Vikings || ONE SHOTS - IMAGINES ||

9: IVAR.

IVAR THE BONELESS

Advertencia: Ninguna.
Resumen: Angrboda y Ivar se han conocido desde que eran muy pequeños. Angrboda, al ser hija de Floki, creó un lazo especial con el Deshuesado, pero lamentablemente, la muerte de su madre Helga, en Inglaterra, rompió el corazón de la joven escudera convirtiéndola en alguien fría y sin sentimientos.

Pedido por: NataliaStanBarnes20

Ojalá haya quedado más o menos como vos querías, gracias por la confianza 💕

***

9. Tal para cual.

Camino despacio hasta llegar a la puerta del salón.
Ivar se encontraba sentado en el estúpido sillón que usaba como trono. En su cabeza, él ya lideraba un ejército, y pronto volveríamos a Kattegat para vengar la muerte de Aslaug en manos de Lagertha.

Su mirada se encuentra perdida en la nada misma, mientras que sus manos apretando con fuerza los apoyabrazos del trono.

— ¿Y a tí que te pasó, lisiado? — le pregunté acercándome a él, y robando parte de su comida.

— Sabes... Creo que todo está resultando mejor de lo que creo, Angrboda. Pronto volveremos a Kattegat y al fin mataré a la asesina de Lagertha.

— Ése era tu plan desde un principio, ¿ O no? — pregunto restándole importancia a sus palabras.

— Claro que sí. Pero ahora...veo todo con mucha más claridad.

— ¿Y la esclava que escapó de aquí vistiendose recién te hizo ver las cosas con claridad? — pregunto, robándole otro trozo de fruta.

Ivar gira mi rostro hacia mí por primera vez y me mira con su ceño fruncido — ¿Qué dices?

— La ví cuando venía aquí — le contesto sin más. Subo mi mirada y lo observo mirándome desconcertado — Hasta que al fin pudiste complacer a una mujer, deshuesado.

Ivar niega con su cabeza, mientras muerde su labio inferior con fuerza  — Siempre te creí dulce como lo era tu madre, Angrboda. Últimamente solo hablas idioteces.

— ¿Idioteces? — pregunto indignada mientras me levanto delante de él y lo miro con detenimiento — ¿Y como mierda te sentiste tú cuando tu madre murió de forma patética e indigna, Ivar? ¿Qué fue lo que sentiste en el supuesto corazón que tienes, eh?

— Valor. Valor para vengar su muerte.

— ¿Y cómo piensas que me siento yo al saber que una estúpida niña tonta fue quien asesinó a mi madre? Crees que todo es muy fácil, pero no... Jamás podré vengar la muerte de Helga, y eso... oscureció todo lo bueno que había en mi. — le contesto conteniendo el dolor en mi garganta.

No quiero llorar. Hace tiempo que no lo hago. Con mi madre muerta, mi padre sintió que su vida ya no tenía sentido, así que partió de aquí. Partió dejándome al cuidado de Ivar, sin importar lo que yo sintiera al sentirme tan sola.

— Todos tenemos algo bueno...— lo interrumpo con mi risa irónica.

— ¡Por los dioses! Te conozco desde que naciste, y sé que no tienes nada bueno.

— ¡Si! ¡Si lo tengo! — me grita enojado. Me cruzo de brazos y decido escapar de aquí antes que empiece con su conocido discurso. — ¡Te tenía a ti, Angrboda! Tú... tú me hacías ser mejor.

Detengo mis pasos cuando oigo sus palabras. Él también solía ser lo bueno en mi. Ivar podía ser despiadado y cruel, pero entre nosotros había una amistad especial hasta dulce diría yo. Pero todo cambió. Ya nada es igual.

— Ya nada es igual, Ivar.

— Debes dejarlo ir. Si no tiene solución, déjalo ir, Angrboda, y...vuelve a mi. Vuelve a ser la escudera valiente y cariñosa que siempre has sido. Eras lo único bueno que me quedaba después de mi madre, y ahora...quiero que seas tú otra vez. Somos tal para cual, nacimos para estar juntos y tú solo retrasas todo con tu rencor.

Vuelvo a reír y retomó mi camino, no sin antes decirle — Tú eres el rencor en persona, Ivar. No me vengas con estupideces.