le gustaba nadar.

«Tal vez podríamos nadar juntos en tiempo que esté aquí y logre conocerlo mejor »

Rió un poquito ante ese pensamiento, desde que había visto al de color azul profundo había querido conocerlo. Daría lo que fuera para saber que es lo pensaba Haruka. Como si alguna parte dentro de si mismo gritara por... por algo, no tenia idea de que, pero el sentimiento estaba ahí. Y sabia que eso significaba problemas desde el momento que lo vio.

Como una terrible atracción.

«Atracción... ¿eh? sólo tal vez eso sea »

A decir verdad, el pensar eso no le era desagradable, era como si sus dudas anteriores se hubieran ido tan rápido sólo con darse cuenta de eso. Y el sueño que había tenido el tiempo que pudo dormir le decía que sus sospechas no iban tan mal.

Porque, no era normal soñar que besas a una persona que acabas de conocer y mucho menos si es hombre. Makoto tenía dos opciones.

1.- El poco de vino que tomó en la fiesta le hizo daño

2.- Realmente se sentía atraído por Haru.

«¿Desde cuando he comenzado a llamarlo Haru?»

La voz de la joven que lo acompañaba lo saco de sus pensamientos.

-Joven Tachibana, aquí está el salón. Sus padres y mis señores ya lo estaban esperando dentro.

Makoto le sonrió con amabilidad.

-Gracias, pero no es necesario hablarme tan formal. Tengo la sospecha de que somos de la misma edad. Puedes llamarme Makoto. ¿Tú eres?

-Mami Aizawa.

-Muy bien Mami-chan. Gracias por traerme aquí.

-No se preocupe, Makoto.

-Así está mejor. Nos vemos luego.

La joven ahora de nombre Mami, se inclinó levemente y se fue para seguir con labores. Makoto abrió un poco la gran puerta del salón y observó a sus padres hablar animosamente con los padres del de cabello negro.

Cuando sus padres y los reyes se percataron de que había entrado lo saludaron con un "buenos días" el cual él correspondió de manera alegre. Como era su costumbre.

Se sentó en la gran mesa y se dio cuenta que había quedado enfrente de Haruka. También observó que el chico no le había dado los buenos días como los demás pero en sus ojos había algo. Un brillo tal vez. Entonces se percató de que en su mirada se leía claramente un "buenos días". Le sonrió, queriendo dar gracias.