La hija de Slenderman (Rubius y tú) {Mini novela} TERMINADA.

Capítulo 8-Adiós Noruega, hola Madrid

*2 semanas después*
____ P.O.V
“¿Escaparme y descubrir un nuevo lugar?
¿Decepcionar a mi padre?
¿Rubén se haría cargo de mi y NUNCA me abandonaría?”

Esas preguntas rondaban mi cabeza.

Estas dos semanas pasé escapando me de casa a escondidas y quedando con Rubén y Mangel. Se habían convertido en mis mejores amigos. Me daban confianza.

Hoy Rubén y Mangel se irían a Madrid, y ellos esperan con ansias que YO vaya con ellos.

Todos los días, horas, minutos y segundos hablaba con Rubén. Bueno, más bien él me hablaba. Estaba con mi padre y Carlos en el salón, ellos miraban fútbol y yo hablaba con Rubén. Sonreía a la pantalla. Hasta que apareció el nombre “Rubén” en la pantalla. Me estaba llamando. Me fui a mi habitación y lo cogí.
*Conversación telefónica*

-Hola- salude con una tierna voz.

-Hola...- dijo triste.

-¿Qué pasa?

-Hoy me voy...- suspire.

-Lo sé... Pero mira lo por el lado bueno, vuelves a tu casa- intenté animarlo.

-No quiero. Quiero que vengas conmigo.

-Rubén yo...

-Por favor...

-Esta bien. Iré. Pero promete me una cosa.

-La que sea.

-Que estarás siempre conmigo.

-Lo prometo.

-¿A que hora pasas a buscarme?

-Estoy llegando a tu casa.

-¿¡Qué!?- dije entre risas.

-Que si- rió.

-Te va a ver mi padre, espera me en el lago.

-Valep, te espero.
*Fin de la conversación telefónica*

Cogí un bolso de mano -bastante grande- metí ropa y lo tire por la ventana. Cogí mi móvil y bajé por la enredadera. Al bajar, cogí la bolsa y corrí al lago. Vi a Rubén contento y nervioso. Me acerqué a él y me tiré encima suya, rodeando mis piernas en su cintura -habíamos cogido mucha confianza-, le tapé los ojos, él me cogió y sonrió.

-¿Quien soy?- le susurré en el oído, cambiando la voz a una mas grabe.

-¿La persona más marvá que se a escapado por descubrir Madrid?

-Hum... Eres malo- dije y le quité las manos de los ojos y las rodee en su cuello.

-Pero me quieres- dijo y me bajé.

-Más te gustaría.

-Gñe con eso me basta. ¿Vamos?

-Vamos.

*****

Caminamos hasta su casa, y después cogimos un taxi Mangel, Rubén y yo hacia el aeropuerto.