DÓMINES(Sakura-Harem)

I. Buscando Trabajo

[Pov Sakura]

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La situación económica de mi familia es crítica, la hipoteca de la casa donde mis padres con tanto esfuerzo consiguieron cada vez aumentaban más es irónico mi padre quien la construyó con sus propias manos hoy nos lleva a la ruina por sus malas decisiones y negocios fracasados, mi madre Mebuki se sintió en la obligación de conseguir dos trabajos para pagar las tasas de interés y las otras deudas que teníamos, sin embargo aún con eso no era suficiente para mantenernos bien al cumplir los 18 años empecé a buscar trabajo si quería ayudar a mi madre y salir adelante debía conseguir uno urgente así fuese de medio tiempo las deudas no se hacían esperar.

Al pasar los meses todo se complicaba ya que a mi edad era imposible conseguir no tenía la experiencia que se requerían en las empresas donde intentaba buscar una oportunidad laboral, tuve que dejar los estudios aún lado la Universidad era demasiado costosa y lo poco que Mebuki conseguía era para el sustento diario recordé que en la prepa mis mejores amigas me ofrecieron un trabajo del cual ya no recuerdo de que trata, solo se que la mayoría trabaja ahí y el pago es muy bueno esa sería una salida para mejorar la situación.

Me contacte con Ino ella conocía mis penurias así que me ayudaría a entrar y comenzar lo más rápido posible.

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Días después.

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--Ino. ¡Frentona! Sabes que este no es un trabajo común y corriente hay reglas que debes obedecer así no estés dispuesta.

--Sakura. "Preocupada" --Lo sé Inopuerca, pero sabes que nadie me va a recibir por mi falta de experiencia mi única salida eres tú cuento contigo para entrar.

La rubia se cruzó de brazos y levantó una de sus cejas.

--¿Sabes de que trata está academia cierto? ¿Por lo menos has investigado sobre ellos verdad...los hermanos Uchihas?

Sakura hizo un mohín confundida.

--¡Ummm...No mucho! la verda es que no conozco nada acerca del mundo del BDSM, yo sólo quiero el trabajo de empleada doméstica lo demás no me interesa.

--Ino. "Suspiró"-- Esta bien frentona, hablaré con Dómine Madara él decidirá si te contrata o no, ¡solo te recuerdo amiga si entras en la academia mantenlos alejados!

--Sakura. "Confundida"--¿A quienes Ino?

La rubia rodó los ojos exasperada.

--A los Dómines Uchihas...

--Sakura. Esta bien, esta bien lo que tu digas solo avisame cuando sepas algo--Miro el reloj de su muñeca y fruncio el ceño--Debo irme Mebuki llegará pronto y todo será un caos.

Se despidió de su amiga y salió del apartamento de ella, la rubia no se daba mala vida al contrario vivía en una de los mejores zonas residenciales de la cuidad de Japón, al llegar a la calle tomo un atajo para esperar el transporte público y dirigirse a su humilde casa.

Al llegar a la puerta de su casa sus fosas nasales se llenaron del horrendo olor a licor Kizashi su padre estaba tirado en el sofá de la sala con cuanta botella vacía a su alrededor, se llenó de ira siempre era lo mismo miles de veces se preguntaba si él no sentía pena al ver que su madre trabajaba sin cesar por ayudarle en sus propias deudas, enfurecida subió a su habitación si las cosas seguían así pronto no tendrían ni donde dormir se lamentaba al ver el giro tan grande que dio su vida en pocos meses.

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Horas después Mebuki llegó y como era de esperarse los dos comenzaban a discutir siempre por lo mismo, aún no me explico como mi madre seguía con él, ¡Si lo sé...es mi padre pero en vez de buscar alguna solución cada vez se hunde más en el alcohol! Debía salir de ese mundo a como de lugar y de paso ayudar a mi madre llevándola conmigo.

A la mañana siguiente muy temprano Ino se comunicó conmigo al fin eran buenas noticias al parecer los señores Uchihas querían entrevistarme, así que me levante entusiasmada tome una ducha saque un vestido lo más acorde a la ocasión y termine de retocar mi rostro con un maquillaje lijero. Baje rápido ya no había tiempo de desayunar bueno tampoco es que hubiese algo en la alacena así que cogí una manzana, las llaves de la casa y el dinero que tenía ahorrado para el transporte ya que era en un lugar bastante lejano y ubicado en los estratos sociales más altos de la ciudad.

Seguí las instrucciones que Ino me dio y llegue a una enorme mansión era extraño ya que imagine que sería en una empresa o una cooperativa como se acostumbra, llegue al enorme portón de madera y toque el timbre pensando en que ojalá si fuese el lugar y no me habría perdido, después de unos segundo salió una hermosa chica de cabello castaño vestida con traje de sirvienta muy corto para ser real.

--Sakura. Eh...buenos días vengo a una...

--Lo sabemos eres la nueva sigueme mis amos te esperan.

--Sakura. "Aturdida"--¿Amos?

--Así es, por cierto soy Izumi.

--Sakura. Encantada soy Sakura Haruno...

La chica le sonrió amablemente la hizo pasar llevándola al salón principal..

--Izumi. Espera aquí mis amos vendrán en unos minutos y buena suerte Sakura.

--Sakura. Asentí un poco nerviosa ese lugar me daba escalofríos demasiado lujoso para ser una simple mansión de ricos con extrañas pinturas en lienzo y mármol que llenaban cada pared y un emblema en partícular en toda la mitad del techo algo parecido aún abanico rojo con azul, Izumi se marchó dejándome a la espera del señor que supuestamente me iba a entrevistar.

Después de unos minutos que parecieron eternos la puerta del salón se abrió y mi sorpresa llegó no era uno eran cinco grandes hombres que entraron con porte intimidante, sus masculinos cuerpos destilaban dominio los cinco tenían algo en común lo que supuse que eran familia ósea los hermanos Uchihas de los que tanto Ino me había persuadido ahora los tenía a todos enfrente de mí, cada uno con una belleza exótica desde el mayor hasta el más joven, sin duda eran hermosos.

El que parecía ser el mayor tenía una cabellera negra y larga hasta más abajo de la cintura, su cuerpo era fornido y trabajado, su piel morena y bronceada lo hacía sensual, su rostro perfecto lleno de masculinidad sin duda era todo un hombre sexy.

El que seguía era un poco más delgado pero igual de fibroso, su tono de piel era más pálido, su cabello castaño igual de largo al mayor, su bello rostro destilaba pasión ardiente.

El siguiente era igual al otro alto de piel nivea y sedosa, cabello corto y desordenado también color negro azabache, con un brillo único, su cuerpo era marcado por su arduo trabajo en el gym y su rostro ni se diga era pecaminoso y bien perfilado.

El que sigue era igual de guapo a los anteriores, llevaba el pelo largo atado en una coleta baja, su piel de porcelana que hasta daba envidia, su cuerpo también mostraba sus sexys músculos fibrosos, tenía un rostro caliente era sin duda un pecado latente, unas suaves ojeras le daban ese toque sin igual.

El último y el menor no se quedaba atrás su cabello un poco largo y desnivelado le daba ese toque despreocupado, su cuerpo al igual que los cuatro también era trabajado bien marcado, su rostro mostraba gentileza pero que nada te engañe al igual que los otros sus ojos onix mostraban fuego intenso que quema al instante, de miradas sombría e intimidante todos eran hombres salvajes de eso estaba completamente segura.

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Chicas gracias por leer😘.