POV IAN
Me sentía fatal, dejar así a Leicy. No explicarle, simplemente irme. Pero no tenia más opciones, si no salía entrarían y me encontrarían junto a Leicy; sería peor. Si salíamos juntos, me haría llevarla y mi padre se aprovecharía de ella.
Tenía que protegerla, si con mi vida era suficiente. Dejaría todo, enfrentaría a mi familia, dejaría los "lujos" solo por estar junto a la persona que amo.
No dejaría que nada le pase, no ahora que me confesó su amor. Y es que lo feliz que me sentí cuando de sus delicados labios salió un te amo, en mi maldita vida jamás había sentido tanta felicidad, tanta alegría. Pues me sentía amado por primera vez.
-Ian, cómo estás, tus hermanas no quieren hablar conmigo. Sabes porque? -lo sabía exactamente, Elsa no quería hablar para proteger a Leicy. Sabía que si abría la maldita boca no se callaría. Y Melissa por el odio que tiene hacia él.
-No, tal vez porque están sorprendidas, digo qué haces tú aquí, no volvías en dos meses? - pregunte tratando de hacer conversación hasta llegar a casa y ahí hablar con mi madre.
-Pues mis asuntos personales y de la empresa fueron más rápidos de lo que pensé, y que me cuentas, me han dicho que has estado subiendo tus notas y que ya no faltas a clases. Hay alguna razón? -preguntó ese estupido señor.
-Porque habría una razón? No puedo ser más eficiente en mi único deber -trate de no dudar al hablar. El había creado un monstruo, sin sentimientos, sin vida, sin corazón. Y ahora que estaba siendo capaz de salir adelante, tenía que llegar a él.
-Pues me alegra que te preocupes por tu bienestar. Y en la empresa, de echo tengo un pago adicional para ti. El último trabajo que hiciste, fue muy bien pagado, además de que pagaron otra extra para ti. Dijeron que lo hiciste excelente y la chica no llegó alterada. - me entregó un sobre donde había una suma de ¿10.000.000? Esto era demasiado.
-Estás seguro de que esto es para mi? -pregunte aún mirando el sobre.
-Si, mira justo al lado dice -señaló el sobre- "para Ian, por un excelente trabajo"
Le pase mi sobre a Melissa la cual escupió el rostro del guardaespaldas de mi padre con su jugo al ver la cantidad de dinero, Elsa río, pues a ninguno nunca nos pareció una buena persona. El camino se hizo corto.
Mis pensamientos estaban en Leicy, que estaba pasando por su cabeza, que sentía, porque tenía que ser la maldita vida tan injusta. Al llegar, baje más rápido que todos. Corrí hasta mi habitación. Guarde unas cosas en mi bolso deportivo, mis cuadernos del día de mañana y el sobre con el dinero, antes de guardarlo le coloqué corrector a sus "Para Ian por un excelente trabajo" no quería que mi quisquillosa novia preguntara por cuál trabajo y yo tener que mentirle por primera vez.
Baje lo más rápido posible, y le hice señas a mi madre, le dije en el oído que ira a donde Leicy y que tomaría su motocicleta. Ella mi guiño el ojo y salió con sus cara inexpresiva a saludar a mi padre.
Mientras manejaba a mi apartamento, pensé en lo destrozado que estaba ese matrimonio. Sabía que mi padre había obligado en sus años a mi madre a casarse con el, pues para ser mi madre debo de admitir que es muy linda.
Con el tiempo mi madre lo aprendió a amar, pero mi padre se encargó de destruir todo cariño naciente en ella para el, golpes, maltratos y engaños. Pues para nadie es un secreto de que mi padre engañaba a mi madre con la primera chicha que se le colocara enfrente. Aunque últimamente mi padre solo se acuesta con una "gran empresaria".
Al llegar estacione justo atrás de mi auto. Corrí hasta la puerta y golpeé varias veces hasta que el rostro de un serio y tenebroso Joseph se asomó. Relajo sus facciones al verme y me dejo entrar.
Corrí hasta mi sala de estar donde estaba Leicy, mi Leicy, sentada con rostro de preocupación y varias fotografías justo enfrente de ella.
-Mi amor -al escucharme decir eso, alzo su rostro y corrió hasta mi, me dio un dulce pero necesitado beso. Uno de esos que necesitas siempre. Uno de dos besos que solo ella logra darme.
-Me tenias tan preocupada, enserio que no sabia que hacer. Así que empecé a hacer eso -señaló las fotografías.
-¿Que Es eso? - pregunte mirando las fotografías.
-Se que tú no me escondes nada, y eso quiero pensar -suspiré y pensé si te escondo mi maldito pasado y mi presente. - así que te diré. -suspiro y se sentó donde estaba antes yo me senté enfrente a ella.
«Hace un tiempo he estado recibiendo estas fotografías, diciendo cosas y siento que alguien les envía para decirme una pista o ayudarme a descifrar algo. No lo sé tal vez estoy loca o siento muchas ganas de descubrir el secreto de mi madre, pero de verdad, siento que alguien quiere decirme algo, y no lo defraudaré.»
Me paso las fotografías y la verdad, lo sentí como un balde de agua fría. La primera fotografía salía él, la segunda fotografía salía mi novia junto a una señora marcada como un "maldita mentirosa" y la tercera me dejo perplejo; era ella, esa niña, mi niña, mi primer amor, estaba justo en esa fotografía.
Voltee a ver a Leicy la cual no notaba mi mirada, estaba observando la segunda fotografía y escribiendo algunas cosas. Acerque lentamente esa fotografía a su rostro, era demasiado el parecido. La chica que tenía mis sueños desde hace 7 años estaba justo enfrente a mi, era mi novia y eso yo no lo sabía. Ahora más que nunca tenía que protegerla con mi vida si era necesario.
Tenía justo al frente a la señorita Leicy Starcks Linkings; mi ex objetivo.
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"Me pasó las fotografías y la verdad, lo sentí como un balde de agua fría"
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Dame otra oportunidad
Підліткова література- No puedo seguir así. -Por Favor Leicy mírame, entre tu y yo pueden haber miles de inconvenientes pero siempre hemos sido a tu y yo nada más. Hemos podido salir adelante mi vida es gracias a ti. - Lo siento no puedo seguir. - Por favor dame otra...