Declaración de Guerra en el equipo siete

Misión rango B -pasado-

En las sombras de los bosques de Konoha había movimientos rápidos y ágiles.
― Se dirige a las doce.― dijo Sasuke desde encima de un árbol activando su sharingan y pasando de tronco en tronco a toda velocidad.
Hinata se deslizó al suelo intentando impedir que el objetivo siguiera avanzando pero este la esquivo.
― ¡Mi turno dattebayo!
Grito naruto saltando y tomando a la presa con sus dos manos.
Su equipo y Kakashi se acercaron para ver que lo que perseguían ahora arañaba y atacaba a Naruto.
― ¡estúpido gato!
Hinata se acercó preocupada tomando el gato y haciendo que se tranquilizara al instante.
― ¿Es...estas bien naruto-kun?
Se encontraba con arañazos y lleno de polvo pero fuera de eso parecía estar en perfecto estado.
― Si... ¡ahh! ¡Kakashi! ¿¡Cuando nos pondrá una misión de verdad!?
Habían pasado más de un mes en misiones fáciles y sin peligro. Obviamente eso molestaba a Sasuke y naruto.
― Aún no están preparados.
Concluyó Kakashi encaminados a la oficina del Hokage para dar el informe de la misión.

――

― ¡Abuelo! ¿¡Cuando nos pondrá una misión de verdad!? ¿Qué tal algo de peligro?
Grito naruto una vez que la dueña del gato se había retirado.
El tercero sabía que eso pasaría con el hiperactivo muchacho. Hinata miro a naruto con una sonrisa. Le agradaba que fuera siempre tan energético.
― ¡Eres un gennin! ¡No puedes esperar esas misiones hasta mucho después!
Le grito Iruka molesto por su insolencia. Sabía cómo era su alumno.
― tranquilo Iruka, Naruto sólo nos quiere demostrar que ya no es el mismo muchacho de antes ¿cierto Naruto?
El rubio sólo se sentó y cruzó los brazos molesto haciendo entender que no se movería de ahí hasta que le dieran una buena misión.
― Lo siento tercero.
Se disculpó Kakashi apenado. Sasuke por su parte estaba de acuerdo con Naruto así que se sentó a su lado.
― ¿Sasuke? ―se sorprendió Naruto.
― por primera vez en tu vida tienes razón.
Hinata de quedo tras de ellos mirándolos desconcertado, más que nada por la actitud de Sasuke hacia Naruto. Por lo general se molestaban pero ahora parecían apoyarse. El azabache le dio una mirada de reojo que tomó con la guardia baja a Hinata.
No sabía bien cómo interpretarla.
― Bien Naruto ―hablo el tercero con calma― tú y tu equipo serán escoltas fuera de la aldea.
― ¡si! ¿¡Que será!? ¿¡Una princesa!? ¿¡Un empresario!? ¿¡Que!? ¿¡Que!?
― Paciencia, en un momento lo conocerás.
La puerta detrás de ellos se abrió revelando a un señor mayor bebiendo una cerveza. El equipo siete abrió sus ojos y pidió internamente no fuera la persona que decía el tercero. ― Me llamo Tazuna un famoso constructor de puentes. ―el hombre miro al grupo extrañado.

― Buenas tardes Tazuna, pase. Conozca al equipo que lo escoltara.
― ¿¡no me digan que esos mocosos me van a escoltar!? ―grito el hombre alterado y mirar a los que consideraba unos simples niños.
― ¿¡a quien llamas mocosos viejo borracho!?
― ¡Na...Naruto-kun!
― ¡espera dobe!
Hinata y Sasuke sostuvieron a Naruto para que no se le fuera encima y lo lastimara.
Esto es una mala idea
Pensó Kakashi al ver a naruto tan alterado.
― Y miren, ese cara de tonto me quiere atacar. No creo que sean aptos para esto.
― ¡Ya vera! ¡Suéltenme dattebayo!
Iruka y el tercero creyeron que esa lección le ayudaría a naruto a no despreciar ninguna misión.
― Disculpe los inconvenientes Tazuna, pero el equipo siete es perfecto para la misión.
― Como sea, los espero en la entrada en dos horas.
Tazuna se fue dejando al equipo siete un revoltijo por tratar de detener a indignado Naruto.

――
Caminaban detrás de su Sensei y Tazuna. Habían corrido por sus cosas y provisiones ―Naruto exagerando mucho y al final desistir por lo básico― que apenas lograron llegar a tiempo.
Aun así el mal educado señor no dejaba de quejarse por haberles asignado a unos niños.
― Si no se calla lo golpeare dattebayo.
― No...no por favor naruto-kun. ―pidió Hinata quien caminaba a lado de él.
Este cruzó sus brazos intentando tranquilizarse.
De repente unas cadenas se escucharon tras de ellos donde se encontraron a dos Jōnins que venían directo a ellos junto a sus cadenas, pero Kakashi se interpuso haciendo que estas se enredarán en su cuerpo y cortándolo en pedazos.
― ¡Kakashi-Sensei!
Gritaron impactados por lo que acababan de mirar.
Pero ese acto no detuvo a los ninjas y Naruto no podía siquiera moverse.
El ninja que tenía una garra de metal iba hacia el dispuesto a matarlo pero unos kunais fueron lanzados atorando las cadenas a los troncos de los costados y haciendo retroceder a ambos. Alguien cayó en los brazos de los Jōnins que se encontraban encima de Naruto.
Este miro hacia arriba dándose cuenta que quien le había ayudado era Sasuke.
El azabache le miro y sonrió antes de que los dos Jōnins se despegará de sus guantes mecánicos y poder atacar por separado, uno yendo directo a Tazuna.