Los unimos de nuevo, primero suavemente, pero luego el beso fue tomando profundidad. Enredé mis manos en su cuello y él en mi cintura, mientras me aferraba a su cuerpo. Se abrió paso con la lengua y jugueteó con la mía para luego volver a un beso tranquilo pero igual de apasionado y lleno de amor. En mi estómago las mariposas se desataron enloqueciendo y la piel se me erizó bajo las manos de Liam que la acariciaban. Llevé mis manos a su rostro y lo separé del mío; los labios me punzaban y aun en contra de su propia voluntad se despegaron de los de Liam, aunque él quiso buscarlos de nuevo.
-Liam, espera -jadeé.
-Lo bueno del tiempo es que cura las heridas, lo malo de los besos es que crean adicción -musitó e intentó acariciarlos otra vez con los suyos.
-Liam -pero yo me hice para atrás unos pocos centímetros, ya que él me tenía entre sus brazos.
-¿Qué?
-¿Me amas? -pregunté, como niña tonta.
El rió y el soplo de su risa fue embriagador.
-¿Qué clase de pregunta es esa? ¿Tú crees que si no te amara, habría cruzado el mediterráneo para ir a buscarte a Egipto, luego a California, para al último perseguirte hasta aquí y ponerme a cantar en medio de todo Nueva York para que me escucharas y luego estar dispuesto a ir contigo hasta el fin del mundo si eso es lo que quieres? ______ -retiró sus manos de mi cintura y las llevó hasta mis mejillas, ambos quedamos en la misma posición. Me miró a los ojos y habló lo más claro posible-, juro que te amo como un loco, como un demente y desquiciado que no soporta vivir sin ti. Juro que como te amo jamás he amado a nadie y que quiero pasar el resto de mi vida contigo y ser el padre tus hijos. ¿Eso te contesta tu pregunta?
Una lágrima corrió por mi mejilla pero no terminó su camino ya que Liam la interceptó con un beso.
-Ti amo, il mio bella musa fotografa -susurró a mi oído, besó mis labios y luego me dejé envolver en su amor.
Había tomado una decisión de la que no me iba a arrepentir, ahora podía estar segura, entre sus brazos y con mis labios unidos a los suyos. Pude ver la escena de nosotros dos besándonos como en las películas, cuando en el centro de la pantalla permanece la pareja y cómo se va alejando desde arriba. Era increíble que en mi cabeza no existiera otra cosa que Liam en ese momento, increíble que a pesar de tantos errores y desengaños, estuviéramos allí y él conmigo. Pero más increíble fue que, mi fruto prohibido a final de cuentas fue el indicado.
FIN.
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Les doy permiso de llorar. No puedo creer que llegáramos al final de esto, bueno no por completo ya que falta el epílogo. ¿Quieren saber que paso después? Comenten!! (Aunque bueno lo subiré hoy de eso no hay duda jajaja)
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El Manual de lo Prohibido | L.P |
FanfictionFalso y pérfido eran sinónimos de mi nombre. De todos los papeles que pude protagonizar, era dueña del único que todo el mundo en mi situación, rechazarÍa. Lo peor era que esta no era una obra de teatro, cuyo objetivo es sólo representar, actuar y...